Parte 7

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Lucía los había invitado a los dos entrar a su casa, Nicolás se sentía totalmente incómodo después que aquel chico le dijera lo vacíos que estaban sus ojos, incluso específico porque lo estaban, era algo confuso saber cómo se había dado cuenta.

— Están vacíos, no tienen color, ni brillo, es como un agujero profundo sin emociones, es lo que veo en sus ojos — fue lo que dijo y tal vez tenía razón, había dado justo en el clavo

— a mí me parecen lindos — Su pequeña angel como siempre, lo miraba con otros ojos más fantasiosos, era tan inocente, que no sabía para nada lo que era el peligro y por lo que realmente pasaba Nicolás, eso le gustaba de ella, su inocencia, la cual no quería corromper, por eso no debía saber de su vida

— veo que como siempre tenemos puntos de vistas diferentes — contesta aquel niño llamado David

Nicolás se sentía incómodo, solo podía escuchar lo que hablaban aquellos dos, no sabía interactuar, incluso le daba un poco de envidia que aquel niño pudiera hablar tan fluidamente con ella.

— Nicolás tiene un don para la pintura — eso había llamado la atención de ambos chicos, enserio Lucia admiraba el talento de el, lo valoraba, pocas personas hacen eso — me hizo un retrato el cual quiero ver pronto

— Aún no he empezado, pero no te preocupes, pronto comienzo ...

— bueno yo debo irme, nos vemos mañana si es que vas a la escuela Lucía ...

— Espero que sí....

(…)

— A veces pienso que verdaderamente te andas prostituyendo — es lo primero que escucha al entrar a su casa — ¿ estas son horas de llegar ? — Nicolás solo niega con la cabeza evitando mirarlo — resulta ser que tu estúpida maestra me llama al celular para ir a tu escuela, pensé que no estabas asistiendo, pero era para decirme sobre la preocupación que tiene sobre ti — dice con una sonrisa irónica sentado en el sofá mientras cambiaba los canales de la televisión — al parecer eres tan tonto que ni te cubres los golpes, creo que no te podré golpear más porque se daría cuenta de tu situación y no me gustaría caer preso

— Que te cuesta dejarme en paz...— responde de repente aún con la cabeza baja

— que te cuesta dejar de ser un inútil  — escupe con rabia apagando el televisor — te mereces cada uno de los golpes que te doy, eres una maldita rata al igual que tu madre

— ¿ y tú qué ? solo eres un pobre hombre que no aceptó nunca la muerte de mamá y solo quieres destruir el único recuerdo de ella, el cual soy yo....— esas palabras fueron como dagas hacia el pecho de su padre, porque era cierto, ese era el problema de el

— No me hagas volver a pegarte, dudo mucho que sobrevivas, mira lo debilucho que estás, ¿ porque mejor no sierras la boca ?  y solo escucha como si fueras un perro pulgoso — Nicolás solo asintió — ves, así me gusta....vete a tu maldita habitación

Y le obedeció provocándole risas a ese hombre al ver lo sumiso que era, pero en realidad lo que pasaba por la mente de Nicolás era puro odio lo cual estaba seguro de cumplir.

— Juro que algún día serás tú la escoria — dijo ya tirado sobre su cama — tu solo disfruta, que el que ríe último, ríe mejor.....

(…)

— ¿ te confieso algo Nico Nico ? — habla su pequeña Lucía mientras caminaban a paso tranquilo por el parque — me gusta mucho estar contigo, me encantaría que después de la escuela diéramos estos paseos, no sabes lo mucho que me relaja

— Y a mí me gusta también pasar el rato contigo......

— ¿ te puedo pedir un favor ? — se detiene frente a el con una sonrisa lo cual provoca un efecto de hipnotismo en el chico quien asiente — nunca he salido de noche, siempre me ha gustado estar acostada sobre la hierba mirando las estrellas, pero......eso solo lo puedo soñar, ¿ crees que.....puedas cumplir ese sueño ?

Nicolás solo se hacía preguntas mentales como ¿ porque su pequeña Lucia es tan dulce y adorable ? ella era una terrible obsesión desde que la vió por primera vez

— todo lo que me pidas se cumplirá mi pequeña angel.....— no se había dado cuenta de cómo la había llamado, pero por el rostro de ella no parecía incomodarle

— así que te parezco un ángel ....

— caído del cielo debido a su belleza....— esas palabras le habían salido de lo más profundo de su corazón

—.... gracias..Nico Nico — sus hermosos labios hicieron contacto con la mejilla de Nicolás quien le costaba respirar

Le ocasionaba cosas extrañas, hace mucho no había recibido algo así, solo su madre lo hacía hace siente años.

—¿ que te parece si mañana en la noche me llevas ?

— pero ¿ te dejarán? Es que.......— se sentía inseguro después de saber que no le agradó para nada a aquella mujer que la cuida cuando supo que Lucía había salido con el

— no te preocupes, ni se darán cuenta, por favor....cumple ese sueño....

— bueno....por ti lo que sea ...

(…)

No hace mucho la había dejado en su casa ya que dijo que le dolían las articulaciones y tenía algo de fatiga, Nicolás ya comenzaba a sospechar sobre el estado de Lucía, eso no podía ser una simple gripe, debía ser algo más serio.

Siguió caminando hasta encontrar una casa con un letrero que decía que necesitaba de alguien lo cual a cambio pagaban. Necesitaba ese dinero para comprar el lienzo y lo demás para hacer aquel retrato. Abrió la reja y caminó por el jardín de aquella casa algo desatendido, tocó el timbre y a los minutos una señora de edad avanzada abrió y miro al chico a través de sus espejuelos.

— ¿ que desea ? — le habla amablemente

— es que ví que en el cartel decía que necesitaba de un ayudante y pues..... quiero que me contrate — se atrevió a responder

— ¿ no eres aún menor de edad niño ? Te ves muy joven — decía mirándolo de arriba a bajo

— solo tengo 17, no me falta mucho para cumplir la mayoría de edad....— aquella señora de pelo salpicado de canas se lo pensó

— la verdad es que necesito que me arreglen el jardín, si te diste cuenta esta muy horrible y no encuentro jardinero para eso.......

— aha pues yo puedo hacerlo.....

— ¿ De veras ? te lo agradecería mucho ....— le dedica una sonrisa — te daré lo necesario para que puedas hacerlo, no tardo....

(…)

— aquí tienes — la anciana al ver el trabajo bien hecho de Nicolás le había pagado lo prometido que decía el cartel — ha quedado muy bonito el jardín, muchas gracias, ¿ como te llamas ?

— emmm Nicolás....

— Oh pues, Nicolás muchas gracias, puedes venir cuando quieras si me quieres ayudar....— Nicolás asintió — antes de irte toma — le da una cajita pequeña — tiene galletas que hice, espero que te gusten

— muchas gracias....emmm

— llámame Marta ...

— pues muchas gracias señora Marta......

(…)

Entra al fin a su infernal casa, las luces están apagadas, pensaba que su padre debería estar dormido, aunque era algo temprano. Abrió la puerta de su cuarto y se sobresaltó al ver a su padre sentado sobre el borde de la cama.

— ¿ que haces aquí ? — se atrevió a hablar

— esa no es la pregunta maldita escoria, la pregunta es....¿ que haces con esto ? — le muestra su móvil — como te gusta que te golpee niñato......

FELICIDAD PROHIBIDA Donde viven las historias. Descúbrelo ahora