|| No puedes mentir toda la vida. O dices la verdad o la verdad te delatará ||
Yuzuru siempre soñaba con un lugar oscuro, voces humanas y no humanas, no entendía el porque de eso, si nunca había leído libros de miedo o de misterio. Nunca le quiso decir a alguien sobre aquello, temiendo que la traten de loca, así que se lo guardó en el fondo de su ser.
Hasta que su ser somnoliento no pasó desapercibido por Astlyr, quien era entre todos los niños, con quien más cercanía tenía, por eso, una noche que no podía dormir por las pesadillas, le contó todo, se sintió bien el desahogarse, sintió como una carga se iba de sus hombros.
Pero nunca se dio cuenta que esa carga se la transfirió a Astlyr.
Desde hace cuatro años atrás supo la verdad de ese lugar, desde hace cuatro años le ha sido fiel a Astlyr con vigilar al ganado, pero ojo, solo Astlyr, jamás le sería fiel a la mujer que los dirigía a la muerte.
Por eso se sorprendió cuando su hermana le dio la tarea de vigilar a Emma, Norman y Ray, diciendo que últimamente los niños se daban cuenta de su ausencia, así descubrió que el trío sospechaba de un traidor entre los huérfanos y de su plan para descubrir si Don, Gilda o Astlyr era el espía.
No sabía que planeaba su hermana mayor.
Al siguiente día en la mañana, después de los exámenes, Norman le pidió que le acompañara a la sala donde las pruebas se realizaban para decirle una cosa, ella accedió y juntos se dirigieron al cuarto. Dentro, el albino se acercó a uno de los pupitres y se tiró al suelo colocando su cabeza justo debajo de la mesa.
—Ven —. Le dijo Norman a la chica quien hizo caso aun confundida, abrió los ojos sorprendida al ver un bolsa debajo. —Son unas cuerdas que tenemos, te quería mostrar dónde estaban escondidas.
'No entiendo, Yuzuru dijo que mis cuerdas estaban en la sala de juegos, ¿por qué Norman me enseña las cuerdas en la sala de exámenes?' pensaba Astlyr confundida.
—¿Te preguntas de qué están hechas? —. Le dice Norman, ella asiente. —Son manteles, como podrás estar pensando, no son necesarias las cuerdas en nuestras vidas como ganado.
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𝐒𝐓𝐈𝐋𝐋𝐇𝐄𝐓; 𝐍𝐨𝐫𝐦𝐚𝐧
أدب الهواة𝐒𝐓𝐈𝐋𝐋𝐇𝐄𝐓 || Dicen que la palabra es un arma, por eso el silencio es un escudo 【 Todos tenemos miedo a algo, Astlyr, a que suceda lo mismo que en el pasado. ...