📚V E I N T I U N O📚

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—Diablos, Thery, pareces un ángel con ese vestido —Le alaga George mientras le pasa un vaso de ponche.

Heather llevaba un vestido sencillo blanco por debajo de las rodillas y mangas largas, su cabello rubio suelto y unos botines cafés. George recordó que cerca del baño de prefectos en Hogwarts había un retrato de un ángel rubio que siempre sonreía, era muy bonita, y en ese momento, George creyó que el retrato había cobrado vida y transformado en Heather.

—Ni yo te compro ese piropo, hermano, esfuerzate —Se queja Ginny desde su cama.

—Oh, callate, tarada —Se defiende George. —¿Vamos abajo, Heather? La cena ya casi está lista, los chicos estan tirando fuegos artificiales.

—¡Quiero verlo! —Chilla la rubia dando pequeños saltitos de emoción.

Los dos salen hasta las afueras de la madriguera a observar a Harry, Ron y Hermione tirar fuegos artificiales de colores, la nieve ya comenzanba a tapar más el pasto de las colinas y las copas de los arboles reflejando así todos los colores de las pirotécnias.

—¿Quieres lanzar uno? —Murmura Harry y la rubia asiente.

Se aleja un poco de George solo para tomar una de las varillas rojizas.

—Solo tomala del lado de madera y apuntala hacia arriba mientras la sacudes un poco.

Heather hizo lo que la castaña le enseñó y luego vio como una pequeña luz salió disparada de la varilla expandiendo su luz anaranjada en el cielo bañando la oscuridad de luz.

Siguieron un rato más mientras George vigilaba que Heather estuviera comoda hasta que Molly Weasley los llamó para cenar.

—Bueno, muchachos —Habló Molly sentada a la punta de la gran mesa. —Esta noche es una navidad muy diferente, es nuestra primera navidad sin nuestro Freddie... —Heather sintió como George se aferraba a su cintura en un acto inconsciente de sentirse seguro, la rubia tomó su mano haciendo pequeños circulos en su palma. —Y sé que es muy difícil, en especial para Georgie —Él mencionado hace un asentimiento de cabeza dándole la razón a su madre. —Pero estoy segura de que nuestro Fred no quisiera vernos mal, así que celebremos en su honor, y celebremos por nuestra invitada especial, la hermosa Heather.

La rubia se ruborizó ante su mención cuando todos giraron a verla y no pudo evitar aferrarse más a George intentado ocultarse.

—Gracias por recibirme en su casa, Molly, Arthur, de no ser por ustedes estaría trabajando toda la noche.

—Nadie debe trabajar en navidad, querida, creeme que eres más que bienvenida cuando quieras.

Heather asintió sus ojos picar en señal de que estaba a punto de llorar. Sin duda nadie le había dicho palabras tan bonitas.

La cena transcurrió entre bromas y anécdotas haciendo divertida la noche. Divertida y única.







Holaaaaaa! Oigan estoy muy emocionada! 1k de lecturas! Sé que para algunas personas no es mucho pero para mí es una victoria :) en serio muchas gracias por todo el apoyo🧡✨

𝐁𝐑𝐎𝐊𝐄𝐍| 𝚐𝚎𝚘𝚛𝚐𝚎 𝚠.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora