Una de las generalizaciones más recurrentes es la asociación de la pobreza y la delincuencia, ya que al tener la óptica que cuando una persona que no goza de los recursos para satisfacer sus necesidades se ve obligado a recurrir a medios y formas ilícitas. Al mismo tiempo de que no es correcto socialmente hablar sobre esta relación, asumiendo que todas personas con escasos recursos son honradas para no faltar al respeto. Ambos extremos ignoran los matices y la complejidad del tema, sin embargo por un lado, hay que tener en cuenta que no es propiamente exclusivo de una carencia económica lo que orilla a una persona a cometer delitos, como negar la posibilidad que debido a un sistema desigual alguien no tenga otra opción que delinquir para solventar una necesidad. Por otro lado hay que tomar en consideración los factores relacionados con la escolaridad, la desigualdad, desorganización, tensión, urbanismo y narcotráfico.
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Un ejemplo claro de la falacia en relación en asociar la pobreza con el crimen es que a nivel estatal según la revista Forbes, Chiapas se encuentra en primer lugar con un porcentaje de 76.2% de su población en situación de pobreza; continua Oaxaca con un 66.8% con un aproximado de 2.66 millones de personas y continúan los estados de Guerrero y Puebla. Después tenemos en base al INEGI los siguientes índices de incidencia criminal:
Puebla, Puebla (92.%).
Tapachula, Chiapas (92.1%).
Ecatepec, Estado de México (92%).
Uruapan, Michoacán (92%).
Fresnillo, Zacatecas (91.9%).
Tlalnepantla, Estado de México (90.9%).
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En primer lugar se establece que no corresponden las localidades con respecto a los estados con mayor pobreza. En segundo lugar y siendo un tema demasiado extenso de estudiar, el tema relacionado con el ascenso del Cartel Jalisco Nueva Generación, la disputa por los territorios aledaños a la zona metropolitana y la impunidad han propiciado una gran desventaja en tema de seguridad hablando principalmente de Puebla.
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El tema de la escolaridad refleja un patrón significativo, ya que también en base a la educación se basa sobre las inclinaciones e ignorancia no solo por falta de valores cívicos. Digamos que por si sola la pobreza es casi nada determinante para delinquir, pero aunado al factor de la escolaridad, se convierte en una combinación más efectiva. De todos modos sigue siendo no determinante. Seguido con los otros elementos, la desigualdad propicia la tensión con respecto a las zonas con mayor seguridad, infraestructura urbanística y habitantes de mayor clase social. Esto debido a una creciente inconformidad, sentimientos de injusticia, codicia, envidia, inequidad, favorece un resentimiento social pero hay que entender que ellos no son culpables de dicha desgracia, sino al indiferente gobierno que gracias a su falta de compromiso social, causas fenómenos como la impunidad (de la cual somos acreedores del 99%) o la privación de oportunidades que obstaculizan que la gente con menores recursos se les haga imposible llegar al mismo nivel laboral, escolar y social. Después llega la desorganización y urbanidad que delimita al habitante a la forma de interactuar con su entorno. La tierra de Mad Max contra metrópolis como París. Ya se ha tocado el tema de la importancia ambiental sobre el individuo y en el caso económico, sigue siendo intrínsecamente ligado.
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Por ultimo y siendo un punto al que quiero darle énfasis, es la motivación de dicho delito al igual que la incidencia. Un señor que roba un pan en un Walmart por primera y única ocasión, como un extorsionador que vio más lucrativo ese negocio que trabajar en un empleo normal. Recordemos que al hablar de pobreza, estamos tratando de establecer las consecuencias de dicha condición. Porque ya sabemos que también hay delitos de cuello blanco en donde nos damos cuenta de que la clase social por sí sola no es sinónimo de crimen. También retomando la educación, existen miles de delitos culposos por parte de la gente de escasos recursos, mientras que los delitos de cuello blanco son esencialmente dolosos. La naturaleza del crimen se divide en forma y motivación, lo que significa que siempre hay una necesidad que se debe sosegar. Por lo cual, al establecer el perfil criminológico de distintos criminales, encontraremos ciertas conexiones entre los factores antes mencionados, en conjunto con el nivel socioeconómico.
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Al entender un poco más sobre esto, ayudará también a menos discriminación pero en personal el tema de gestión política y corrupción ha sido históricamente la causa principal que acentuó la desigualdad económica.
