Recién salido de rehabilitación, Jisung decide reconectarse con su hermano Minho. Quedarse atrás de los problemas no es tan fácil, especialmente con un policía viviendo a un lado.
˚₊· ͟͟͞͞➳❥ Hyunsung (Hyunjin x Jisung)
˚₊· ͟͟͞͞➳❥ Hyunjin¡!tp. Jisung...
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—Mierda. —Saqué el sobre del cesto de basura. —Sólo ábrelo. —Lo giré y enganché mi dedo justo debajo de la solapa. —Mierda— Resoplé y lo tiré de vuelta a la basura. Esto es ridículo. Dejé el cuarto. Dos minutos después, estaba de vuelta, tomando la maldita cosa de la basura por enésima vez en el día. —Vamos, Jisung, —me animé a mí mismo. —Sólo abre el maldito sobre.
Todo esto era culpa de Lalisa. Ella y su "Puedes ser lo que sea que quieras" y toda esa mierda. ¿Quién diablos iba a dejar a un chico recién salido de rehabilitación en su escuela? Seguramente esas personas no. Tiré el sobre nuevamente a la basura.
Necesitaba una bebida. Por supuesto, no tenía una bebida. Seguía teniendo esa tendencia a hacerme adicto a cosas, así que básicamente: si mucho de algo podía matarte, me mantendría apartado de eso. No iba a volver a rehabilitación.
Supongo que no había sido del todo malo. Conocí a Lalisa. Ella era mi consejera al decir No a las reuniones del crack. Ella sacó lo peor de mí, pero era justo lo que necesitaba. Desde que Dahyun estaba siempre en la carretera, Lisa se presentaba cada vez, ahora y en ese entonces, para patear mi trasero y asegurarse de que me mantuviera limpio. Ella fue quien empujó las solicitudes por mi garganta hasta que finalmente las llené. No tenía intención de mandarlas. Debió ser Lisa quien lo hizo.
Bueno, ella podría abrir la maldita cosa. No iba a ser rechazada.
Me tumbé en el sofá y tomé el control remoto. Pasé por los canales tratando de encontrar algo más que reality shows. ¿Cuántos más programas estúpidos podrían hacer? Tal vez debería mandar una solicitud para eso. Ellos siempre tenían a la gente más jodida que se podían encontrar. Seguramente, calificaría.
—Carajo— susurré. No podía evitarlo más. Tomé mi carta de rechazo de la basura y la rasgué para abrirla antes de que pudiera evitarlo nuevamente.
Estimado Sr. Han,
—Estamos insultados de que nos enviara su solicitud— murmuré. Entonces, inhalé y continué leyendo la carta actual en vez de hacer la mía.
Felicitaciones
¿Qué diablos?
Es un gran placer ofrecerle la entrada a la generación 2019.
