Había una vez... [Tendo x Tu]

5. Primer partido

El primer partido llegó en un abrir y cerrar de ojos.

El sol era más abrasador de lo normal. Toda la universidad estaba reunida en el gimnasio para presenciar la ceremonia de inauguración de la semana deportiva, y para buena o mala suerte nos había tocado competir contra un equipo que se veía peor que nosotros. Todos los capitanes como los responsables miembros del consejo estábamos sobre el podio con nuestros respectivos colores que representaba nuestro equipo.

Después del emocionante discurso por parte de la directora dando por comenzada la semana académica se presentó cada equipo, en donde los gritos y las porras traspasaban el techo por la emoción de algo totalmente diferente, uno a uno se fue presentando,  viéndose equipos fuertes y unidos, hasta que fue nuestro turno. No tuvimos quien festejará nuestra presentación y desde ahí, el sentimiento del no querer participar se vio intencifificado por mil.

—Se nota el apoyo— dijo larry burlandose en mi oído.

—Esto será un desastre, ni siquiera quería jugar— susurré llevándome la mano a los ojos en señal de lamento.

—Es que tu eres la capitán— dijo Mary, una chica del equipo dándome un apretón en el brazo antes de adelantarse.

El equipo contrario no tardo en tomar sus puestos en la cancha, y ellos, al igual que mi equipo la mayoría estaba conformado por mujeres, y solo contaban con un hombre, investigando sabia que era fuerte, había escuchado a Daichi mencionarlo algunas veces, Oikawa creo que era su nombre, sonreía relajado y de primera mano supe que el nos iba a dar problemas. Hice una seña a mi equipo para juntarnos y armar la estrategia que nos evitara una humillación muy grave.

—Bien, primero necesito saber que conozcan las reglas básicas de este deporte.

—Claro, capitana— dijo Mika con una sonrisa.

Alce la vista para ver el tiempo disponible, los árbitros estaban preparando todo lo necesario y mi alma se fue a los pies cuando vi a Tendou con un silbato en el cuello. Ni crea que por qué el será árbitro trataré de lucirme.

—Bien, entonces, Mat, tu seras bloqueador central, trata de cubrir y defender lo ancho de la cancha, Mary serás bloqueador izquierdo y Mika seras derecho. Larry tu harás el primer servicio de saqué y protegeras a Mika, es probable que Oikawa dirija sus servicios a ella por su estatura. Lira, tu estarás detrás de Mary y yo estaré en el centro tratando de defender lo más que pueda.

—Así que jugaras tu posición anterior— canturreo Larry con una sonrisa en la cara. —Estrategia defensiva, nuestra capitán vuelve a ser libero y perderemos clase, esto es una maravilla.

Ni siquiera habíamos entrenado. Ni siquiera nos coordinabamos en un salón de clases, menos seria en un partido de voleibol. Todo era un desastre inminente.

—Buen juego Dangers— dije con una sonrisa antes de romper el circulo en el que estábamos.

Las presentaciones de los equipos dieron fin, y gracias a la generosidad y coqueteo de Oikawa hicimos el primer servicio dando el primer punto, claro que la racha de victorias no duró mucho cuando el castaño comenzó a rematar. El primer set fue un regalo para el equipo contrario.

Estaba oxidada y se notaba, el esguince de mi tobillo comenzaba a molestarme y barrerme contra el suelo para tratar de salvar una pelota le costó heridas a mis rodillas. Oikawa me tenía en el piso con cada balón que lanzaba. El ultimo golpe lo mando a una esquina de la cancha, mis pies se movieron instantáneamente para tratar de elevarlo, sin pensarlo mucho me lancé contra el concreto para que mis dedos golpearan la pelota, sisie cuando mis pulmones se quedaron sin aire, y sonrei victoriosa cuando el balón se elevó, solo quedaba que alguno de los chicos hiciera un pase, un voleo sencillo bastaba para mandarlo a media cancha donde Larry podría rematar. Tan rápido como cai y el balón se elevó, me impulse con mis manos para levantarme y dar una mirada de pánico para que alguien hiciera el segundo golpe, Mary era la más cercana pero no hacía ademán de moverse, listo, perderíamos este punto. No contaba con que Larry pasara a mi lado para mandar la pelota al otro extremo.

—Yo que tu, ya estaría corriendo— dijo apenas paso a mi lado.

Se colocó en posición para elevar y no espero a que la pelota terminara de bajar, sino que salgo para que la pelota tuviera un efecto de parábola hacia la red. En otro momento y circunstancias habría disfrutado de aquel partido. Oikawa y otras chicas estaban listas  para hacerme frente, me habían cortado el paso y me habían dejado un único camino libre: fuera de la cancha.

No, no les daría ese gusto.

Salte lo más alto que pude antes de que la pelota bajara haciendo que los bloquadores imitarán mi acción, sonrei maliciosa al hacer una fina a la izquierda.

Torpe Oikawa por ser el bloqueador central de ese momento.

Al final, perdimos el partido, mis tobillos no dieron para más en el último set. Mat se acercó a Oikawa para estrechar su mano y felicitarlo por un buen juego, quería golpearlo porque pudo haber echo  un mejor trabajo, las chicas se dispersaron rápidamente alejándose de la cancha, y yo caminaba lento hacia las bancas cercanas que para mi desgracia era donde estaban los árbitros. Larry  se acercó tomándome por los codos para poder avanzar más rápido y dejar libre la cancha para el siguiente partido.

—Me tengo que ir, ¿estarás bien si te dejo aquí?— preguntó dejándome en una banca con cuidado.

—No te preocupes, solo necesito mi mochila— dije señalandola con un dedo.

Sonrió y tomó mi mochila para después dejarla caer a mi lado, con un movimiento rápido de mano se despidió de mi y salió corriendo hacia el estacionamiento.

Realmente el partido de basketball era insignificante pero tenía que esperar que el dolor disminuyera para poder irme a casa, mire con una mueca mis rodillas rapadas y como la sangre comenzaba a secarse, como deseaba un poco de agua en ese momento. Con mis piernas mayugadas parecía que me había lanzado a un arbusto lleno de espinas. Mañana dolerian como el infierno.

—Creo que necesitas esto— dijo tendiendo una caja de curitas cuando se sentó a mi lado.