Perfect Blue 🦋 Gilbert Bougainvillea

┊🦋 Uno

Trataba de ayudar a Violet y a Gilbert, la más pequeña había perdido sus dos brazos y la pelinegra una de sus piernas, además de una mano.

–¡No voy a dejarlos aquí!– dijo Tn tratando de cargar a Violet y a Gilbert sin mucho éxito –Ahg...

La pelinegra hacia muecas y quejidos, ya que estaba perdiendo demasiada sangre. Gilbert entonces le miró.

–No sigas Tn, será inútil.

–¡No! ¡Hayare la forma de sacarlos de aquí!

–...Vivan Tn, Violet. Vivan y sean libres, lo digo de todo corazón– miro a la pelinegra –Te amo...

(.....)

Con el traje totalmente limpio, planchado y bien cuidado, esperaba junto a su más leal cadete, Tn Ruskivanovich, ya que estaban en una habitación, donde esperarían al hermano mayor del Bougainvillea.

–El ambiente es algo tenue como la neblina. ¿Esta bien que sea así? Puede afectar el entorno al que acostumbra.

–No debes preocuparte, estoy bien– dijo suavemente, de manera amable y sonriendo de lado, una sonrisa que apenas se distinguía.

–Si mi señor– sonrió de vuelta, con un ligero sonrojo.

Estuvieron esperando unos momentos más, ya que estaban ahí por petición del hermano de Gilbert. Dietfriet habló entonces, al llegar.

–Oye, Gil ¿Cómo has estado? Como siempre, tienes una cara deprimentemente seria. Es como la de papá.

[A diferencia de Gilbert, su hermano Dietfriet era de aspecto más "suelto", su cabello era más largo, tomado en una pequeña coleta, con el cuello de la camisa desabotonado, dejando ver un collar de oro]

Los dos hermanos se abrazaron y prosiguieron a tomar asiento en el sofá más cercano de donde estaban. Habían otras personas presentes además de ellos. Eran camaradas de Dietfriet, que el había traído al visitar a su hermano. Tn mientras, se mantenía en porte recto, ya que era parte de ella estar ante los Bougainvillea, los respetaba. Bebieron y fumaron en la barra situada en el exterior de cada apartamento. El humo blanco se arremolinaba alrededor del techo.

–Hermano eres...el mismo de siempre– hablo Gilbert, observando la figura de su hermano, quien no parecía soldado.

–Son vacaciones ¿Sabes? A diferencia del ejército, los de la Marina nos volvemos muy liberales cada vez que nos regresamos a tierra.

–Hermano...te vistes así sin importar si estás en mar o tierra ¿No? Ese pelo, si papá lo viera probablemente no lo hubiera permitido. Probablemente lo cortaría con su sable.

–Eso sería una molestia. Es bueno que muriera.

Dietfriet pretendía ser alegre, pero su hermano menor no lo dejó pasar, dándole una mirada severa.

Y quizás por su debilidad a recibir esa mirada, Dietfriet suspiro.

–Ah, lo siento. El podría haber sido un buen anciano para ti, pero para mí, era el peor. Es todo.

–¿Es la única razón por la que no asististe a su funeral y me dejaste tomar la herencia solo a mi?

–Te sienta mejor, ¿No? Esa casa nunca fue adecuada para mí y no estoy hecho para ser el jefe de la familia. En lugar de dejar el honor brillante de nuestro linaje se viera contaminado por mis pobres habilidades simplemente por ser el mayor, es mejor tener un tipo adecuado y justo haciendo el trabajo. Oye, Gil ¿No ha sido ya un largo tiempo? Solo perdóname, no quiero seguir sintiéndome culpable durante toda nuestra reunión. Podría haberme separado de la casa Bougainvillea, pero quiero seguir siendo tu hermano. Hablemos de algo divertido.

Gilbert guardo silencio al escuchar los argumentos de su hermano.

[Era costumbre de la familia Bougainvillea unirse al ejército, aunque este y la Marina eran organizaciones de defensa con el mismo propósito, eran entidades separadas. Siendo hostiles entre sí.

Y Dietfriet fue el primero en elegir la Marina por sobre el ejército, no solo uniéndose a ella, sino que labrandose una carrera profesional. Todo a base de conseguir sus propios logros bajo su esfuerzo y talento]

–Ya que finalmente has venido...¿Qué te parece visitar a mamá? Por favor, se nuestro mediador junto conmigo.

Si su hermano no fuera tan malo aceptado la realidad, las cosas no se habrían vuelto tan complicadas.

–Nuestra familia es grande, así que si fuera a ver a mamá, tendría que saludar a nuestras hermanas, a la abuela y a todos los parientes mayores ¿No? Seria una molestia. Puedo ver claramente que les grito y me voy antes de que comiencen a enlistar mis defectos.

Cuando Dietfriet se recostó sobre su espalda, con las piernas cruzadas, Gilbert dejó que su conmoción se reflejara con lenguaje abusivo.

–¿No somos familia? ¿No puedes hacer un esfuerzo para llevarte bien con ellos al menos un poco?