Joaquin Gress.

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JOAQUIN GRESS

Mi hermana y yo estabamos sentados juntos, en el columpio que estába en la parte de atrás de la casa de mi abuelita Martina, mis mirada estaba fija en las hojas de los árboles, el aire hacía que mi cabello bien peinado se enredara.

Levante mi cabeza, fijando ahora mi vista en mi hermana.

Ren, mi hermana mayor. Estába con una libro pequeño en su regazo, son cuentos infantiles, que tonto ella ya tenía trece para estar leyendo ese tipo de libros. Su cabello bien recogido en un coleta alta de caballo, su vestido con cuadros azules y blancos. Cualquiera que la viera pensaría que era una niña tranquila.

— Deja que verme, Joaquin. — Su voz cambio, cerrando el libro fuertemente y poniéndolo en el pequeño espacio que había quedado a la hora de sentarnos en el columpio rodiado de flores. — ¿Cuantas veces te ha dicho mi abuela que es incomodo ver a las personas mientras están concentradas?

— Muchas veces, — a Ren le gustaba acatar todas las reglas de mi abuela — ¿Qué cuento estás leyendo ahora?

— Hansel y Gretel, todavía me faltas más cuentitos para leer. — Desvío su mirada de mí y la dirigió otra vez a su libro.

— Renata, tú sabes porqué mi papá no fue al entierro de mi mami. — Mi hermana me dio ahora una mirada penetrante, me encogí en el lugar que estába.

— No me hables de ese señor, Joaquin. — Su voz cambio a una más fuerte. Con odio y rencor. — Ahora sólo somos mi abuelita, tú y yo. Ese hombre al que le llamas papá prefirió irse con esa pe-

— ¡Callate, Renata! — escuchamos la voz de la abuela, venia con un plato de galletas con chispas de chocolate encima.

— ¡No me voy a callar! Joaquin tiene diez años, está grandecito para saber todo lo que pasó.

— ¡Renata no lo hagas!

— Joaquin, tú 'papá' le era infiel a mi madre con su secretaria , por su culpa mi mamá murió, ¿por qué crees que lloraba todas las noches?  En verdad creías cuando te decia que se cortaba con una aguja cociendo por eso lloraba. — Renata estába enojada y mi abuelita en estos momentos ya se encontraba llorando. — No seas ingenuo Joaquin, por Dios, date cuenta tu padre nunca será una buena persona.

— ¡Renata! andate a tu cuarto. Estás castigada. — Mi abuela le gritó, ella agarro su libro y se fue en sus ojos se podía ver la cólera y la furia con la que dijo esas palabras.

— A-abuelita, ¿es cierto lo que dijo Ren? ,— mi voz sonaba entre cortada, y mis ojos estaban cristalizados.

— Mi amor, no le hagas caso a tu hermana. Mejor come las galletas que preparé, ¿okey?

Asentí.

Pero todavía tenía la duda por lo que dijo mi hermana

[• • •]

La noche llegó, mi abuelita me arropo. Dándome un beso en la frente.

Trate de hacerme el dormido. Cuando ella se fue, espere unos minutos para poder pasarme al cuarto de Renata, quería saber más sobre lo que dijo en la tarde y por que mi abuela la callo.

Me senté en mi cama, mis pequeños pies descalzos tocaron la madera fría, con pasos lentos sin hacer ruido, pase al dormitario de mi hermana mayor, ella estaba sentada en su cama su espejo estaba en frente de ella, su cepillo peinaba sus cabellos castaños mojados

— Sientate a mi lado, Joaquin.

No dije nada solo hice lo que ella me mando.Ella puso el cepillo en su tocador y volteó a verme. Me regalo una sonrisa triste.

Cada palabra que salia de su boca, me hacia derramar una lágrima.

Jamás creí odiar tanto a dos personas en mi vida, a mi padre y a su secretaria. Allison, ella venia todos los fines de semana a mi casa, se sentaba en el lugar de mi mamá. Mientras espera que mi madre la atendiera.

Renata termino llorando junto a mí, nos dimos un abrazo, ella apretaba mi cuerpo y sus lagrimas empapaban mi pijama.

— Joaquin, me voy a ir a vivir con mi papá a Estados Unidos.

Renata era mi hermana de parte de madre, mi hermana le tenia rencor a mi padre, era mejor que ella se fuera con su padre biológico.

— Ya le comunique a mi abuela, en dos días sale mi vuelo.

— Te extrañare mucho Reno.

— Yo también te extrañare, Joaquin.

Nos fundimos en un abrazo, los dos nos apretabamos como si no quisiéramos soltarnos, sentimos otro cuerpo apretarnos, era mi abuela, nos besaba toda nuestra cara, como si.., como si quisiera borrar los rastros de nuestras mejillas llenas de lágrimas

***
Hola.

El único capítulo que será narrado por Emilo, es el siguiente.

Dudas o teorías por aquí:

Nos vemos en el siguiente capítulo, les amo<3

Siempre Seré El Otro - EmiliacoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora