Stupid Tops (Larry Stylinson) EN EDICIÓN

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-¡No, aléjate de mi!- Gritó el chico bajito de ojos azules, mientras miraba con horror la blusa roja con flores que Carly sostenía.

-Bueno, que exagerado eres, Lou, con un no era suficiente- respondió la pelirroja rondando los ojos.

-Te dijo que no hace cómo diez minutos, Carls- Kelly miraba a su amiga tirar la blusa a un lado de la cama.

-Cómo sea, pruebate esto, que Nini y Chim no tardan en llegar-. La chica le arrojó una playera blanca con un estampado colorido.

-Esto, esto sí me lo pondré- Louis se colocó la playera y la acomodó de una
manera en la que acentuara su figura.

Dio una vuelta sintiéndose bien consigo mismo, su antiguo yo de quince nunca hubiera salido así,  era muy desconfiado para eso.
Pero al pasar de los años había aprendido a amarse, con sus rollitos, su piel bronceada y su cabello castaño.

Vivía a base de la frase: Si tu mismo crees que eres hermoso, todo el mundo creerá lo mismo, así que actúa cómo lo que eres.

Sus pensamientos fueron interrumpidos por el timbre.
Niall y Jimin deben estar en la puerta, esperando a que el de ojos azules baje.

-Son ellos, adiós chicas, disfruten su pijamada, por cierto, díganle a Liza que tomé su labial-.

-¡Escuché eso!- Gritó la mencionada desde el baño.

Bajó rápidamente las escaleras y abrió la puerta encontrando a sus amigos vestidos de manera casual y relajada.
Los tres decidieron ir lo más cómodos posibles para poder bailar y divertirse con comodidad esa noche.

Después de un saludo y unos cuantos halagos, subieron al auto del rubio y manejaron hasta llegar a la casa del joven de cabello rizado.

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-No puedo creer que te vomitara encima ¡Ja!- Liam se burlaba de su castaño amigo soltero. Sin embargo su risa se detuvo al sentir un golpe en su pecho -¡Pero Zy! Es gracioso-.

-Lo es, pero tu amigo necesita que lo ayudes, no que te burles-. Gruñó el más bajo antes de alejarse de su acompañante para hablar con Josh.
-Estas cosas pasan Joshie, a la próxima no trates de hablar con chicas súper ebrias-. Aconsejó mientras le daba una servilleta.

La música estaba al tope, todos parecían estar concentrados en bailar, hablar a gritos o besarse desesperadamente.
Ya saben, cosas de fiestas adolescentes.

Sin embargo dos chicos se encontraban esperando en la puerta de la casa.
Harry y Yoongi, el primero, esperaba a su novio y el segundo le hacía compañía.

-¡Venga! Harry, baila conmigo- Oh, casi lo olvido, Jade también estaba ahí.
La chica no había dejado de seguir al ojiverde desde que había llegado, claro, el alto muchacho no tenía idea de las intensiones de la pelinegra, por lo que la dejaba quedarse con él y su amigo, pensando que sólo quería compañía.

Estaba a punto de responder cuando vio a la persona que tanto esperaba.

-¡Lou!- Sin importarle que el peso de la chica estuviera apoyado en él, corrió hacia su novio y lo abrazó cómo si no lo hubiera visto en años.

-¡Hazza!- Una suave risa abandonó sus labios antes de comenzar a repartir besos en el rostro de su apuesto novio.

-Mira esto, apenas llegamos y ya empezaron con sus cosas amorosas- Niall se quejó mientras los miraba con una mueca de asco fingida.