𝐁𝐑𝐎𝐊𝐄𝐍| 𝚐𝚎𝚘𝚛𝚐𝚎 𝚠.

☕V E I N T I C I N C O☕

Por fin llegó el día de año nuevo, habían logrado mantener escondida de Heather toda la magia, el día de hoy sólo quedaba celebrar un curioso fin de año.

En definitiva fue un año agridulce, porque no sólo Fred había muerto aquella noche, también lo hizo Remus y Nymphadora Lupin, dejando a su pequeño hijo de pocos meses al cuidado de su abuela Andromeda, sin embargo hoy Harry lo trajo para que pasara esa noche con ellos, le habían puesto un hechizo en el cabello para que este fuera castaño y no azul turquesa como siempre.

Y allí estaba Heather haciéndole mimos al pequeño Teddy Lupin junto a Ginny y Harry cerca vigilando a su ahijado.

—En serio es buena con los niños —Le aseguró Bill a George que observaba a la distancia.

—Ya lo creo —Murmura este divertido.

—¿Ella te gusta? —Preguntó sin rodeos.

George ríe. —Ella es mi ángel —Confirma. —Llegó a mi vida en un momento de absoluta oscuridad exparciendo su luz.

Fue el turno de Bill de reír. —Ella es muy bonita, y dulce , a mamá le agrada y ellos dicen que no importa que sea muggle...

—Claro que no importa, es sólo que... Ella sólo me ve como el tipo que no la dejó sola.

—Todo a su tiempo, hermano —Aconsejó el mayor de los Weasley.

—Aun no estoy listo para que ella ocupe el lugar de Fred en mi corazón o en el departamento.

—Es que no lo hará, Fred siempre estará en nuestros corazones, y a él le gustaría que tu avances también. Mira a Teddy —Señala al bebé. —Él perdió a ambos padres antes de siquiera poder memorizar sus rostros, y tendrá que crecer con eso, pero para eso tiene a Harry, y a nosotros. Así como tú, hermano.

George le sonrió a su hermano, necesitaba esos consejos muy en el fondo.

—¡George! ¡Ven! ¡Mira! —Le llama Heather mientras le hace muecas extrañas al pequeño Teddy.

Ginny le quitó al niño apresuradamente mientras Heather lo miraba estupefacta.

—Ya te dije, Heather, fue alucinación tuya —Le explicaba Ginny a la rubia.

—George, yo lo vio ¡sus ojos eran morados! —Le intentó explicar al más alto.

George miró a Harry de reojo. Al parecer se les olvido hechizar sus ojos.

—Mejor acompañame a comprar lo que falta para el postre ¿sí? —No esperó a que Heather le respondiera y se la llevo rápidamente tomándola de la mano fuera de La Madriguera.

Mientras Ginny se quedó a regañar a Harry por el descuido de los ojos de su ahijado.