─── ∙ ~ εïз Me vs Him Round 6 εïз ~ ∙ ───

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Demonios

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Demonios... No sabía qué hacer. Estoy tan jodidamente dividido, tenía ganas de gritarle a alguien o golpear algo, pero eso no era muy saludable de mi parte,así que... Traté de calmarme.

Esto era por Félix. Por Félix...

—¿Adrien? —Marinette volvió a preguntar, colocando una mano en mi hombro y de inmediato me tensé y me alejé de ella.

—Es tarde. Creo que será mejor que vayas a casa. ¿Necesitas que pida un taxi? —pregunté, casi temblorosamente, aun dándole la espalda mientras iba a la cocina por el teléfono.

—¿Qué? Adrien, son solo las 10, —dijo, su voz sonaba confusa y con un tinte de dolor. Maldición, solo necesito hacerlo rápido y ya lidiaré luego sobre cómo actuar cerca de ella cuando Félix quiera tener una cita de juegos con Marinette.

O mejor aún, no estaré aquí. Félix podrá pasar tiempo conmigo y también podrá tener sus 'Marinette days'. Funcionará perfecto.

—Estoy agradecido que pases tiempo con Félix, —dije, tomando el teléfono inalámbrico, apretándolo en mi mano.

—Adrien, hay algo que no estás diciéndome, —Marinette dijo, yendo de la sala a la cocina, —Pensé que éramos amigos. Puedes decirme lo que sea. ¿Qué hice? Ya dije que lamentaba tomar el tiempo de Félix. Podemos solucionarlo de alguna forma.

No lo entendía, ¿verdad? Pero no debía culparla porque este era mi problema. Solo que quería que los dos fueran felices. Aun si me alejaba de Marinette, y aun si Félix decidía pasar todo su tiempo con Marinette, no importaría. Desde que Félix llegó, me prometí a mí mismo y a sus padres que lo cuidaría y no iba a romper mi promesa ahora. Además, este era un pequeño sacrificio. No estoy arriesgando nada.

Hah, menuda mentira, Adrien. Sí, sigue diciéndote eso. Quizá nunca más volveré a encontrar a una maravillosa mujer como Marinette Dupain-Cheng. Huh, ¿quién dijo que la vida era justa? Siempre conozco a mujeres equivocadas. Perder a la que amo por la felicidad de mi sobrino no sonaba tan mal.

No respondí y solo pasé de largo a Marinette hacia donde tenía anotado algunos números para 'ciertas ocasiones'. Encontré el número de un taxi bastante confiable y marqué. Coloqué el fono en mi oreja y antes de que alguien pudiera decir algo, Marinette me quitó el teléfono y cortó la llamada.

—No me iré a ningún lado hasta que esto esté zanjado. En serio Adrien, deja de actuar como un niño y solo dime lo que tienes en mente. Solo... Deja de huir. No quiero perderte por algún malentendido del que no tengo ni idea.

Miré a Marinette, y me di cuenta de cuán cerca estaba. Sentí como si estuviera aferrándose a mí, sus azules orbes de pronto se humedecieron.

«Argh, maldición... No, por favor... No, Marinette. No quiero ser el que te haga llorar».

Sentí que sus manos sostuvieron con fuerza mis brazos, y pensé en salir con una mentira para quitarme de encima a Marinette. Desafortunadamente, mi mente no pudo pensar en nada. ¿De verdad tenía que contarle? Aunque claro, si iba a decirle la verdad de que la amaba, puede que entonces me soltara y me dejara. Bueno, supongo que esa era la forma más rápida de terminar esto.

Me vs Him (Adrinette)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora