Felicidad de verdad [HyunMin] [ChanLix]

Capítulo 11.

Dos días después de haber publicado en su canal el vídeo con la receta para hacer cake pops, Felix recibió una llamada por parte de Eric. La conversación fue corta y tuvo un mensaje muy claro que el rubio ya se esperaba: quería terminar con él de manera definitiva, pero frente a frente.

Entró a una cafetería a las dieciocho horas junto con su novio y salió de ahí a las diecinueve, caminando junto a la misma persona, siendo ésta ahora su exnovio.

El primero en enterarse de la ruptura fue Lee Know. El pecoso no llevaba ni media hora soltero cuando llamó al mayor en busca de un poco de consuelo. Sabía que lo mejor para él era, en efecto, dejar de salir con Eric, pero aun así todos los recuerdos de lo que habían vivido juntos atacaban su mente sin piedad... Había algunos momentos agradables en medio de todo el caos que terminó siendo su relación, no podía sólo ignorarlos.

—Lix, en realidad es genial que ya no estés con Eric. Tal vez no lo sientes así en estos momentos, puede ser que te tardes un poco en darte cuenta, pero está bien, tarde o temprano también lograrás ver lo que digo.

—Gracias, hyung.

—Ahora tienes que ir a alistarte. Pasaré por ti en quince minutos.

—¿Alistarme?

—Sí, te llevaré a una fiesta —explicó, asegurándose de que el menor entendiera que no estaba haciéndole una pregunta—. Vamos a olvidarnos de todo esta noche.

—No sé, hyung... —Suspiró.

—Alístate —repitió—. Tenías quince minutos, ahora tienes catorce —le dijo antes de colgar.

En realidad no tenía el ánimo tan alto como para soportar una fiesta, pero existía la posibilidad de que apagar su mente y olvidarse de todo fuera precisamente lo que necesitaba para despertar bien a la mañana siguiente.

¿O no?

No... Volverse loco en una fiesta era peligroso. Si bien Lee Know estaría con él, nada le aseguraba que seguiría siendo así una vez que las bebidas alcohólicas se vieran involucradas.

¿Había alguna solución? Tal vez sí, tal vez podía invitar a alguien.

Le escribió un mensaje al mayor, preguntándole si era posible llevar con él a otra persona. Tan pronto como recibió una respuesta positiva, Felix buscó a Chan.

Una hora bastó para que comenzara a arrepentirse de su decisión. La fiesta se estaba llevando a cabo en el enorme apartamento de un amigo de Lee Know, había música ruidosa, gente bailando por todas partes, risas y un ambiente que habría podido disfrutar mucho de no ser por lo decepcionado que se sentía. Tenía miedo de contagiar su mal humor o de hacer que el otro australiano tuviera que pasar por una situación incómoda.

Felix le dio otro trago a su sexta lata de cerveza y miró hacia la calle por la ventana. No se estaba divirtiendo en aquella fiesta y, a esas alturas, podía asegurar que no habría nada interesante en la cercanía de no ser por Chan. Al encerrarse en una recámara con unas cuantas cervezas, el pecoso había aprovechado la privacidad para desahogarse.

El castaño dejó que Felix dejara salir todo lo que quisiera. Lo escuchaba con atención y le regalaba suaves caricias en la espalda cada vez que notaba lágrimas formándose en sus ojos.

—Estoy sensible... Pero es por culpa de la cerveza... —Se excusó.

—No te preocupes.

—¿Sabes? No es por hacer la lista más larga, pero otra cosa que no me gustaba de Eric es que cuando estábamos solos era "amor", "cariño", "cielo"... —Se quejó.