El asesino y El policia. [JIMSU] [EN EDICIÓN]

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—Estoy embarazada.—Esas fueron las palabras que quería decir desde hace mucho tiempo, pero también esas palabras fueron el inicio de mi pesadilla.

Mi esposo sonrió con emoción y me abrazo.—¡No puede ser! Esta es la mejor noticia de todas, me haces tan feliz.—Se separo de mi y su sonrisa desapareció.—Aunque...—arrugo la nariz.

—¿Aunque?.—Pregunte con preocupación.

Acaricio mi mejilla y me sonrió.—Con mas razón debemos de irnos de aquí, sabes que tu padre está metido en cosas peligrosas, ahora que está enfermo, cuando se entere que tendrá un nieto, querrá heredarte todo a ti y estaremos perdidos.—

Apreté mis labios y asentí.—Tienes razón, perdón por tardarme tanto en darme cuenta, tenemos que irnos, mientras aún siga con vida.—

Ni eso me pudo salir bien.

No pasaron ni 24 horas cuando ya estaba en el hospital esperando noticias de mi padre, ahora no podía irme, a pesar de todo el daño que me ha hecho, él es mi padre, no podía dejarlo solo y eso era algo que mi esposo no comprendía.

Después de esperar un par de horas, finalmente una de las enfermeras se acercó —Señora Min, su padre está gravemente enfermo.—Cambie de apellido al casarme con mi pareja, esa fue otra cosa que mi padre desaprobó.—El cancer se extendió hasta sus pulmones, no hay mucho que hacer.—

Apreté mis labios y solté un suspiro. ¿Quién diría que el dueño de la mafia más poderosa de toda corea caería así de fácil? La tristeza nunca llegó a mi, estaba lo suficientemente ocupada pensando en cómo zafarme de la responsabilidad de ser la siguiente jefa, era la única hija que tenía y mi madre murió hace mucho.

Camine detrás de la enfermera y tengo que admitir que me sentí un poco mal al verlo conectado a muchas máquinas, pero me decía que él se merecía eso.

Las personas malas, se merecen cosas malas o eso es lo que pensaba antes.

Pasaron tan solo dos meses y la mafia Kim ya tenía una nueva jefa, era de esperarse, en su testamento me dejó la empresa a mi, no podía negarme, si lo hacia el gobierno se haría cargo y por obvias razones no puedo permitir eso.

A mis 17 años ya me estaba haciendo cargo de una empresa multimillonaria y también era jefa de la mafia...lleve mis manos a mi vientre y suspire, le mandaría todas mis responsabilidades a este hijo, no quería que pasara por lo mismo que yo, él ni siquiera había nacido y su destino ya estaba marcado.

Paso un año exactamente, el velorio de mi padre finalmente se estaba celebrando, el duro conectado mucho tiempo, porque una menor de edad no tenía asegurado el puesto de jefa de la mafia, así que espero a mis 18 años para morir.

Abrace al pequeño Jin, mi hijo, aún era un bebé, el bebé más hermoso que he visto y eso que había visto muchos bebés, antes de ser parte de todo esto, yo le ayudaba a una niñera a cuidar niños, misma que me ayudaría a cuidar a mi hijo.

Las discusiones con mi esposo cada vez eran más fuertes, él no estaba de acuerdo con lo que estaba haciendo, pero tenía que hacerlo, este era mi destino y no podía hacer nada, así que ignoré todo lo que me dijo y comencé a hacerme cargo de la empresa, al igual que de la mafia.

Al principio no me tomaban enserio, los entendía, era una mocosa con mucha suerte o eso es lo que decían, les demostré que no solo era una cara bonita, así que mate a uno de nuestros más fuertes enemigos, yo sola, con mis propias manos. Claro que esto no fue suficiente, más adelante tuve que encargarme de los traidores.

En ese tiempo mi esposo se hizo aún más lejano a mi, ya no me dirigía la palabra,no me tocaba, ni siquiera me brindaba una mirada, lo odiaba, me odiaba...lo perdí todo, mi vida normal, a mi esposo y a...no, nunca voy a perder a mi hijo, él es lo único bueno que tengo en mi vida.