Narra Eliana
Estaba sentada a lado de la ventana observando hacia la nada, con la mente ocupada en otra parte, tratando de recordarme a mí misma que lo qué pasó hace dos años, no había sido mi culpa... pero... sentía una enorme culpa dentro de mí que cada vez que cerraba los ojos me veía a mi misma llorando histérica por lo que había pasado.
Por esa razón prefería estar en misiones constantemente y estar lejos por un tiempo del castillo, para olvidar por un momento mi culpa, pero sobretodo mi dolor.
Aunque lo negara todavía seguía sintiendo algo por Stefan pero... al mismo tiempo sabía que no era nada saludable para mí sentir todo eso, porque me hacia cada vez más daño.
Pero todo ese dolor, culpa, mi odio por Stefan, mi amor por él... fueron enterrados en el pasado, cuando conocí a Damon. No sé por qué pero es la verdad y para ser honesta era algo que me hacía sentir bien, segura de mí misma, protegida, cosa que nunca había vuelto a sentir después de dos años, pero el punto es que Damon me hacía sentir todo eso sin razón alguna.
Salí de mi habitación con la intención de despejar mi mente cuando llegó a mis fosas nasales un refrescante aroma a pinos y menta.
Mi loba interior tomó el control sin darme e inmediatamente buscó a la persona que le pertenecía dicho olor.
No pasó mucho tiempo cuando vi a Damon caminando por el pasillo, me vio y me acorraló contra la pared, olió mi cuello y suspiró con anhelo. Y yo por inercia hice lo mismo. No pude evitarlo.
Me miró directamente a los ojos y dijo:
—¡MÍA!—Exclamó.
—¡MÍO!—Dije hipnotizada por su olor.
Me besó con desesperación y a la vez con amor. Nos detuvimos para recuperar el aliento y entonces me levantó del suelo e hizo que posara mis piernas alrededor de su cintura y continuamos besándonos, hasta llegar a la habitación de él.
Y ya no supe más...
(***)
A la mañana siguiente desperté con un dolor punzante de cabeza como si hubiese bebido una botella entera de whisky la noche anterior y despertado con resaca.
Miré a mi alrededor y me di cuenta de que estaba en la habitación de Damon por el olor y además de que me tenía abrazada a él con fuerza y lo peor estaba desnuda bajo las sábanas al igual que él.
Me maldije por haber permitido que mi loba tomara el control de la situación. Intenté liberarme de su agarre y lo único que logré fue que me abrazara con más fuerza.
—Ni lo intentes... eres MÍA...—Habló medio dormido.
—Damon... suéltame... esto... fue un error, que nunca volverá a pasar...—Hablé decidida ante ello.
—No Eliana... no fue un error. Eres mi Mate y no lo niegues, porque sentiste mi olor y me reconociste como tal.—No dije nada y simplemente me liberé de su agarre con fuerza y levanté por mi ropa. La recogí y me la puse con magia.
—Me voy... nos vemos en el entrenamiento...—Salí de ahí antes de que me dijera algo más.
La verdad no quería saber ni escuchar nada de lo que había pasado entre nosotros porque ya había vivido esa misma experiencia con Stefan pero con la única diferencia de que él era mi alma gemela de mi parte bruja.
Me enamoré y le entregué todo, mi corazón, mi alma, mi confianza, afortunadamente no mi cuerpo, porque hubiese sido mucho más difícil de superar.

ESTÁS LEYENDO
La Cazadora De La Noche: Tu peor pesadilla...
Manusia SerigalaTodos saben acerca de los hombres lobo, vampiros, brujas blancas, brujas oscuras... tantas absurdas historias sobre esas criaturas sobrenaturales que casi nadie ha vivido para contarlo, claro es obvio porque 'Los Cazadores La Noche' se encargan de e...