(ノ^∇^) ノUn fanfic de Shuumatsu no valkyrie.
T-N Femenino sufre una ruptura amorosa que la hace volverse introvertida y callada. Pero no solo ese suceso le afectara en su vida, ya que recuerdos extraños la atormentaran constantemente. Permitiéndole r...
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Mi vida no es muy interesante que digamos. Nací y crecí en un pueblito rodeado por árboles, no era grande, pero cada persona se conocía en la zona. La vegetación abundaba y todo a su alrededor era colorido por las hermosas y olorosas flores que la naturaleza nos brindaba.
En toda mi vida no hice más que estudiar y trabajar, para tratar de ser la hija prodigio de la que su padres se sintieran orgullosos. Logre terminar la universidad y graduarme con honores a los 22 años.
En fin, yo era conocida por todos, por ser una chica sobre saliente. No es que no me guste la idea, de echo me ponía feliz cuando las personas me llegaban a saludar, pero honestamente no me gustaba mucho entablar una conversación larga con alguien. No después de haber sufrido aquella decepción amorosa con un sujeto que se hacia llamar mi confidente. Y mucho menos, al saber que la mayoría de las personas conocían de la situación.
Entonces te estarás preguntando ¿Qué tiene que ver todo esto de nuevo?. Probablemente me hubiera gustado que fuese una típica historia de amor, pero el destino me tendría preparada una historia diferente. Una en la que yo no era una simple humana, -en realidad era una deidad llama Quetzalcóatl- y era constantemente vigilada por un dios, al que probablemente mi corazón le pertenecía.
Mi vida nueva, acababa de comenzar justo en aquella tarde de Abril. El clima era templado, y las flores resaltaron aquel rojo tan hermoso de sus largos cabellos. Levanto sus manos hacia mí, y con aquella hermosa sonrisa me dijo: <<Te e buscado mi bella serpiente emplumada>>. Una persona normal, se desconcertaria. Sin embargo, yo comprendí perfectamente lo que estaba pasando. Fui directo a sus brazos y susurrandole al oído le respondí: <<Estoy de vuelta, mi grande y fornido guerrero del trueno>>. Y así empieza mi historia.
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