Perfect Blue 🦋 Gilbert Bougainvillea

┊🦋 Quindici

Gilbert tenía aptitudes para la milicia. Nunca sintió ansiedad o miedo cuando recibió ascensos en el ejército. Dios le había otorgado un destino que le hacía juego perfectamente.

–¿Ah?

–Como dije, si es apropiado para Violet podría dejarla a tu cuidado.

–¡¿De verdad?! ¡Lo tomó como una promesa! ¡Escribe una declaración!

Gilbert todo cuando fue tomado del cuello de la chaqueta de su uniforme y sacudiendo de un lado a otro.

–¡Dije "podría! ¡No está confirmado!

–M-Mi negocio definitivamente necesitara una chica que pueda viajar a áreas peligrosas sin dudarlo.

–Si la obligas a hacer cosas peligrosas, me niego.

–Bueno, incluso si digo que es peligroso...no es...como si fuera la regla.

–Continuemos esta discusión más tarde. Nos vemos, Hodgins.

–¡Oye, Gilbert! ¡No olvides lo que dijiste ahora sin importar qué! ¡Sin importar qué! ¡¿Entendiste?!

Ignorando las palabras de Hodgins, Gilbert llevo a Violet a su tienda, pasarían la noche, pero no quería que solos, suficientes malentendidos ya había provocado su apego, que simplemente haría algo "embarazoso"

(....)

Se mantenía acostada, mirando a un punto inexistente entre la oscuridad de su tienda. Sus manos reposaban en el broche, sintiendo un dolor en la garganta, reprimía sus ganas de llorar.
Escucho pasos cerca, por lo que trato de no hacer ni un solo ruido.

–Tn...– murmuraron casi de manera inaudible –Tn, ¿Estas despierta?

No quería responder, si lo hacía, sentiría que su voz se quebraria. Escuchaba el llamado de su nombre, hasta que Gilbert soltó un suspiro.

–Mayor– llamó Violet de manera baja, estaba fuera de la tienda.

–¿Qué pasa?– pregunto de la misma manera

–¿Qué debería....hacer más adelante?

–¿Qué quieres decir? Mañana es la última batalla. Cumpliremos con nuestros deberes como Fuerza de Ataque.

–No, quiero decir...después de mañana ¿Que debería hacer? Mayor, usted...estaba hablando de eso con el Mayor Hodgins. Que me dejaría a su cuidado.

–¿Estabas escuchando?....Eso...no se ha decidido todavía.

–¿Ya no soy necesaria?

–¿Violet?

–¿Voy a ser transferida al Mayor Hodgins...como resultado de ser desechada? ¿No podré recibir las órdenes del Mayor? ¿Ni siquiera de la General?

Tn escuchaba, fingiendo estar dormida, aquellas palabras por parte de Violet, y sobre como se refería a si misma como "cosa".

–Yo...muy probablemente...no pueda tomar órdenes del Mayor Hodgins. Yo misma no...lo entiendo muy bien...pero no puedo moverme si no es por órdenes de aquellos a quienes eh reconocido. Es por eso, que sería más útil...quedándome al lado del Mayor y la General.

Tn sintio más dolor en su pecho, como si fuera a sufrir un ataque. La cara de Gilbert se nubló frente a esa frase mecánica.

–¿Tanto así...quieres mis órdenes y las de Tn?

–Las órdenes son mi todo. Y...si ellas no son dadas por ustedes...yo...

–¿Por qué...tengo...que...ser yo?

–¿Eh?

–Después de esta batalla...ya no tienes que seguir mis órdenes, ni las de Tn. Yo...ella...planeamos dejarte ir. Deberías hacer lo que quieras también, no tienes que escuchar las órdenes de nadie. Actua por tu propia voluntad, ahora puedes...vivir sola en cualquier lugar ¿verdad?

–Pero...si lo hiciera, las órdenes de quien...

–No escuches las órdenes de nadie.

Escucharon tras sus espaldas, notando que aquella voz pertenecía a Tn. Quien intentaba sonar sería aunque estuviera llorando por dentro.

–¿Eso es...una orden? ¿Es la orden de la General?

–Eso no lo es...

–Pero dijo "No escuches"

–¡¿Por qué...piensas en todo como una orden sin importar qué?! ¿Realmente crees que te veo como una herramienta? Si ese fuera el caso ¡No habría sostenido a la pequeña tu en mis brazos o me habría encargado de criarte! Independientemente de todo, no te das cuenta...de como me siento...hacia ti. Normalmente, cualquiera...seguro entendería. Incluso cuando estoy enojada, incluso cuando las cosas son difíciles ¡Yo!-

No pudo terminar la frase, ya que pudo sentir que tan miserable se estaba comportando

–Yo...Violet...

No pudo soportarlo más, soltando las lágrimas en silencio, sosteniendo su pecho, justo donde estaría el corazón. Gilbert se había quedado en silencio, más sin embargo, intentaba acercarse a Tn para darle consuelo.

–Ge...ne...ral.

Desde el momento en que sus labios pronunciaron su primera palabra, Tn y Gilbert habían hecho lo posible por protegerla. Ellos también eran unos simples jóvenes cuando la conocieron, no sabían cómo criar niños.

–¿No tienes sentimientos? No es eso ¿Verdad? No es como si no tuvieras ninguno ¿No es así? Si no tienes sentimientos ¿Qué hay con esta cara? Puedes hacer una cara así ¿No? Tienes sentimientos, tienes...un corazón como el nuestro ¿Verdad?

Tal vez sus gritos pudieron escucharse en las tiendas cercanas.

–No...entiendo...los sentimientos