Miénteme otra vez [Joerick]

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Dedicatoria a isa-fernanda y brenn998
Gracias por leer mi fic. :³

—Su nombre es Joel Pimentel, un alfa nacido de una manada extinta de leones. Su madre era hija de un empresario de compra y venta de terrenos, ella fue arquitecta. Un año después que su hijo nació sufrió una gran enfermedad inexplicable que acabó con su vida, su padre era el ceo de las empresas Pimentel, murió en un accidente de auto antes de que el joven Pimentel naciera, éste fué criado por los empleados ya que ningún familiar se quiso encargar de un león de sangre pura ya que tienden a pensar que los leones son peligrosos por naturaleza— miró el papel y volvió a leer —Un día recibió un papel de la nada con el lugar donde su hijo se metió para conseguir dinero... éste lo compro por...

—Creo que ya es suficiente, gracias por la información— dijo Daniel tomándo la carpeta y viendo la foto de aquel alfa —¿Cuánto crees que dure éste alfa sin caer rendido a los pies de Erick?—

—Según tengo entendido, él solo fué al club por curiosidad y por buscar a alguien con quién pasar el celo, no creo que se enamore del señorito Erick— habló tranquilo.

—Quizás... pero cuando algo está escrito sucederá...— Smith giró su silla mirando el gran cuadro —Y ahora ella no está para impedir las cosas, sabes, lo peor— el chico guardó silencio —Quiero creer que no sufrirá, pero mi hijo nació...

—El joven Erick es listo señor, él seguro sabrá resolver el problema y salir de allí, sólo es un contrato de 1 año— dijo intentado tranquilizarlo.

—¿Dime cuánto se tarda en saber que una persona estuvo destinada a ti desde un principio?— el chico miró —¿También dime cuantos tardas en saber que aquella persona es la persona que amas para toda la vida? O lo mejor de todo ¿Cómo sabes que esa persona puede ser la que te destruya?— sonrió —1 año, 5 meses— suspiró —Se que Erick volverá aquí y tú— señaló al chico —Tu estarás para ayudarlo—

—Cuente con eso señor—

—¿El contrato?— Erick asintió —Está bien— Joel dió la vuelta, fue hacia la estantería y saco un libro abriendo así un cuadro donde mostraba una caja fuerte, el alfa avanzó hacia ella y empezó a poner el código, el ojiverde intentaba mirar por encima del hombro del alfa, se acercó más y pudo observar papeles billetes y un arma, algo que le sorprendió, ya que él entendía que hace tiempo las armas de juego estaban prohibidas, desde 2029.

Joel cerró rápidamente y giró encontrándose al omega.

—Aquí lo tienes— Erick miró el contrato y lo agarró llevándolo rápidamente a la mesa.

—¿Lo leíste?—

—Claro, también le envié a mis abogados, porque crees que te tengo aquí, aún si veía un fallo...

—Me devolvías— dijo Erick, el alfa elevó la ceja y sonrió —Tranquilo entiendo— miró el contrato, las hojas y lo empezó a leer en vos alta —Por el contrato hecho en el establecimiento de Rose C.A por la compra de un omega durante un año, el señor JOEL PIMENTEL a de establecer unas normas— Erick miró al alfa, éste solo lo observaba —1 podrá hacer o deshacer todo al omega dando por hecho en ámbito sexual y no sexual, 2 cuando finalice el año él omega comprado podrá decidir quedarse con el alfa, volver al club o recuperar su libertad— Erick no pudo ocultar su sonrisa al leer esas palabras.

“Libertad” dijo su animal.

—Dando por hecho que también durante el año queda estrictamente prohibido que si el omega llega a quedar en estado, en ese caso el alfa...

—Erick yo creo que— Joel hablo pero Erick lo mandó a callar.

—Puede decidir quitar la patria potestad al cachorro o dejar que el omega se quede con él sin tener ningún contacto con el cachorro— Erick tomó el otro contrato y lo miró —Cualquier falta del contrato el omega será devuelto y se perderá el dinero invertido en él— el ojiverde lo miró y sintió como algo dentro suyo comenzaba a alterarlo quizás su omega o quizás otra cosa solo se le ocurrió decir, mientras cerraba el contrato.

—Tu— miró al alfa —¿Me lo quitarías?— el alfa calló y solo suspiró.

—¿Tu, te embarazarías de mi?— y esta vez fue el omega quien no supo que decir, Joel se acercó a él y lo levantó atrayéndole hacia él —Erick...— éste lo miró.

—Miénteme Joel— el moreno rió y le dio un beso en los labios.

—Erick... yo entiendo tu sentimiento y nunca te haría ese mal— Erick lo abrazó y sólo lo dejó de pensar, realmente no quería averiguar si acaso Joel le había mentido o no.

Solamente sabía que ahora mismo solo tenía que esperar al año para salir de allí, total 11 meses ¿no? había aguantado 18 años, un año no es nada.

—Te amo Joel— dijo Erick mientras más fuerte lo abrazaba.

Sigo viva!!!
:3