🍀parte 15🍀

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Su expresión era sería, solo dejaba que las lágrimas fueran libres de salir, sentía un dolor en el pecho, quería morir en ese instante, pero lo peor no es eso, lo peor es que volverá a suceder, la persona que ama morirá del mismo cáncer como su mamá.

- se que es doloroso, pero mis viajes no eran solo por trabajo, también para buscar a alguien que sea compatible con ella para hacerle un transplante de medula, pero este mundo es tan solidario - dice irónicamente

- yo me quiero ofrecer para la donación - habla rápidamente - por favor, déjeme hacerlo - dice entre lágrimas

- eso no es así como así, primero hay que saber que edad tienes y si eres compatible y también la aprobación de tus padres para...- calló al ver a Nicolás levantarse aún derramando lágrimas

- ¿ padres ? No, no se que es eso, pero hizo muy mal en ocultarle esto a Lucia, ella tiene el derecho de saber lo que tiene

- lo se, pero yo no quería decirle, me gusta verla feliz y no preocupada de si alguien ya se ofreció o cuánto le queda de vida

- y no pensó usted en los efectos de las medicinas que le den, en los síntomas del cáncer el cual ya ella sospecha, que pasa cuando vea que los síntomas son cada vez peor, ¿ no ha pensado en eso ?

- lo se y entiendo tu postura ahora mismo - silencio, eso es lo que había en aquella sala, la señora tenía la cabeza baja - ya perdí a una hija y no quiero perder lo único que me dejó - dice con la voz quebrada - yo estaba decidida a decirle, pero no ahora, no me siento preparada

Nicolás solo se limpio las lágrimas, siempre odió llorar frente a los demás, pero cuando se trataba de su ángel no podía solo disimular y esconderse, es que demuestra que de verdad la quiere.

- será mejor que vayas con ella, nos estamos demorando mucho - dijo ella levantándose mientras se dirige a una puerta

Nicolás camina hasta las escaleras para subirlas y dirigirse a la habitación de Lucia. Toca dos veces y escucha la palabra "adelante" de ella. Al abrir la puerta la encuentra sobre su cama abrazando sus pies mientras oculta su rostro.

- Lucia, per...- respira hondo - perdón la demora, ¿ estás bien ?

- Si, es solo que no me lo esperaba

- ¿ pasa algo ? - se acerca a ella

- Tengo cáncer Nicolás, ¿ eso es verdad ? - dice levantando la cabeza dejando ver su rostro rojo y los ojos cristalizados por llorar, la cara estaba húmeda debido a las lágrimas

- ¿ oíste todo ?

- si, quería saber, solo para cometer otra de mis travesuras, pero no pensé que fuera ese el tema, pero no importa - Dice limpiando se las lágrimas - te tengo a ti, estaré siempre contigo aunque no sea por mucho

Y esa...fue la gota que derramó el vaso.

(...)

Había salido hace una hora de la casa de Lucia dejándola preocupada, salió sin decir nada, solo con la cabeza baja. Todo el tiempo que se demoró se lo pasó en el cementerio, quería morir, desaparecer, quería nunca haber existido, que cruel fue el destino en proponerlo a caminar por senderos en derrumbe.

Lucia. Una niña de cabello rizado color castaño claro, ojos hipnotizadores, labios con un sabor especial a dulce. Tenía la sonrisa muy bonita, tanto que era la única que con sonreir ponía de buen humor a cualquiera. Tan inocente sobre la realidad del mundo, tan tierna incluso con personas que no conoce, tan amorosa. Eran muchas las virtudes que tenía aquella niña de tan solo quince años.

Pero solo de pensar de que hay posibilidades de que ella se vaya le daba dolor en el pecho y el nudo de su garganta lo mortificaba.

- ¿ porqué me pasa esto a mi madre ? ¿ porqué ? - dice acostado sobre la tumba de ella con la voz quebrada y los ojos cerrados - tengo derecho a un poco de felicidad, pero porque no puedo tener, ya no aguanto más

Hablaba entre suspiros colocando sus manos en la cara, el cementerio era tan solitario, un lugar perfecto para llorar y que nadie lo vea, un perfecto lugar para desahogarse con los muertos de ahí. Nicolás siente unas caricias en su pelo y se sienta rápidamente viendo todo a su alrededor, no había nadie. Miro a sus pies y vio una pequeña flor amarilla. Soltó una risa amarga recordando la última vez que le dió unas así a su madre.

- Gracias...mamá - era la flor favorita de ella

(...)

- ¡ Volviste ! - grita Lucia al verlo de nuevo - me asustaste cuando te fuiste sin decir nada - la mira y ve que sus ojos se cristalizaban

- Perdón, solo quería estar solo, pero no te preocupes - la abraza

- Te quiero nico nico

- es obvio que yo también - dice Nicolás cerrando los ojos disfrutando del abrazo

El rato que estubo Nicolás con su pequeña fueron tranquilizantes, le gustaba ver lo positiva que era Lucia con respecto al cáncer, pero el también tenía esperanzas de que ella pueda vivir una vida mas larga.

- y bueno me gustaría que vinieras, por favor di que si - dice en tono adorable Lucia

- ¿ al cine ? - dice enarcando una ceja, nunca en la vida había ido

- ¡ si ! será genial, te prometí ver el Titanic conmigo y está noche lo ponen y quiero que lo veas, uno de los principales es pintor como tú, retrata francesas

- Si eso me dijiste la otra vez, pero...

- Daaaaaaleeee Nico Nico, te gustará

- sabes que a ti no te puedo decir que no, iré contigo, me da curiosidad esa película - Lucia grita de emoción y lo besa dejando a Nicolás atónito, aún se sentía raro que una chica lo bese

- ¡ Eres el mejor Nico Nico ! - Dice entusiasmada

- jajaja, que conste que lo hago por ser tu, si se tratara de otra persona diría que no, ¿ pero a qué hora sería ?

- a las ocho

- está bien, siempre puntual mi ángel

(...)

Entró a su infierno cerrando la puerta tras de él, mantenía la cabeza baja, no quería más problemas con su padre, aunque no lo siente por ningún lado de la casa. Sube hasta su habitación y sus ojos se abren al sentir un golpe en su estómago, el cual está vacío y siente el líquido subir por su garganta lo cual era sangre que salió de su boca.

- Miren quien llegó - dijo su padre sentándose en la cama viendo a su hijo arrodillado en el suelo con la boca llena de sangre - volviste a ver a esa niñata estúpida ¿ verdad ?

Nicolás se levanta aún con la mano en su estómago el cual dolía y corrió hacia su padre para golpearlo pero fue al revés. Nicolás cayó al suelo gritando del dolor y su padre pone su pie sobre el pecho del pelinegro.

- Vine a ver si estabas en tu madriguera y lo que me encuentro es esto - señala el lienzo con el retrato casi terminado de Lucía - Aún tienes esa afición de pintar y ser una artista - ríe - me gustaría mejor que pintaras un cementerio y lo titularas "mi próximo hogar " sería un existo - se burla presionando su pie en el pecho de Nicolás quien lucha por quitarlo

- Eres un... - no pudo hablar al recibir una patada sintiendo el caliente líquido salir de su nariz

- Mira ver cómo me hablas y déjame ayudar a terminar tu cuadro - habla quitándole el pie del pecho para caminar hasta la pintura

- ¡ No lo hagas ! te lo pido - dice intentando levantarse pero el dolor no lo deja y solo se arrastra

- Sabía - dice negando con la cabeza - Sabía que estabas enamorado de esa niña, das asco - toma el cuadro en sus manos y lo mira - si fuera un cementerio o tu degollado lo aceptaría - levanta el cuadro para luego estrellarlo contra su pierna y romper el lienzo, tira con sus dedos la tela y lo rompe por completo terminando de tirarlo contra la pared ignorando los gritos de su hijo - te vez cansado, ¿ porqué mejor no duermes ?

Y de repente todo....se volvió negro para Nicolás

FELICIDAD PROHIBIDA Donde viven las historias. Descúbrelo ahora