[Prologo] Bienvenida

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"blablabla" son pensamientos

-blblblblaaaa.- son dialogos

-.... fue a casa de Pedro.- estan diciendo el nombre del lector.

Los flashback, escritos, frases dichas en otro idioma distinto al original de los personajes y otro tipo de recursos narrativos estaran normalmente en cursiva.

Disclaimer: Shingeki No Kyojin no es mio. Su autor es Hajime Isayama. La historia si es mía.

Advertencia: OOC (Out Of Character), Lenguaje Vulgar y Contenido Sexual.

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Hubieses preferido haber muerto en las fauces de un titan que verte obligada a regresar después de eso.

Desde tu caballo podías ver la capa verde del Comandante Smith ondear frente a ti con la insignia de la Legión de Exploración volando en el aire. Intentabas concentrarte en esa imagen para no pedirle a tu superior que te abandonara allí, que te dejase ser devorada por los gigantes para no tener que regresar al castillo... Para no tener que ir a verle.

Porque, en cuanto pusieras un solo pie en los territorios de la base, él se enteraría... Y estarías muy, muy, muy jodida.

-¡Ya estamos cerca. Apuren el paso!- Ordenó Erwin, haciendo que desviaras la vista hacia adelante y observaras como se comenzaba a vislumbrar las torres del cuartel de la Legión en el horizonte. Casi podías sentir la mirada asesina del Líder de los Soldados desde alguna de esas pequeñas ventanas incluso desde esa distancia.

"Titan Colosal, por favor, este es un muy buen momento para atacar... Atácame." Lloriqueaste mentalmente. Casi pudiste ver tu vida delante de tus ojos durante el corto trayecto hasta los establos del castillo, en donde intentaste ganar tiempo llevando tu misma a tu caballo... Pero no fue suficiente tiempo.

-¡Bienvenida de vuelta, ....-Taichō!- Tensando los músculos, te giraste cuando el muchacho de cabellos cafés y ojos turquesa surcados por rayos dorados te llamó por tu nombre y tu rango, observándolo hacer el saludo de la Legión. -Me alegro de que haya regresado sana y salva.-

-Oh, Eren... Hola...- Saludaste a tu vez con el mismo gesto de la milicia, descansando ambos mientras sentías tu nuca arder por el terror que te estaba invadiendo. Ya sabías muy bien porque el "chico titan" estaba allí. -¿Q-Qué tal todo?-

El muchachito te miró de una manera tan condescendiente que sus ojos casi te gritaron que dejaría una corona de flores sobre tu tumba después de que él te matara. -Será mejor que suba... Él ya sabe que usted está aquí.-

Claro que lo sabía.

Subiste lenta, tortuosamente cada escalón, recorriste al paso más lento posible cada pasillo, y casi contabas cada segundo de vida que te quedaba, que eran la misma cantidad de metros que había entre donde te encontrabas hasta su oficina. Estabas hiperventilando cuando te viste frente a su puerta y las manos te sudaban del simple terror, casi podías sentir el miasma que su ira espiraba incluso desde el pasillo. Estabas jodida, jodida, jodida.

Levantaste una mano lentamente, rezando plegarias para María, Rose y Sina, y tocaste tres veces la puerta.

-Pasa.

Su voz te causó escalofríos, más aun porque obviamente él ya sabía que eras tú. Abriste la puerta lentamente y pasaste con cuidado, como si el suelo fuese de fuego.

-C-Con permiso...- Susurraste, cerrando la puerta detrás de ti. Fue entonces cuando notaste su mirada.

Estabas muerta.

Roulette Of MemoriesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora