—Gracias, mamá... Pasaré a recoger a Hugo por la tarde. Siento que tengáis que cuidarlo tanto últimamente; es que tengo muchísimos trabajo por hacer y no puedo estar pendiente de él. Bueno... Claro, iremos a comer el domingo. Tengo que colgar ya. ¡Adiós, mamá...!
Ladybug cortó la llamada y miró a Chat Noir con expresión agónica.
—¡Es como una regresión! ¡Me siento fatal! —dijo con ambas manos en la cabeza—. En su momento me convertí en una auténtica experta de las excusas, y tener que volver a hacerlo...
—Piensa que es por una buena causa, mi lady. —Él le guiñó el ojo y sonrió.
—¡No empieces, Chat!
—Además, a Hugo le encanta pasar tiempo con los abuelos en la pastelería después de todo, y con ellos está a salvo.
—En eso tienes razón... Venga, ¡no dejemos que ese akuma siga campando a sus anchas!
Ella lanzó su yo-yo y saltó con agilidad, seguida por Chat Noir.
—No soy Jagged Stone, ¡soy Légende Vivante! —exclamaba en lo alto de la torre Eiffel el akumatizado de aquel día. Sus cabellos eran plateados, y permanecían de punta haciéndole un enorme tupé sobre la cabeza. Cargaba con una guitarra gigantesca de color púrpura brillante, que con cada rasgueo transformaba a las personas en trastes de la guitarra. Cuantas más conseguía, más largo era el mástil del instrumento, aumentando la onda expansiva de su sonido, alcanzando a víctimas más lejanas.
—Vaya, vaya... Mira quién tiene la crisis de los sesenta —comentó con sorna Chat Noir, agazapado a cuatro patas sobre la estructura de la torre. Légende Vivante lo miró feroz y trató de atizarle con su música, pero el héroe saltó y lo esquivó—. No te conservas tan mal, Jagged. ¡Aún tienes a tus fans!
—¡He dicho que soy... ¡LÉGENDE VIVANTE! ¡DADME LOS MIRACULOUS SI NO QUERÉIS SER VIEJAS GLORIAS TAMBIÉN! ¡ROCK 'N' ROLL, BABY! —Volvió a intentar alcanzarle.
—Me temo que ya lo somos, y menos mal que estos trajes no encogen... —dijo con escepticismo Ladybug, que estaba sujeta de la cuerda de su yo-yo, y colgaba por delante del villano sin recibir ni un guitarrazo—. ¿Por qué haces esto, Jagged Stone? Serás una vieja gloria, ¡pero sigues siendo el mejor rockero de París!
—¡Cállate! ¡Dadme esos miraculous de una vez! ¡Sufriréis el mejor riff que hayáis oído en vuestra vida!
—La música está para disfrutarla, ¡no para sufrirla! ¿Quieres que te maúlle una nana y así descansas de tanto espectáculo? —sugirió Chat, que se alejaba sobre su bastón para escapar de la onda expansiva.
—¡El show debe continuar! —gritó el akumatizado.
—Ya está bien de juegos de palabras, minino. -Ladybug le puso un dedo ante la cara para evitar que Chat Noir dijera algo más. Ambos se estaban refugiando ahora tras una columna en el interior de la torre Eiffel—. ¡Es momento de acabar con el maldito show!
—¡Esa es mi línea! ¿Conque tú sí puedes hacer juegos de palabras, Buginette?
—¡Lucky Charm!
Cayeron en las manos de Ladybug unas tijeras pintadas de rojo y negro.
—Genial. ¿Vamos a cortar de raíz el show? Un poco literal, ¿no te parece? —dijo su compañero, encogiéndose de hombros.
Ladybug observó con ojos agudos al villano que se aproximaba. Su visión se paró en la guitarra y en el cable que salía de ella, conectado a la espalda de Légende Vivante.
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🐞 MLB: Descubriendo a mis héroes
FanfictionEmma Agreste Dupain-Cheng ha encontrado una vieja página web que habla de los superhéroes que salvaban a los habitantes de París hace muchos años. Se muere por descubrir más de sus nuevos ídolos, pero no tiene ni idea de lo bien que los conoce en re...