Epifanía

36 11 3
                                    

Nanon no tenía la mínima idea de a qué lugar se dirigían, se sorprendió al escuchar la puerta de su casa ser tocada con una insistencia y fuerza mucho mayor a la necesaria y encontrar a Ohm tras ella. Iba a reprenderlo por golpear su puerta de esa manera pero no tuvo tiempo de decir una sola palabra, se vio inmediatamente llevado al interior y arrastrado hasta su habitación. Seguía completamente confundido, y lo estuvo aun más cuando lo obligó a vestirse lo mejor posible, ya que verían a alguien muy importante. A pesar de que le hizo una broma, preguntándole si acaso verían al presidente, Ohm mantuvo su rostro inexpresivo y continuó manifestándole una y otra vez que verían a alguien aun más importante que el presidente y debía apresurarse si quería que siguiera con vida.

Aunque estaba acostumbrado a que su amigo solía conducir a una velocidad excesiva, en ese momento tenía miedo de morir en sus manos. Iba a quejarse de nuevo pero recibió una mirada asesina antes de siquiera comenzar a formular una palabra, no le quedó más opción que verificar que su cinturón de seguridad estuviera bien puesto y pedirle a cual sea la entidad superior en el universo que no se lo llevara ese día. Por fin se le permitió hablar al llegar a una casa común en una zona que no conocía, le preguntó en dónde rayos estaban y lo único que recibió de parte de Pawat fue un corto ánimo antes de que la puerta fuera abierta y un chico de su estatura saliera del recinto y lo empujara dentro, lo próximo que escuchó fue la puerta ser cerrada con llave.

Temió por su vida pero vamos, conocía a Ohm hace mucho, no sería capaz de hacerle algo malo... ¿o sí? Con algo de temor invadiendo sus entrañas, comenzó a caminar a pasos lentos por el lugar encontrándolo pequeño y acogedor. Observó curioso un postre mal acomodado probablemente por el afán sobre un mesón en la cocina, y se iba a dirigir hacia allí pero el sonido de una televisión llamó su atención. Caminó un poco más y al girar su rostro y observar una persona frente a la pantalla, casi se cae de la impresión. Se acercó con pasos sigilosos y notó que se encontraba sumamente ensimismado, acercó su mano con lentitud a su rostro y la posó sobre este con total delicadeza. Su rostro seguía siendo suave y perfecto.

—Chimon... Mi vida, mi Chimon... —Sintió sus ojos acuarse con rapidez.

—Oh no, no, no, no puede ser. —Abrió sus ojos cuanto pudo y negó suavemente con su cabeza.

—¿Qué ocurre? —Frunció su ceño extrañado por la reacción de Wachirawit.

—Ay no, ¿por qué a mí? ¿Tenía que pasarme justo ahora? ¡¿Justo ahora?!—pasó sus manos por su rostro frustrado—¡First, estoy alucinando! ¡Llama al loquero!

—¿Q-Qué? ¡No soy una alucinación, soy real!

—Oh, no. Inhala, exhala. Inhala, exhala. No es real—parecía estar reprendiéndose y convenciéndose al tiempo—tu Non ya no está, debes aprender a vivir con eso. No es real, no imagines cosas. ¡Chimon Wachirawit no está loco, no señor!

—¿Soy una alucinación? Esperen, ¿qué? Más bien, ¿eres tú una alucinación? ¡Oh por Dios, ¿quién está alucinando?! ¿No somos reales acaso?—se pellizcó y pasó sus manos por el rostro y brazos de Chimon, lucía normal.

—¡Mi alucinación cree que soy una alucinación! ¡FIRST, ¿EN DÓNDE DIABLOS ESTÁS?! ¡VEN A AYUDARME QUE ESTOY ENLOQUECIENDO!

—¡Calma! ¡Es suficiente! Ninguno es una alucinación, maldición Chimon, ¡creí que estabas muerto!

—¡Yo creía que tú lo estabas hace dos minutos!

—Yo no he muerto, en cambio se suponía que tú sí, ¡tus padres lo dijeron!

—Maldita sea, voy a matar a First, ¿por qué diablos me mintió?—comenzó a llorar repentinamente— creí que estabas muerto, no te imaginas cuánto sufrí creyendo que lo estabas, n-no soportaría que murieras, por favor no lo hagas. No te vayas. T-Te amo y no lo soportaría.—Balbuceó entre lágrimas. Nanon ni siquiera percibió cuando él también comenzó a hacerlo.

—Por supuesto que lo imagino, ¡llevo años sintiéndome así por ti! Cariño, sentí que moría cuando me dijeron que habías muerto. —Se arrodilló junto a él. —¿Por qué lo hiciste? ¿Por qué alejarnos así? Me hiciste sufrir, en verdad lo hiciste.

—T-Te lo explicaré después. ¿P-Puedo... Puedo pedirte algo?—lo miró nervioso.

—Lo que quieras, bebé.

—¿Me darías un abrazo, por f—no lo dejó completar la oración cuando ya lo había estrechado entre sus brazos con la fuerza necesaria para terminar de convencerse de que el amor de su vida seguía allí, que era real, pero haciéndolo con la misma delicadeza que siempre.

—No tengo idea de lo que sientas ahora, no sé si estás con alguien, mucho menos si me amas aún, pero de todos modos... necesito que sepas que te amo, te amo con la misma intensidad que te he amado todo este tiempo porque llegaste a mi vida y la marcaste, te convertiste en alguien esencial para mí y me sería imposible intentar olvidarte. Quiero que sepas que aún te amo y siempre lo haré porque eres mi complemento, la persona más perfecta que he conocido y como tú no habrá nadie más. No sabes cuán feliz me hace volver a verte, amor mío, creí no volver a hacerlo y mi corazón sufrió mucho por ello. Es maravilloso cómo el volver a verte por un momento pareció darme la energía para recobrar el aliento, tu presencia es tan reconfortante para mi ser que con sentirte cerca mis problemas parecen desaparecer y el alivio y alegría corroen mis entrañas haciéndome sentir tan pleno que asusta, no sabes cuánto temo despertar y que nada de esto haya sido real, que mi preciado tesorito en realidad sí se haya ido y no lo vuelva a ver... te amo tanto, Chimon, que las cifras se quedan cortas aunque sean infinitas porque la palabra y su significado se quedan cortos ante la magnitud de mis sentimientos. Por favor tenlo presente siempre.

Chimon se separó un poco y luego de mirarlo por un par de segundos lo besó, al principio fue un leve roce que los hizo pensar ¡vaya que es real! y sintieron las famosas mariposas en sus estómagos revolotear. Luego el beso se tornó hambriento, deseando recuperar el tiempo perdido y de ser posible viajar en él para no haberse separado jamás.

Lo importante en ese momento era que se habían reencontrado. Ya habría tiempo para sanar sus heridas. Aunque con amor, todo es mucho más fácil y rápido.

❛ perenne ❜ ⚘ namonDonde viven las historias. Descúbrelo ahora