Capítulo 9: ¿Qué es lo que sabes?

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Sin poder hacer nada más que luchar para que el soviético dejara de apretarle el cuello, la chilena se resistía rasguñando sus manos llegando a sangrar esperando de que al menos esa heridas bastaran para que la soltara, teniéndola colgando del suelo URSS se le quedo mirando por unos segundo indiferente << ¿de qué me sirve muerta?>> pensó en un momento, si la asfixiaba hasta matarla solo conseguiría problemas con los demás países en especial de los más cercanos a la chilena y tendría que lidiar con el crimen de asfixia por estrangulación, así que para ahorrarse la molestia soltó su cuello dejándola caer al suelo, manteniendo ese semblante serio sin importarle tanto de que la latina apenas podía recuperar el aliento.

-no vuelvas a amenazarme, solo eres un país inferior e inútil... tú no sabes NADA- le dejo la advertencia, tal vez ya no era una "representación en vida" de lo que una vez fue su país pero aún tenía la fuerza para acabar con un insignificante pedazo de tierra.

-*cough*...no me subestimes querido... ¿no recuerdas *cough* las noches... *cough* donde te ahogaste en *cough* el alcohol?- se mantuvo en el suelo por unos minutos intentando recuperar el aire, le dolía enormemente su cuello que llegaba a toser un poco de sangre.

-... maldita perra- lo recordaba perfectamente y por desgracia ella lo había acompañado en algunas noches, siempre terminaba "cuidándolo" o en verdad asegurándose de que no hiciera ninguna locura o tontería bajo los efectos del alcohol.

-si supieras las cosas... de las que puedes hablar bajo... la influencia del vodka- se levantó del suelo lentamente, estaba mareada pero debía ser fuerte si quería enfrentarse a ese tipo.

Al verla tan determinada y segura con sus palabras le dio un aire de nervios, parecía que decía la verdad y eso no era bueno para él aunque no sabía a qué se refería exactamente la chilena cuando dijo sobre tener información sobre sus operaciones ¿sabrá sobre todas o solo unas cuantas? ¿Serán las más graves o solo operaciones normales? Varias preguntas giraban en la cabeza del soviético pero no conseguía respuestas y eso lo alteraba, mientras él estaba metido en sus pensamientos la chilena sonreía satisfecha al ver la cara de preocupación de URSS, lo tenía entre las cuerdas.

-¡escúchame bien ctm! ya me harte de ti... ¡ándate al toque de mis tierras o hare que te saquen a la fuerza! ¡¿Eh sido clara?!- ahora era el momento para echarlo, si esto empeoraba no sabría que podría pasar, si ella saldría herida gravemente o si Third Reich no aguantaría de permanecer escondido y saldría de la habitación para confrontarlo.

-...- no dijo nada, en el fondo estaba furioso por cómo era tratado pero era mejor irse, si ella no lo iba a obedecer ante sus órdenes solo era una pérdida de tiempo seguir en esa casa.

-ahora... ¡fuera de mi casa!- grito con todas sus fuerzas apuntando hacia la salida, le dolía la garganta y apenas se podía mantener en pie pero se obligaba a permanecer erguida.

Se iba a dirigir a la salida pero sus ojos se fueron al sable y el Pickelhaube, le daba rabia ver que a pesar de que esos imperios ya no existían ella parecía seguir siéndoles leal por lo tanto le parecía aún más sospechosa la chilena, algo le decía que estaba ayudando al nazi aunque no podía comprobar pero con que se negara a cooperar en las búsquedas para encontrarlo ya era una pista, aunque no importaba las tantas cosas que le han dicho los Aliados sobre ellos al final no lograron hacer que Chile los olvidara y ahora se encontraba bajo la amenaza de la latina <<¿Cuánto sabe esta mujer?.. ¿Y de dónde saco esa información?>> pensó el soviético antes de continuar con su caminata e irse del lugar.

Cuando por fin se marchó, no dudo ni un segundo en cerrar la puerta con llave para luego apoyarse en esta y dejándose caer hasta que quedo sentada en el suelo, respiraba agitada y se frotaba el cuello por el dolor, de a poco comenzó a marearse y su vista se volvió borrosa, podía sentir que su cuerpo se volvía helado a pesar de que estaba sudando, en sus oídos solo se podía escuchar una voz a lo lejos y la imagen de una persona bajando las escaleras fue lo último que vio antes de perder el conocimiento.

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Pasando las horas la chilena logro abrir sus ojos lentamente encontrándose en su habitación, podía sentir el cómodo colchón y las suaves mantas encima de ella, se sentó esperando a que su visión se mejorara aunque sintió fuerte dolor en su garganta pero se aguantó, el sonido de la puerta abriéndose la puso en alerta pero solo era Third Reich quien entro con bandeja en mano, sus miradas se cruzaron y casi en un instante el alemán se acercó a ella dejando la bandeja en la mesita de noche.

-¡¿Chile como te encuentras?! ¡Ese desgraciado se atrevió a lastimarte! Ya tenía mi arma lista para bajar a matarlo grrrr- había luchado consigo mismo para no bajar a defender a Chile en cuanto escucho como discutían y hubo silencio en un momento.

-descuida...estoy bien...solo...Weimar no estas a salvo aquí, te llevare a la cordillera...tengo una cabaña donde podrás esconderte- le dolía al hablar pero no tenían tiempo, si vino URSS a verla no quería ni imaginarse que podría hacer si los demás aliados llegan a su casa.

-entendido, partiré mañana en la noche... y Chile...- le dejo la bandeja en su regazo, no quería ni pensar en el miedo que vivió con el soviético, con el botiquín en mano se dispuso a ver el cuello de la chilena al ver que se estaba poniendo morado.

-... ¿sí?- comía lentamente debido al dolor, cuando terminase se aseguraría de tomar un antiinflamatorio y un calmante, también hielo para los moretones.

-cuida de Alemania...- le dio una leve sonrisa pidiéndole lo único que quería, que su hijo estuviera a salvo

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Luego de que Chile lo echara de su casa, URSS viajaba hacia el aeropuerto para dejar el país aunque las palabras de la chilena seguían en su mente algo que lo estaba enojando demasiado y lo desconcentraba del viaje << tengo información sobre tus malditas operaciones en la SGM>> eso lo dejaba casi paranoico, se preguntaba que clases de operaciones se refería y de cuantas tenía información pero sin pruebas para acusarlo supuso que estaría "bien" por el momento... ¿verdad? quizás si no la mantenía vigilada sería capaz de revelar cualquier cosa ante la ONU.

-me pregunto si el hijo de ese maldito es consciente de esa mujer solo lo está usando... hablare con el mañana después de la reunión de la ONU- se subió al avión estando impaciente por irse de este país, aunque deberá ir al del capitalista pero eso era "mejor" que permanecer aquí.

★⋆⋆⋆⋆¿Qué es lo que sabes?⋆⋆⋆⋆★

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