🚫 Advertencia 🚫
"Este capitulo puede contener lenguaje sexual explícito.
—Llevo toda la noche mirándote como un idiota y hasta tus botas militares me parecen ya encantadoras. Y ahora que te tengo a mi lado, sólo puedo decirte que te deseo, Melody, te deseo salvajemente con toda mi alma y con todo mi ser y necesito preguntarte sí tú sientes ese deseo salvaje por mí.
Lo sentía. Claro que sí, y más tras aquellas palabras; sin poder negarlo, asintió
hechizada y Dimash sonrió. Aquella sonrisa tan sensual, tan segura y cargada de morbo le puso el vello de punta a Melody y él, tras darle un rápido beso en los labios, propuso.—Vamos. Acompáñame.
Sin soltarse de su mano, caminó por la calle hasta que Dimash paró un taxi.
Una vez dentro, él dio una dirección y cuando llegaron a la calle serrano y el taxi paró, dijo.—Tengo un ático aquí. ¿Quieres que subamos?
Consciente de lo que significaba aquella invitación y deseosa de él, la joven
asintió sin dudarlo. Dimash pagó la carrera y de la mano entraron en el lujoso portal. Era impresionante.
En el ascensor, Dimash no la besó como ella esperaba. Se limitó a mirarla con intensidad y cuando aquél se detuvo y se abrió, la invitó a salir.
En el pasillo ambos se miraron y Dimash, tras abrir la puerta con la llave, dijo incitándola a entrar.—Adelante. Estás en tu casa.
Con inseguridad, ella entró. Tanto lujo la apabullaba. Una vez dentro, Dimash cerró la puerta del apartamento y encendió las luces. Al iluminarse la estancia, Melody suspiró. La entrada de aquella casa era enorme.
—Ven conmigo —pidió él cogiéndole la mano de nuevo. La condujo hasta un amplio salón de suelos de madera oscura. Una vez allí la soltó y se dirigió hacia un mueble bar.
—¿Qué quieres beber?—Lo mismo que tú —respondió con la boca seca.
Dimash sonrió. Se preparó un whisky para él y a ella le sirvió una Coca-Cola.
Sin duda Melody agradecería más aquella bebida. Mientras ella miraba con curiosidad todo a su alrededor, él la observaba con disimulo.
Aquel lugar era impresionante y aunque la decoración no resultaba totalmente de su agrado, no le cupo duda de que aquellos muebles eran antigüedades.
Se acercó hasta ella y le entregó el vaso con el oscuro líquido chispeante.—¿Estás asustada? —preguntó mirándola con profundidad a los ojos al verla tan callada. Ella negó con la cabeza, asombrada por la pregunta.
— Te hubiera hecho el amor el día en que te vi en el Starbucks. Te hubiera hecho el amor en mi despacho. Te hubiera hecho el amor sobre una de las mesas del restaurante. Te hubiera hecho el amor en el ascensor. Te…Ella no lo dejó continuar. Le puso un dedo en los labios y murmuró.
—No hables más y házmelo.
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𝐶𝐴𝐹𝐸 𝐶𝑂𝑁 𝑆𝐴𝐿.
FanfictionMelody es una joven moderna y extrovertida a la que le encanta salir con sus peculiares amigos. Aunque no es el trabajo de sus sueños, se gana la vida como camarera en el restaurante del hotel Villa Aguamarina de Madrid. Un día, a la salida de una f...