Parte 12

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Tocó el timbre mientras sostenía en una de sus manos un ramo de flores rojas para Lucía, las ganas de verla eran muy altas, habían pasado tres semanas y no se han visto mucho. Sintió el sonido de la cerradura para luego la puerta abrirse, pero el rostro de Nicolás cambio rápidamente a uno neutro al ver a Lia, la mujer que cuida de su pequeña.

Los dos mantuvieron una pequeña guerra de miradas, la mujer se cruzó de brazos mientras miraba hacia arriba dando entender el cansancio que le daba ver a Nicolás de nuevo.

— ¿ acaso no te cansas de molestar mocoso ? — dijo grosera

— yo creo que los insultos te los puede guardar ya que no me afectan en nada — aquella mujer rio sin gracia, estaba cansado de que siempre le insulten, de que se crean superiores, quería que las cosas cambiaran

— te advertí perfectamente que llamaré a la policía si te volvía a ver aquí

— y vendré las veces que haga falta, ni tu ni nadie me alejaran de ella

— pierdes el tiempo niño, Lucia en estos momentos tiene visita más impor....

— ¿ que sucede Lia ? — Nicolás miro hacia atrás y vio a un chico bien vestido de pelo castaño claro quien traía en sus manos un ramo más grande de flores

— ¡ Kevin ! es un gusto que estés aquí, Lucía está arriba, puedes pasar

— muchas gracias Lia — habla el chico quien de los labios de Lia salió el nombre de Kevin el cual ignora la presencia de Nicolás y pasa dentro de la casa

—  ves — sonríe — Lucia tiene mejores cosas que hacer que estar atendiendo a un pobreton como tú niño, así que mejor lárgate

— ¿ Lia que haces ? —  la voz de su hermosa angel es escuchado por los oídos de Nicolás quien cambió su rostro a uno más relajado cuando la ve — ¡ Nicolás ! — lo abraza — te extrañe mucho

— ¡ Lucia ! Tienes prohibi....

— tu no estás aquí para decirme que hacer o no Lia, eso lo decide mi abuela, por lo tanto si yo quiero el va a pasar y que sea la última vez que haces una payasada cómo esta, que te quede claro que tú obligación es solo cuidarme y llevarme a hacerme los chequeos médicos que me corresponden, Nicolás será un invitado especial y lo debes de tratar con respeto —  Nicolás quedó totalmente sorprendido por la actitud de su pequeña, pero a la vez la ve tierna, aquella mujer había cerrado la boca y solo se cruzó de brazos para irse más que enojada —  vamos — lo toma del brazo y lo adentra a su casa

— que ruda y tierna la pequeña — habla Nicolás mientras era llevado a la habitación de Lucia

—  Es que mi abuela me dijo que hablara con ella sobre ese tema y ya me tenía cansada de que te tratara así — dice con una sonrisa ya en la habitación — Nico nico,  te presento a Kevin y Kevin el es Nicolás — sonríe dando las presentaciones

Simplemente los dos chicos no se veían como conocidos amigables. La mirada de aquel chico castaño transmitía rivalidad, tenía cara de pocos amigos.

— ¿ y esa flores ? — pregunta con una sonrisa

— bueno, las traje para ti, espero que te gusten —  le responde Nicolás sin quitarle los ojos de encima pero a la vez sintiendo la mirada incómoda de Kevin

— bueno, ya este es el segundo ramo del día — coloca las flores en un florero junto a las otras — están muy lindas, gracias Nicolás, siempre eres tan lindo conmigo — le sonríe y el chico castaño ríe sin gracia

— y Lucia, ¿ te gustó la canción que te compuse ? — sonríe Kevin

— pues si, está muy bella

(…)

Las horas habían pasado y Nicolás no se sentía cómodo con aquel chico hablando con su pequeña, solo podía ver cómo esos dos hablaban fluidamente sin parar. Cada vez que Lucia hablaba con Nicolás, Kevin interrumpía y sacaba otro tema de conversación para ellos.

— bueno Nicolás tiene un don para la pintura, me ha hecho varios retratos, que por cierto, estoy esperando por el que me prometiste — se cruza de brazos y sonríe

— ya conseguí los materiales, hoy mismo empiezo

— bueno, yo ya me voy — dice aquel chico de expresión sería

— te acompaño a la puerta, espérame aquí Nico Nico

Y se van unos minutos para luego Lucia regresar pero...

— ¡¡ Lucia !! — se levanta rápido y la toma de la barbilla mirando la sangre que salía de su nariz — ¡¿ que te paso ?!  ¡¿ Porque estás sangrando ?! — estaba preocupado por ella

— ¿ sangre ? — dijo sin siquiera saberlo y se fue al baño para mirarse en el espejo y ver qué si tenía sangre saliendo de su nariz — aha bueno, esto ya me ha pasado, es normal

— ¿ normal ? Para mí no...

— enserio, no te preocupes, no es nada grave — dice inocentemente saliendo del baño ya con la nariz limpia mientras Nicolás mantiene la preocupación, era claro que se trataba de algo más importante, eso de ir al hospital varias veces y que le sangre la nariz no es normal

— cuando nos conocimos me dijiste que solo era una gripe que tenías, pero estoy seguro que se trata de algo más serio, ¿ no le has preguntado a tu abuela sobre lo que tienes ?

— emmm si, pero ella me dijo que no era necesario que lo sepa...

— ¿ cuando viene ?

— no me ha dicho con exactitud, pero dice que en esta semana debe de estar aquí — dice parándose alante de el — enserio me gusta que siempre te preocupes por mi — lo abraza — te quiero Nico Nico, espero que siempre estés conmigo...

— siempre estaré contigo Lucía, siempre...

(…)

Silencio, era lo que había en la mesa, solo se podía escuchar el sonido de los platos cuando el cubierto choca. Nicolás mantenía la cabeza baja mientras devoraba su comida, tenía mucha hambre.

— ¿ que hacías...en la casa de esa niñata ? — habló el padre terminando de comer y el pelinegro subió la cabeza — yo sabía que te andabas prostituyendo por ahí — ríe — ¿ cuánto te pagan ? O estás de niñero cuidando a esa pu...

—¡ no te atrevas a llamarla así ! — se levanta enojado de la silla

El padre solo miró mientras bebía de su vaso para luego mirarlo con el rostro serio, se estaba controlando ya que sus manos se cerraban en un puño.

— mira mocoso, a mí me respetas, sabes de lo que soy capaz...

— ¿ respetar ? Esa palabra aquí no existe y mucho menos para ti, ¡¡ ni siquiera respetaste las últimas palabras de mi madre !! Así que no me digas que te respete cuando tú ni conoces esa palabra, pero no te metas con Lucia

Se dió la vuelta pero su padre se levantó como bestia y lo tomo del cabello consiguiendo que de Nicolás saliera un grito desgarrador del dolor que sentía en su cuero cabelludo.

— ¡ pues te vas a aprender el significado de respetar en este momento maldito perro pulgoso !

FELICIDAD PROHIBIDA Donde viven las historias. Descúbrelo ahora