CAPITULO EXTRA PARTE II

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Después de la consulta con aquel doctor Tony tuvo que dejar al rubio solo para dar las órdenes de construir una cabaña, o mejor dicho un granero, a las afueras del castillo, siempre quedando en los terrenos del reino, eso días Tony se la pasaba separado del rubio para poder supervisar la construcción, a Steve le molestaba pero sabía que después de que todo eso terminará el castaño sería completamente suyo y de su hijo.

Por suerte para el rubio, Tony siempre lo acompañaba a comer y este aprovechaba para tener sus momentos de intimidad, y en las noches que el castaño llegaba cansado Steve lo mimaba y dejaba que se recostara en su abultado vientre.

———¿Cuánto más hace falta?——— preguntó el rubio mientras acariciaba los cabellos de su esposo.

———5 días más, solo faltaría agregar las puertas y equiparlo——— explicó el castaño.

———Nos haces mucha falta——— confesó el rubio. Tony al escuchar eso se apoyó con su codo para poder mirar fijamente a su esposo.

———También me hacen falta——— y con su mano libre la posó en el vientre de Steve ———Pero ya falta poco para que estemos juntos de nuevo———

———Lo sé, pero a medida pasan los días ya no me basta con tener tu ropa en la cama, necesito de tu aroma...——— confesó mientras posaba su mano sobre la del castaño ———Te necesito Tony———

———Solo un par de días más amor y seré completamente tuyo——— dijo el castaño mientras se acomodaba para darle un casto beso en los labios a su amado.

Steve se moría de ganas por estar con Tony, pero sabía que estaba cansado y que mañana tendría que ir de nuevo a supervisar la construcción solo suspiró con pesadez y se acomodó en la cama para dormirse. Tony ya conocía todas las facetas de Steve y ese suspiro no pasó por alto, sabía que estos últimos días no había podido satisfacer debidamente a su amado así que se acercó a su esposo para abrazarlo.

———Me tomaré el día libre mañana, dejaré a Pepper y a Rhody encargado de la construcción——— susurro en el oído del rubio ———Empezando desde ahora tienes 24 horas para satisfacerte——— informó para después comenzar a mordisquear la oreja del rubio, sabiendo que este era uno de los puntos debilidad de este.

———Tony...——— gimió al sentir como el miembro semi erecto del castaño se restregaba entre sus nalgas de forma descarada.

Con la lujuria a flor de piel Steve se posicionó encima del castaño, esa noche ninguno de los dos durmió desquitando de todo aquello no habían podido hacer por la construcción.

Los 5 días pasaron rápido y ya todo estaba listo para mudarse, lo único que hacía falta era la revisión que Strange le haría al rubio para dar su consentimiento.

———Todo parece ir por camino——— confesó el doctor una vez terminó de hacer el chequeo.

———¿Y eso significa?——— preguntó el castaño.

———Significa que mañana mismo se pueden trasladar y Steve tendrá que transformarse——— notificó.

———¿Y sobre los calores de mi esposo?———

———No sabría decirte si desaparecerán al momento de transformarse o si aún estarán presentes, pero tú deber como esposo es estar con él todo el tiempo y complacerlo——— Tony se quedó paralizado al solo imaginar el tener que satisfacer a Steve en su forma de Dragón, ya de por sí como semi humano era complicado darle aguante, no digamos en un dragón de 10 metros o más.

El Principe y El DragónDonde viven las historias. Descúbrelo ahora