Simplemente Todo Cambio.

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Después de hablar un par de horas mi amiga y yo, decidimos terminar de acomodarnos en la pequeña cabaña, decidimos dormir ya que hemos tenido un largo día.

A los pocos minutos mi mente comienza a viajar a un lugar que tal vez lo he reservado, me cuesta admitir ciertas y cosas y sobre todo sentimientos, me cuesta siempre demostrar, no suelo decir siempre lo que siento, pero muchas veces me gustaría serlo.

Me es duro admitir que llegue a sentir algo por alguien en especial, como ahora me pasa me siento un poco desesperada y un poco atrapada. Se que tengo que ser sincera conmigo misma pero es un poco difícil si toda mi vida he Sido así, pero supongo que ya es tiempo de poder ser honesta conmigo misma.

Se me viene a la mente Rodrigo y cada que eso pasa, suele ser algo confuso, miles de preguntas invaden mi mente.

¿Le gustare?, ¿A caso sintió algo cuando nos besamos esa vez?, ¿Por qué me besó?, ¿A caso quería hacerlo de verdad?, ¿De verdad querrá a su novia?, ¿Por qué la engañaría de esa forma?.

No tengo ninguna respuesta a todas esas tipo de preguntas, solo si me atrevo a preguntarle pero ni siquiera soy capaz incluso de mandarle un mensaje.

Soy tan ingenua que llegue hacerme ilusiones con el o que al menos siente algo por mi.

Sin darme cuenta ya es de día, un sonido me despierta, tardo unos minutos en darme cuenta que no estoy en mi habitación sino que en una pequeña cabaña, observo al otro lado de mi angosta cama y observo que una luz parpadea y vibra la pequeña mesa de noche que está junto a ambas camas, tardo en darme cuenta que es el celular de Miranda, supongo que debe tener unos 10 minutos sonando, pero ella no se despierta, después de unos segundos se apaga y vuelve a la normalidad, un silencio invade la  pequeña habitación solo se logra escuchar el cantar de las aves y el aire que resuena en las hojas de los grandes árboles.

-"Paz"- es lo que puedo describir, supongo que de tanto pensar en Rodrigo me quedé dormida y espero que este  fin de semana me ayude a por fin aclarar mis ideas y sobre todo mis sentimientos.

Decido levantarme de mi cama y voy directo al baño, después de unos minutos mi amiga también se levanta.
Ambas nos servimos café de una pequeña cafetera que se encontraba en la cabaña.

-Buenos días Moni- dice Miranda llevándose la taza de café a los labios.

-Buenos días Mi- así le digo yo de cariño, mientras le hecho azúcar a mi taza de café.

-¿Cómo amaneciste?- le da un sorbo a su café y continua.

-Espero no haber roncado- y está vez hecha su cabeza hacia atrás muerta de la risa.

-Amanecí bien, pero para nada- me llevo la taza de café a los labios y le doy un sorbo a mi café.

-De acuerdo de acuerdo, ¿Qué haremos hoy?- hace una pausa.

-Después de ir por tu amiga, perdón que me quedara a dormir a noche aquí pero ya sabes estuvo tan buena la plática- se lleva la taza a los labios y comienza a reír.

-De seguro me echará la bronca Raúl- y se vuelve a reír, su risa resuena por toda la habitación.

-No pasa nada amiga, al menos me hiciste compañía- y la acompaño riéndome también.

Después de ella hablarle a su novio el se reúne con nosotras en la cabaña.

-Buenos días señoritas- el va directo a su chica y le da un beso en la frente.

Ella hace un tierno gesto y cierra los ojos disfrutando el tierno beso que le acaba de dar su novio.

-Buenos cariño dejemos a Moni cambiarse y yo tengo también que cambiarme, amiga nos vemos en unos 15 minutos en la palapa que se encuentra aquí cerca- me guiñe un ojo, le da una pequeña palmada a su novio y ambos salen de la habitación.