Max y yo nos miramos extrañados...
-¿Disculpa? ¿Recluta? Max, no nos dijeron nada sobre andar buscando nuevos integrantes-
-Eh, escuché a Adam hablando sobre eso, pensé que solo era una idea al aire, pero ahora él está aquí...- Lo miramos
-¿De dónde eres?- Pregunto intrigada
-Soy del programa de ayuda latina, llegué antes de ayer. Soy jugador de baloncesto-
-Eres de los mios entonces- Menciono con una sonrisa.
El sonríe devuelta. Max me da un toque por la espalda...
-Mmm... Danos un segundo- Le cierro la puerta en la cara.
-¿Y ahora qué haremos?- Le pregunto a Max susurrando.
-Mañana iremos a la biblioteca. Vuelve a la mesa, yo le muestro todo-
-Okey- Me da un beso en la coronilla y me voy.
-Amor, ¿Podrías llamar a Adam? Sin el permiso del presidente de la fraternidad él no podrá entrar-
-Esta bien- Salgo al patio y veo a Adam nervioso ante los padres de Luci y a Luci queriendo tirarse a la piscina y ahogarse en su nerviosa miseria.
-Mmhm- Carraspeo para detener la discución -¡Adam! Mi amigo del alma queridisimo de fuñir... Te necesitamos aqui adentro... AHORA-
-¡Al Fin!- Ve la gloria al verme -Que pena, que pena señores no poder seguir charlando con ustedes pero fue un placer conocerlos- Dice con la sonrisa más forzada del universo.
Me toma del brazo y me jala hacia dentro.
-¡Gracias!- Me abraza y yo solo me quedo paralizada.
-¿Tan mal te tenían niño?-
-Vi el infierno en esos ojos y el diablo se reia de mi. Me estaba muriendo alli-
-Creo que les caiste bien- Digo burlandome
Adam me mira asustado.
-¿Y cómo tratan a lo que les caen mal?- Río dandole unas palmadas en la espalda.
-Ven, llego un supuesto recluta al parecer-
-¿En serio? Pensé que el chico vendría la semana que viene-
-Entonces sabías de esto ¿eh?-
-Yo lo sé todo, Nicky Pinky- Ruedo los ojos mientras el dice con una sonrisa recuperando la compostura.
-Por lo menos no le caigo mal a mis suegros-
-Cállate... Espera ¿Qué suegros? ¿Estás saliendo con alguien...?-
-¡Mira! Ese es el chico- Me mira extrañado.
-¿Nicoll estas...?-
-Hola, soy Aidem- El alto chico le extiende la mano. Bueno aunque en este punto todo el mundo para mi es alto.
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Old City
AcakTres chicas recién mudadas a Nueva York descubrirán que su mayor reto no será la universidad. Sino, sus locas y crudas vidas en esa vieja ciudad...