Capítulo 8

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Matoi, Ryuko

Eran las 5 de la tarde y Ryuko estaría junto a Peter, quien le habría propuesto el ir juntos a estudiar y repasar la clase de Física en su hogar, cosa que repentinamente comenzó a poner un poco de nervios a la azabache, Senketsu notando su actitud desde el momento en que salieron de la preparatoria.

<<Está nerviosa... de eso no hay duda, pero el día en que los Makanshoku le ofrecieron su hogar y toda su hospitalidad, ella nunca se mostró así como está ahora... tendré que vigilarla un poco más si quiero averiguar que le sucede a Ryuko>>Miraría fijamente a su portadora, pasando a ver de reojo al castaño

—Entonces... ¿qué te gusta hacer en tus tiempos libres?—Preguntó el castaño con una sonrisa alegre, esperando una respuesta

—Oh... no soy alguien que goze mucho de sus ratos libres, no es que sea alguien súper ocupada, sólo me dedico a ver la televisión, dormir y de vez en cuando a salir a pasear por la ciudad, ya sea de día o de noche...—Dirigiría su mirada hacia el contrario, prestándole total atención mientras caminaban

—Yo... en cambio si suelo ser alguien muy ocupado, pero la mayor parte del tiempo suelo pasarla junto a Ned, ya sabes... armando algún LEGO que suele traer... o conviviendo junto a mi tía May—Rascaría su nuca, comenzando a reír levemente

Colocaría una sonrisa amistosa, preguntando—¿Vives con tus tíos? Si es así, se debe de notar que se llevan muy bien entre ustedes...—Dirigiría su mirada hacia el frente, deteniéndose junto al castaño al ver el semáforo cambiar a verde

Su sonrisa se desvaneceria poco a poco, conservando una sonrisa desanimada, mientras miraba al suelo—Sólo vivo con mi tía, ella y yo... nos llevamos excelente, es la mejor persona que he tenido junto a mi... y la única familia que me queda—

Al igual que el castaño, su sonrisa en su rostro se desvaneceria, teniendo ahora una mirada triste y preocupada—Yo... lamento si toqué un tema delicado... no fue mi intención hacerlo—Tocaría levemente el hombro del contrario, tratando de animarlo

—No pasa nada... gracias por entenderlo de todos modos, no suelo contarlo mucho, pero...—Sería interrumpido por la azabache

Agitando sus manos completamente nerviosa, negó ante el contrario—¡N-No! No tienes que contarlo si no te sientes listo aún... apenas nos conocemos y... preferiría que lo hicieras en un momento más oportuno—

Ambos se quedarían viendo fijamente un par de segundos, reaccionando luego de que el semáforo cambiara a rojo para que pudieran pasar al otro lado de la calle, retomando su camino hacia el departamento del castaño. Estando ya tan cerca de entrar a la recepción, la azabache comenzaría a hablar con Senketsu, quien le habría llamado la atención hace unos momentos antes de entrar.

—Ryuko... porfavor, cálmate... no estás cometiendo un crimen ¿por qué demonios estás tan nerviosa?—Miraría a su portadora, exclamando su confusión

Comenzaría a susurrar, mientras que el castaño hablaba con algunos vecinos—Debes entender Senketsu, que ésta es la primera vez que me llevo tan bien con un chico... por Honnouji... aunque, siento que no es razón para estar nerviosa, realmente no tengo idea del por qué lo estoy...—

—Bueno, pues trata de controlarte, no es el primer chico con el que has hablado, no es para tanto...—Rodaría su único ojo

Devolvería el susurro, comenzando a molestarse—¡ESE PERVERTIDO DE MIKISUGI NO CUENTA! ¡TAMPOCO CUENTA ESE AMARGADO DE KINAGASE!—Continuaría su paso, siguiendo al castaño por las escaleras

—Sólo decía... pero incluso ellos eran más “hombres” de lo que Peter es, sólo míralo, nisiquiera defenderse sabe, ya viste lo que sucedió con ese tal Flash, de no ser por ti...—Sería interrumpido por su portadora

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