𝕮𝖆𝖕𝖎𝖙𝖚𝖑𝖔 47

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Draco

—¿No sientes ahora tanta paz y tranquilidad? — Me pregunta Fanny mientras ambos estábamos tomados de las manos recorriendo las calles de Brasov en camino al restaurante de mí madre —.Van Helsing está muerto al fin.

—Pero aún queda Vlad Tepes — Comenté, no quería decirlo pero era la verdad —.Aún queda ese loco qué está en caminó.

—Tendrá el mismo destino qué Van Helsing, vamos a pelear contra él y vamos a ganar la pelea — Desvia su mirada hacia mí y me sonríe —.¿Verdad?

—Sí — Sonreí también mientras la miraba —.¿Te han dicho qué te ves hermosa mientras sonríes?

—Muchas veces.

—¿Así? — Ambos nos detenemos y tomó su cintura —.¿Quién?

—Los miles de admiradores qué tengo — Acerca un poco su rostro al mío —.¿Por qué la pregunta, señor Blackwood?, ¿Acaso está celoso?

—Tal vez sí, estoy celoso, creo qué está noche cenaré admiradores de la señorita Jones.

Ella da una pequeña risa tras escucharme, ella une sus labios con los míos un momento y después me mira.

—Tenemos qué darnos prisa, tú mamá nos quería ver desde hace una hora.

—Es verdad, vamos.

Ella asintió y después los dos reanudamos nuestro camino hacia el restaurante. Al llegar a la plaza de la ciudad notamos desdé lejos cómo había una fila enorme para entrar al restaurante, Fanny y yo nos acercamos y vimos a Katy atendiendo a los clientes qué iban llegando con ayuda de dos meseras.

—Gracias al cielo qué llegaron — Nos dice ella —.Esto se está saliendo de control nunca habíamos tenido tantos clientes y los chefs y las meseras apenas y pueden al igual qué nosotros.

—Tranquila, tía hemos venido a salvarlos, dinos qué hay qué hacer — Le digo.

—Vayan con Veronica, ella está en la cocina ayudando les dirá qué hacer.

—Ok — Le dice Fanny.

Entramos al restaurante y caminamos rumbo a la puerta de la cocina. Nunca había visto el restaurante tan lleno estoy verdaderamente sorprendido.

Llegamos a la puerta, la abrí y entramos viendo un completo descontrol, los chefs no sabían qué hacer los pobres estaban tan apurados qué apenas y podían hacer una cosa. Fanny y yo vimos a mí mamá ayudando en la estufa y los dos caminamos hacia ella para qué nos dijera qué era en lo qué podíamos ayudar.

—Mamá — La llamé.

Ella giro y nos vio a mí pareja y a mí.

—Al parecer tienen mucho trabajo — Le dice Fanny.

—Nunca había habido tantas personas — Responde mamá.

—¿En qué podemos ayudar? — Pregunté.

En ese momento la puerta de la cocina se abrió, los tres vimos hacia allá y ví a mí papá entrar, estaba vestido con un traje de mesero, era muy gracioso parecía un pingüino.

Trate de contenerme pero no pude evitar empezar a reírme.

—¿Crees qué es gracioso? — Me pregunta él no muy contento —.La salvaje de tú madre me obligó.

—No te quejes — Le dice ella —.No tenías nada qué hacer hoy.

—Vaya, al parecer ahora eres el rey de los pingüinos — Bromee —.Te ves bien.

El Heredero Del VampiroDonde viven las historias. Descúbrelo ahora