Volkacio Valentine

Día 8 - Estrellas

El comisario se apresuró a llegar al hospital, aparcó la patrulla e ingresó rápidamente al lugar. Como cada día que se dirigía allí, la instalación estaba atestado de gente esperando ser atendidos, sin darle importancia a ese hecho, se dirigió a la recepción. Una chica bastante joven se encontraba al otro lado del mostrador, tecleando en su computadora.

- Priviet - saludó a aquella muchacha.

Volkov iba a proseguir preguntando sobre el agente pero fue interrumpido.

- Comisario- lo llamó la voz de Willy, haciendo que este se girara en su dirección.

El agente estaba en la entrada de uno de los tantos pasillos, llevaba puesto su uniforme y el cabello un tanto despeinado.

- Disculpe - le dijo el comisario a la muchacha antes de emprender los pasos hacia su subordinado.

- Willy, ¿Cuál es la situación?

El ruso se mostraba bastante preocupado por el agente del FBI, Willy no había sido el único en darse cuenta, varios de sus subordinados comprendieron la noche anterior, que para el comisario, Horacio era prioridad.

- Lo encontraron en un descampado, a varios kilómetros de la ciudad - comenzó el oficial - unos civiles que pasaban por allí alertaron a las autoridades - esperó un momento por si el comisario decía algo, pero al darse cuenta que no emitía palabra prosiguió - estaba inconsciente, fue trasladado inmediatamente aquí.

- ¿Dónde se encuentra ahora? - interrumpió el comisario, tenía una gran necesidad de verle.

- Se encuentra en el quirófano, aún no sabemos mucho de su estado.

Con eso el ruso dio por terminada la conversación, en silencio, se dirigió al ala donde estaban operando a Horacio, seguido por el oficial.

Al llegar a la pequeña sala de espera, divisó a Collins sentado en una de las sillas de plástico.

El sheriff había sido el primero en acudir a la escena, vio cómo el cuerpo de Horacio, se encontraba tirado a un lado de la carretera. Su cuerpo estaba cubierto de golpes, había sangre seca en su cara y parecía que su brazo estaba roto.

- Joder macho – fue lo primero que pronunció al verlo en ese estado.

El agente, había solicitado que una ambulancia lo acompañara al lugar, ya que el aviso claramente detallaba a un hombre inconsciente, no pasó por su mente que ese hombre fuera Horacio.

Chris sabía lo imprudente que podía ser el agente, pero de una forma u otra siempre había logrado librarse de las situaciones difíciles, nunca pensó que lo encontraría casi muerto.

Los EMS levantaron con cuidado el cuerpo del de cresta para subirlo a la camilla, seguidamente, lo colocaron dentro de la ambulancia. Collins se mantuvo cerca en todo momento, incluso ahora esperaba a que alguien saliera del quirófano y le dijera cómo se encontraba a quien consideraba un compañero más.

- Priviet - saludó el comisario antes de sentarse en el extremo más separado de la sala.

El silencio se instaló nuevamente, hasta que dos horas después, un hombre salió del quirófano.

- Buenos días oficiales - dijo.

Las tres personas que se encontraban allí se acercaron.

- ¿Cómo está el agente doctor? - habló Willy.

- Bueno - comenzó- el paciente está estable, recibió varios golpes que provocaron unas cuantas fracturas en las costillas, además de una fisura en su muñeca derecha y quebradura en la izquierda la cual tuvimos que intervenir ya que el hueso había sido fragmentado en 3 partes.