Capítulo 4.1

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Al desabrocharlo, el sonido metálico de la hebilla hizo que Dae le mirara por encima del hombro con ojos brillantes. MinSeok le dio una sonrisa desvergonzada y lentamente sacó el cinturón por las trabillas de sus vaqueros antes de dejarlo caer en el suelo. Después de quitarse el suéter y echarlo a un lado, se quitó los zapatos y se quedó solo con los vaqueros y los calcetines.

Los ojos de Dae lo recorrían por todas partes, su piel se calentaba a medida que lo miraba, y cuando se lamió el labio inferior como si no pudiera esperar a lo que estaba a punto de suceder, MinSeok sintió que su polla se movía detrás de su cremallera.

Jodido infierno, el hombre va a hacer que me corra incluso antes de que me acerque lo suficiente como para poder tocarlo.

Dae debió haber notado el efecto que su mirada estaba teniendo, porque sus ojos bajaron a la parte más abultada, que era muy evidente en sus pantalones, y lo observó con una expresión voraz cuando MinSeok se desabrochó la cremallera.

Empujó sus vaqueros y su bóxer al suelo y se quitó los calcetines para pararse desnudo. Luego colocó una rodilla en el extremo de la cama y preguntó:

—¿Estás listo para esto, Dae?

Si la forma en que Dae empujaba su culo en el aire hacia él era una clara invitación, estaba más que listo. Pero MinSeok quería una respuesta verbal antes de ir más lejos. Se subió a la cama y agarró los lados de los pantalones y el bóxer de Dae y los arrastró sobre la curva de su culo.

—Perfecto —comentó MinSeok mientras pasaba la palma de su mano sobre las bronceadas las nalgas de Dae—. Sé que he dicho esto antes, pero tu culo es jodidamente perfecto.

Hmm. —Un profundo gemido dejó la garganta de Dae cuando MinSeok clavó los dedos de su mano en un lado de su cadera y tiró hacia él—. MinSeok.

—Me encanta la forma en que dices mi nombre así —confesó, y luego cogió el otro lado de la cadera de Dae para poder frotar su erección palpitante contra toda esa piel desnuda—. Dilo otra vez.

Dae dejó caer la cabeza desordenada de rizos hacia adelante y con voz ronca dijo:

MinSeok...

MinSeok pasó un dedo juguetón por la base de la columna vertebral de Dae, y cuando llegó a la hendidura, coqueteó con ella, empujando su dedo entre la grieta caliente.

—Sí, así es como me gusta. Quiero oírlo justo así cuando empuje mi polla dentro de ti. ¿Lo entiendes?

El cuerpo de Dae vibró bajo sus manos, y MinSeok dejó escapar una risa seductora mientras se inclinaba sobre él y le apartaba el pelo a un lado. Cuando colocó sus labios en el oído de Dae, MinSeok lo acarició con sus manos por los lados de sus muslos y apoyó su dura erección contra él, deleitándose en el grito áspero que dejó la garganta de Dae.

—Lo quieres, ¿no es así, Dae?

Cuando Dae no respondió de inmediato, MinSeok arremetió las caderas... duramente contra Dae.

—Puedes tenerlo. Puedes tenerme cuando quieras. Como sea que te guste. Pero sería mucho más fácil si viviéramos juntos. ¿No crees?

—Jesús —maldijo Dae, agarrando la mano de MinSeok, que descansaba en la parte superior del muslo—. ¿En serio estas pidiéndome esto ahora?

—Solo estoy tratando de demostrar mi punto...

Dae se levantó, y cuando ambos estaban arrodillados y el chaleco que cubría su espalda estaba contra el frente de MinSeok, giró su cabeza para hacerle frente.

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