Miénteme otra vez [Joerick]

25

Joel abrió su armario y no encontró su traje, se giró y se encontró con el ojiverde y una sonrisa en su rostro.

—¿Te gusta?—

—¿Dónde están mis traje Erick?— preguntó serio

—¿Trajes? Yo no he visto de eso— sonrió

—Erick Pimentel, en dónde metiste mis trajes?— Erick rió, y abrazó al moreno colocando sus brazos alrededor del cuello del alfa.

—No te preocupes, están guardados en otro armario y quería decirte llame a tu empresa— Joel elevó las cejas.

—¿Para...

—Tienes...— se aparto de él fue hacia el calendario arrancó la hoja de éste —7 meses de vacaciones— sonrió

—¿No crees que es muy exagerado 7 meses?— Erick sonrió.

—Eres el CEO, no pasará nada— sonrió —¡VAMOS A DISFRUTAR ESTOS 7 MESES!— sonrió —Ponte ropa cómoda, hoy vamos a salir a correr— Joel elevó la ceja

—¿Perdón?—

—Vamos no jodas Joel, eres un leon como te puedes cansar!?— Erick subió la montaña mientras Joel se agarró el pecho intentando recuperar el aliento.

—Tu... tu realmente me quieres matar— se intentó sentar pero él omega negó y lo agarró de la mano.

—¡No, vamos a llegar a la cima de la montaña y luego descansas, vamos con 20 años no puedes parecer un viejo!— Erick subió la montaña agarrando de la mano del moreno alentándolo, Joel lo miraba aunque éste tuviera la frente llena de sudor, se veía igual de hermoso que siempre.

Caminaron un rato más hasta llegar a la cima donde pudieron ver todo el paisaje, lo más bonito del mundo, pero cuando Joel giraba su cabeza se encontró con el ojiverde y le resultó más hermoso él que el mismo paisaje.

—¿Es hermoso verdad?— dijo Erick sonriendo, Joel también lo hizo mirándolo

—Mas que hermoso— Erick lo miró y sonrió.

—Tengo ganas de enseñarte todo lo que haremos estos 7 meses hasta el último dia— sonrió.

—¿Hasta el último?— preguntó, Erick sonrió.

—Te has tirado rodando por una colina?— el alfa elevó una ceja y sin más vió cómo Erick se acostaba en el suelo y comenzó a rodar para luego transformase en el leon que era, Joel sonrió e hizo lo mismo.

Los dos leones corrieron por todo el bosque, disfrutando como la brisa golpeaba su rostro y sus melenas se movían con el aire. Erick paró sentándose y observó al león.

"Vamos alfa" lo retó colocándose en forma de ataque, el alfa lo miró y gruñó para luego lanzarse hacia él.