18 años

015:

Narra Lucas:

- ¿Quién ha dicho nada que yo vaya a celebrar algo contigo? - pregunta Valentina sonriendo y yo paso mi brazo por su cintura mientras abro la puerta de la habitación - creo que deberías descansar para preparar lo que te espera mañana.

- Puedo descansar contigo - contesto y ella me mira a los ojos - además señorita usted y yo mantenemos una ley vigente desde que nos conocemos ¿ya no te acuerdas?

- No me voy a poner a hacer el imbécil  con tus compañeros a ambos lados de la habitación - protesta y yo hago un puchero mientras enciendo en la luz - bastante mala fama tenemos ya los argentinos para seguir empeorándola.

- Hasta las dos - propongo y ella niega con su cabeza- no se va a enterar nadie, a penas se han enterado de que has entrado conmigo al hotel, si muchos con todo el alcohol que llevan encima pueden desinfectar un quirófano ellos solos.

- Hasta las dos - afirma y yo asiento con mi cabeza subiéndome a la cama y atrayéndola a mi - no me hagas que me arrepienta de esto Ocampos.

- Sé que te encanta - susurro mientras ambos empezamos a bailar riendo - soy yo o la habitación se mueve más de lo normal.

- Eres un borracho Lucas Ariel Ocampos - me responde mientras ambos no dejamos de reír mientras seguimos intentando mantenernos de pie - pues si que se mueve si.

- ¿Quién es la borracha? - pregunto sonriendo cuando se deja caer a la cama - no me vas a cortar el rollo aunque te tumbes nena, me has prometido hasta las dos.

- Eres un pesado - protesta riendo mientras intento hacer el pino - como te caigas yo no voy a dar explicaciones sobre tu lesión.

Narra Valentina:

- Hoy se cumple un mes que ya no me ves, te fuiste nada más quisiste renunciar quererme y como dueles, mientras pienso en ti y en lo que perdí quisiera evitar haberme permitido amarte para perderte - susurro antes de que unos pasos se escucharan a mis espaldas - no quiero irme todavía Franco.

- No soy el Mudo - informa y yo mantengo mi mirada fija en el suelo - te prometí que esto lo íbamos a pasar juntos ¿recuerdas?

- Lucas no quiero que te quedes conmigo, porque haya sido tan imbécil de no saber cuidar ni de mi propia hija - respondo antes de sentir como su mano coge la mía lentamente - de verdad que no, sabes que me va a doler más tu compasión que tu partida.

- No es compasión - comenta y yo asiento con mi cabeza levemente - ella también era parte de mi y sé que debí estar más con ustedes, sé que de verdad debía haber mostrado lo que de verdad sentía en ese momento, no es tu culpa todo esto.

- ¿Y cómo lo sabes? - pregunto girando mi rostro hacía él por unos segundos - el cariño que yo sentía por esa cosita no es comparable con nada.

- Porque la culpa la tengo yo - afirma y yo lo miro a los ojos - yo fui quien falló esa noche, si tienes que odiar a alguien aunque me duela, debes odiarme a mi.