Odiando el Sol

Capítulo 1 Will

Era una mañana calurosa de verano, típica a los primeros meses de instituto donde el invierno aún no había hecho estragos en el verano.

-Que asco de calor...- Se sentó al lado de Noah Will con una botella de agua en la mano una toalla rodeando su nuca, pero su amigo ni siquiera le había escuchado.

El joven estaba demasiado ocupado mirando con ojos asesinos a punto fijo, uno que cruzaba el campo de fútbol americano hasta unas mesitas que había al otro lado.

-¿Noah?- Apoyó la mano sobre el hombro del chico.

Este desvió la mirada y observó a su amigo tratando de disimular.

-¿Qué pasa?- Volvió a la carga Will.

-¿Qué pasa de qué?- Sacó el móvil nervioso y fingió mirar algunos mensajes.

-¿Dónde mirabas?

Noah soltó un suspiro acompañada de una risa incomoda.

-No miro a ningún lado, estoy pensando.

Will levantó una ceja y se cruzó de brazos.

-Ya... ¿Y en qué piensas?

-En nada.- Mintió.

Will sabía cuando su mejor amigo mentía, y es que lo hacía demasiado mal cuando el motivo de la mentira le molestaba. Era como si se mordiera los labios y evitara mirar a la cara. Así que volvió a mirar a aquel punto donde el moreno estaba mirando y se encontró con Bambi que estaba fumando un cigarrillo, con un libro sobre su regazo y bebía algo. ¡Quizás un zumo? Le resultaba difícil saberlo a aquella distancia.

-¿Has visto a la nueva?

Noah dejó a un lado el móvil, parecía algo molesto.

-No tengo tiempo para esas chorradas.- Dijo fingiendo indiferencia.- ¿Qué hace? ¿Está fumando?- Se levantó molesto.

-Parece...- Frunció el ceño.- Y está al lado de las basuras... Nadie quiere sentarse ahí.

-Es ridícula.- Dijo con vivacidad.

-Es guapa.- Bebió un poco de agua.

-¡Qué!- Dió un manotazo a la agua de su amigo tirando la botella al suelo.

-¿Qué haces?- Se levantó molesto.

-Ni se te ocurra tirarle la caña a esa, es... Es del montón y tiene un nombre de personaje de Disney.- Señalaba a la distancia.

-No iba a hacerlo.- Recogió la botella del suelo.- Estás un poco insoportable.

¡Ts¡ ¿Cómo no lo voy a estar con esa tía ahí?

-Voy a decirle cuatro cosas por fumar aquí.

-Noah... Comprame otra agua luego.- Dijo en voz alta mientras el moreno se alejaba a pasos ligeros.

Will podía imaginarse los humos de su amigo saliendo por sus orejas, mientras el timbre sonó avisando de que se había acabado las clases de optativa. Y observaba como salía con un montón de hojas sobre la mano Helen Lorder. Ella era como la mano derecha del consejo y Noah se aprovechaba para que siempre hiciera los papeleos cuando el no estaba, como en ese caso.
Aunque fuera parte del consejo, para nada era una persona popular, más bien era la tonta que se ocupaba de lo que nadie quería hacer, y la mayoría de veces iba sola.

A simple vista era una chica de estatura normal, de cuerpo atlético, pelo negro azabache que acababa en un corte recto por sus hombros, y llevaba gafas para leer.

Es tan preciosa...

Will llevaba un par de años viendo a Helen a la distancia, le gustaba su carácter tranquilo, pero lo que más le gustaba de ella era lo diferente que era de todas las chicas con las que él había tenido algo. Quizás por ese mismo motivo el castaño había decidido no decirle nunca lo que sentía, simplemente iba a limitarse a observarla.

¿Qué pensaría la gente si saliera con una chica así?

¿Su reputación de popular se iría al garete si saliera con alguien como ella?

Eran las clases de preguntas que Will se hacía cuando pensaba en ella.

Seguramente tampoco confiaría en mi... O se pensaría que que me estoy riendo de ella.

Él sabía que se había creado una fama horrible de superficial, además le importaba demasiado lo que opinaran de él... Así que se conformaba con eso.