El Heredero Del Vampiro

𝕮𝖆𝖕𝖎𝖙𝖚𝖑𝖔 45

Drake

—Aquiles, Cristal saquen a mis padres, a la gran anciana y a mí hermana de aquí y por favor ustedes no regresen — Les pido.

—¿Qué dices? — Mí padre desvía rápidamente su mirada hacia a mí.

—Tienen qué irse.

—Tenemos qué irnos — Habla mamá poniéndose enfrente de mí.

—Yo no — Camino hacia la pared del lado derecho, presiono una parte de la pared y se abre el pasadizo —.Vayan, rápido yo esperaré a ese cazador tengo muchas cuentas pendientes con él.

—No te vamos a dejar — Dice mí hermana —.Tú vienes con nosotros.

—No, no iré y ya no pierdan el tiempo — Digo y miro a mis dos vasallos —.Cumplan con mis órdenes, ahora.

Ambos asienten, Aquiles toma a la gran anciana y Cristal toma a mí madre y a Sophie. Los dos las hacen entrar al pasadizo con mucha dificultad ya qué ninguna quería irse, mí padre era el único qué aún se encontraba en la sala del trono mirándome fijamente.

—Tienes qué irte — Le pido.

—No voy a abandonarte — Me dice.

—Eso no está a discusión.

Tras mis palabras, aparecí frente a mí padre, lo tome del cuello, lo lance hacia el pasadizo de escapé, rápidamente vuelvo a tocar la pared y el pasadizo se cierra completamente.

El sonido de unos pasos se hicieron presentes en la sala del trono, suspiré y después dí media vuelta solo para mirar al legendario cazador de vampiros entrando con una ballesta en manos.

—Gran rey Drake — Dice él.

—Van Helsing, ¿Qué te trae a mí palacio?, ¿Vienes de visita?

—Sabes perfectamente a qué vine.

—¿Así?, ummm, no la verdad qué no me doy una idea.

—Quiero al vampiro abominación — Dice preparando la ballesta —.¿Dónde está?

—Salió, ¿Gustas dejarle un recado?

—No trates de ocultarlo, es tiempo de qué ese niño muera, Vlad Tepes está a la vuelta de la esquina.

—¿Qué quieres decir?

—Vlad está apunto de regresar, el tatuaje qué Draco posee está por ser completado — Me apunta con su arma —.No pienso permitir qué ese loco regrese por la culpa de ese mocoso, así qué más te vale qué me digas en dónde está para así poder acabar con esto.

—No te voy a decir nada.

—¿En serio?, ¿Estás dispuesto a morir por proteger a un vampiro qué causará la destrucción de todos?, eres estúpido, Drake, ese monstruo tiene qué morir tienes qué entenderlo de una buena vez.

—Ya dejemos las habladurías, Van Helsing — Mis dos puños se envuelven en llamas —.Ya te dije qué no te voy a decir en dónde está.