¿Dónde será la boda?

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Por DAW175

3:00 p.m el quinto lugar de la lista.

Gracias a que ella se había tomado el día libre y él no tenía planes para hoy, lograron acompañar a sus padres, además de que al final ellos debían dar el visto bueno para el espacio dónde unirían sus vidas para siempre…

Era un día soleado, las pequeñas nubes viajaban movidas por las rafajas del viento alrededor del cielo. ¿El problema? No eran lo suficientemente grandes como para cubrir el inmenso sol por unos instantes y conseguir cubrirse de este caluroso y cansado día.

Lo que había iniciado como un plan divertido y ameno entre las dos familias terminó siendo todo lo contrario. Yelan lo dijo, "deben saber que no se trata de un día de paseo, tenemos la misión de hallar el mejor lugar para la boda" en su mente esa oración había sonado muy sencilla, pero no imaginaba lo que se vendría.

Después de la cena dónde anunciaron a todos su compromiso, las preguntas no se hicieron esperar: ¿Han pensado en la comida? ¿El vestido? ¿El traje? ¿La luna de miel…?

Entre todas estas incógnitas la que parecía ser la más sencilla era el sitio, pues ambos enamorados habían determinado que sería en el exterior, específicamente deseaban un bello y amplio jardín; pero no contaban con un detalle… dos de hecho: llamados Nadeshiko Kinomoto y Yelan Li.

Ambas mujeres tenían opiniones duras sobre todos los lugares que habían visitado. El primer sitio era demasiado pequeño para el gusto de la señora Li, Shaoran pensó en cuestionar dicha opinión al haber visto cómo los grandes ojos de Sakura se habían iluminado con la pequeña fuente del centro, sin embargo fueron los mismos ojos que le impidieron hacerlo y así resignado salieron en hacia la segunda opción.

Este era más amplio con algunas flores alrededor y un roble de fondo dónde Shaoran imagino una sesión de fotos con su amada, opinión que se reservó de comentar a los demás cuando la madre de su prometida mostró poco interés por el lugar. Sakura quería hablar con su madre, pero Shaoran le suplicó con una sonrisa que no lo hiciera, la lista de opciones era larga y el día lo era aún más para encontrar ese espacio donde todos se sintieran a gusto.

Y así el tiempo iba pasando, o era demasiado ostentoso para los castaños, o no lo era lo suficiente para sus madres. Fujitaka mantenía la serenidad ante todo y daba siempre una opinión positiva a todos los lugares que visitaban y mantenía la tranquilidad de siempre aunque también estaba cansado.

Hace unos instantes, Nadeshiko se enamoró de un jardín en especial: amplio, con pasto frondoso y el edificio era de lo más elegante para una bella boda… lo malo que no era un jardín social… y estaban invadiendo propiedad privada. Solo Fujitaka sabía lo insistente que podía ser su esposa cuando quería algo.

Y ahí estaban de nuevo. El penúltimo lugar del día, ambas señoras comenzaron el recorrido por el lugar, examinando cada detalle con sumo cuidado, Fujitaka recibió una llamada y se alejó de ambos castaños, dejándolos en una banca del lugar. Shaoran se sentó y Sakura recostó su cabeza en su regazo extendiéndose en la banca, ambos estaban agotados y algo decepcionados, no esperaban que todo esto sucediera.

—¿Quieres jugar a "yo lamento"? —preguntó Sakura, "yo lamento" era uno de los muchos juegos que tenían entre ellos: cada uno decía que era lo que lamentaba en estos momentos y el otro daba una razón para no hacerlo, tuvo origen en su primera cita, cuando estaban tan nerviosos que cada inicio de una oración usaban expresiones de disculpa. Extrañamente, no fue hasta años después que se dieron cuenta de lo raro que fue dicha acción y fue entonces cuando crearon esta extraña costumbre.

Shaoran suspiró y asintió mientras alborotaba su cabello.

—Lamento que a mi madre no le guste absolutamente nada.

Todas las Bodas Necesita un Plan! Donde viven las historias. Descúbrelo ahora