Diamon Tears (Adrinette)

≻─⋆✩⋆ ─≺ Capítulo 3 ≻─⋆✩⋆─≺

Ya estaba oscuro. Adrien era afortunado, porque de normal Marinette no dejaba su departamento a esta hora. Ella siempre tenía cuidado de su alrededor – ya sea por miedo a la oscuridad o miedo a lo que pudiera encontrar. Cualquiera que haya sido la razón, Marinette estaba dejando su hogar alrededor de las 9 pm – esta era una oportunidad que Adrien no dejaría pasar.

La oscuridad le daba a Adrien suficientes oportunidades para esperar en una esquina, y a pesar de la ligera luz de los postes, aun había suficiente para que todos pudieran notar el rostro de Adrien.

El asesino no dudó en derribar a Marinette en la forma más gentil que pudo, colocando un pañuelo de cloroformo contra su nariz. No hubo suficiente tiempo para que Marinette reaccionara y gritara por ayuda. La única reacción que Adrien vio fue cuando sus ojos se abrieron grandes en señal de sorpresa y shock antes de que sus músculos cedieran. De no ser por el fuerte agarre de Adrien alrededor de la cintura de la chica, Marinette ya habría caído.

—Dulces sueños, —Adrien susurró. —Lamento tener que hacerlo de esta forma, pero no es mi culpa que no hayas querido cooperar. Lo menos que podrías haber hecho era dejar que te llevara con Lila para que te hiciera una propuesta.

Conocía esa expresión. Adrien lo había visto antes, en el breve segundo de consciencia que le quedaba a Marinette antes de caer desmayada. Era una mirada de miedo, pero ahora que estaba viendo a la chica por primera vez después de haber sido capturada, la mirada de horror se había multiplicado.

Fin del flashback

—Ah, —Adrien dijo, sonriéndole. Marinette estaba sentada en la misma silla en el sótano, con las manos esposadas y las piernas atadas a la silla.

«No era necesario.» Adrien pensó. Marinette lucía derrotada; no podía detectar ánimo de pelea, y aun si todavía estaba ahí, la chica estaba muy débil para pelear.

—Marinette, ¿cierto? Lamento haberte asustado la última vez que nos vimos.

Marinette ni siquiera lo miró, pero estaba bien. Solo ese breve momento de contacto visual en el momento en que Adrien entró, fue suficiente. No necesitaba asustar más a la chica, quien era solo una niña a sus ojos.

«Marinette se veía tan frágil y sobre todo inocente.»

Adrien se sentía ligeramente mal por traerla aquí e involucrarla con cosas de la mafia, pero si era orden de la jefa, si era orden de su hermana, entonces Adrien no podía desobedecer.

Hubo silencio entre ellos. Adrien no estaba seguro de por qué había ido a verla. Ni siquiera había hablado con Lila sobre ello. Había sido una decisión espontanea ir y saludar a la chica. Puede que fuera la culpa que lo carcomía. Nunca había sido fan de involucrar civiles aun si trataba de minimizar el daño – de normal sus objetivos eran personas corruptas y de otras organizaciones. Pero no Marinette, una simple niña, apenas salida del colegio. Una niña que tenía toda su vida y todas las maravillosas opciones y oportunidades abiertas hasta que Adrien llegó y le quitó todo.

«Marinette lucía triste, temerosa y herida. »

Algo en el pecho de Adrien se apretó. Él nunca había sido capaz de ver a niños asustados o heridos y la forma en la que Marinette se encontraba hacía que Adrien tuviera recuerdos nada placenteros de su niñez. Le hacía sentir peor toda la situación ya que podía ver algo de sí mismo en la chica sentada ahí.

—Verás... —empezó a decir con voz sorprendentemente suave. —No hay necesidad que sigas aquí. No hay ni necesidad de esposarte y encerrarte aquí si tan solo cooperaras.

No hubo reacción, excepto el movimiento de sus dedos. Adrien pensó que era respuesta suficiente; él solo quería que la chica escuchara y regresara a sus sentidos. Toda la violencia aquí no sería necesaria si Marinette hacía lo que Lila le había pedido, pero ahora mismo la chica estaba boicoteándolos. A ojos de Adrien era tonta, en especial con todas las ofertas que Lila había hecho, los beneficios que Lila estaba dispuesta a darle en retribución a unas cuantas lágrimas que se convertían en diamantes. Cuando comparaba todas las cosas que Lila había enlistado, dispuesta a cederle cosas a Marinette, la negación de la chica se sentía tonta.

—No tendrías que salir lastimada si solo cooperaras y nos dieras lo que te pedimos. En retribución, serás tratada de una mejor forma. También serías protegida. Serías parte de la familia. ¿No te parece bien eso? —preguntó, pero no hubo respuesta. Adrien rió. —Te gusta los malos tratos, ¿no? ¿Crees que nos gusta lastimar a niñas bonitas como tú? No nos lo pongas difícil. —Adrien dijo. Se acercó y alzó el rostro de Marinette, sorprendido ante el pequeño brillo en sus orbes azules. No brillaban con lágrimas, pero eran muy expresivos ahora mismo. Marinette estaba mirándolo fieramente antes de escupir al suelo y le sonrió de forma altanera – eso divirtió mucho a Adrien.

El rubio dejó que su mano acariciara la amoratada piel, notando la forma en la que Marinette tembló ante su roce; sus delgados labios temblaron cuando pasó un pulgar sobre ellos.

—Eres adorable, ¿sabes? Alya tenía razón. Las chicas adorables no deberían ser lastimadas así.

—Entonces deja que me vaya, —Marinette dijo por primera vez – un simple susurro lo audible suficiente como para que Adrien escuchara.

El rubio retrocedió y sonrió, pero Marinette no dejó de mirarlo con cautela.

—No soy el jefe, así que no sé si eso es posible. Dudo que la jefa te deje ir. Te dieron algunas opciones. Coopera y danos los diamantes o sino tendremos que tenerte aquí hasta que aceptes. Sabes los resultados que vendrán con cada opción, así que ¿por qué no escoges algo más beneficioso para ambos?

Aún estaba la misma mirada de miedo en el rostro de Marinette, pero lentamente cambió a algo más. Había rabia, desesperanza, inconformidad incluso. Era toda una mezcla familiar que hacía que Adrien se sintiera incómodo, aun así no podía apartar la mirada; necesitaba aparentar fortaleza.

—¿Crees que puedo controlarlo? —Marinette siseó. —No es una opción que puedo elegir cuando quiera. ¡Nunca lo ha sido!

Adrien parpadeó, sorprendido ante el estallido, pero le recordó una charla que había tenido hace una semana.

Continuará...

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Yo solo vengo a dejar esto y me vooooy~ lentamente~😗😗

Besitos de murciélago para todos~💀🤘🏻❤💋