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—¿Seguro que estás bien? Si quieres yo puedo quedarme contigo.—Le guiñe el ojo y YoonGi rió de una manera tan encantadora que me sentí tocar el cielo.

—Estoy bien, si me asuste bastante, como todos los demás, pero gracias a ti ahora puedo estar aquí y bueno...la verdad es que no sé cómo agradecerte.—Desvío su mirada, se veía bastante nervioso.

Demasiado tierno para mi corazón.

Sonreí.—No fue nada, lo hice con mucho gusto, siempre que estés en problemas haré todo lo posible por ir a salvarte.—el asintió y me acerque a él.—¿De verdad todo está bien?.—En camino a su casa y ahora, tenía la misma mirada de preocupación, podría sonreírme y todo, pero yo sabía que andaba algo mal.

Me miro y apretó sus labios.—Quiero confesarte algo, pero no puede ser aquí, es algo privado.—Bajo la mirada y comenzó a jugar con sus dedos.

Las alarmas dentro de mi se activaron, ya había olvidado mis sospechas sobre YoonGi, mi mente me decía que era más que obvio que él era Unlucky cat, pero mi corazón se negaba a creerlo y ahora con esto, me hace dudar sobre su inocencia una vez más.

Me miro y yo no supe cómo reaccionar, no podía moverme, si lo ponía a prueba y él era inocente me odiara de por vida, pero sino lo hago y resulta ser él, yo me odiaría a mi mismo.

Creo que prefiero mi propio odio, al tener que vivir con él odio de YoonGi.

—¿Es algo malo?.—Le sonreí, mientras acariciaba su cabello.

Negó.—Es algo qué pasó en mi vida pasada, así que si fue algo malo, ya no importa realmente.—

—Todo lo que tiene que ver contigo importa.—coloqué mis manos en sus dos hombros y presté atención en su reacción, le había disparado a Unlucky cat en uno de los hombros, tiene que hacer alguna mueca de dolor o alguna señal de que le duele, nadie puede soportar una herida de bala, también, aunque su traje fuera anti balas, el golpe le quedaría.

Me miro y me sonrió de una manera muy dulce, nadie podía disimular una herida así, así que pude respirar tranquilo y lo abrace. YoonGi definitivamente no era ese monstruo.

—Gracias por decir eso JiMinie.—correspondió al abrazo con delicadeza.—entonces supongo que después nos vemos.—Se separo de mi y se dio la vuelta, para entrar a su casa.

JiMin no dejes que se vaya así y ya.

Lo tome de la mano y me miro con los ojos bien abiertos, siempre me encantaron esos ojos gatunos azules, tan hermosos.—Por favor, sal conmigo.—

Abrió su boca sorprendido y se sonrojó.—JiMin...—Baje la mirada al no tener el valor de verlo, no quería que me rechazara o que me mirara con pena.—Me encantaría.—Ahora el sorprendido era yo.

—¿Enserio?.—Rió y asintió.

—Si enserio ¿Cuando y en donde?.—

Me sorprendí un poco, jamás pensé llegar tan lejos, pero no desaprovecharía esta oportunidad.—El sábado, vengo por ti a las 3 de la tarde, te llevaré a comer a un lugar muy bonito.—

Asintió una vez más y abrió la puerta de su casa.—Entonces te espero.—Me guiño el ojo y finalmente entró a su casa.

En cuanto cerró la puerta, suspire como un tonto enamorado y fui hacia la patrulla en donde estaba Taehyung observándome con diversión.—¿Te lanzó un hechizo? Tienes cara de tonto, ah no, esa siempre la tienes.—comenzó a reír y yo simplemente lo ignoré estaba muy feliz.

Entre al auto y no borre la boba sonrisa de mi cara.—Si Tae lo que digas.—encendí el auto y comencé a manejar hacia la estación de policía en donde tenían a los delincuentes y tenía interés de refundir en la cárcel al tipo que tocó a mi YoonGi.

El asesino y El policia. [JIMSU] [EN EDICIÓN]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora