Capitulo I

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Frunzo el ceño cuando siento a alguien removerse a mi lado, abro los ojos, y capto como a mi lado se mueve un chico. Miro el cabello rubio que aparece ante mis ojos.

Me levanto rápidamente de la cama, y por suerte el chico no se despierta, busco con la mirada mi ropa, y cuando la encuentro me visto torpemente. Me hago un moño en el cabello, y miro la hora en mi celular.

5;57AM

Bien, tengo tiempo aún. Salgo de la habitación del chico, en la sala de su apartamento no me encuentro a nadie, por lo que agradezco profundamente. Salgo del departamento, y abordo el ascensor que me lleva al primer piso.

Ya en la calle, tomo un taxi, y mientras el hombre conduce saco el celular de mi bolso.

Yo;
«Se me hizo tarde, fue una gran noche, Jayden, luego hablamos»

Apago mi celular, lo guardo dentro de mi bolso, llegamos a mi casa, le pago al taxista, y suspiro de alivio al no ver el auto de mamá fuera de la casa aún. Rodeo la casa, y entro por la ventana de mi habitación. Ya dentro de mi cuarto, cierro la ventana, y me coloco mi pijama.

Desarmo mi cama completamente, y me acuesto sobre ella. Pasan los minutos, y escucho el motor del auto de mamá.

Bueno, resulta que ser hija de una doctora, tiene sus cosas buenas, por ejemplo, pasar la noche fuera de la casa. Escucho la puerta principal abrirse, y a los minutos se abre la mía. Siento como el colchón de hunde cuando mamá se sienta a mi lado, me acaricia el cabello que esta completamente desordenado.

—Cariño— me llama, y abro los ojos lentamente. Bostezo.

—¿Mhn? —pregunto tapandome la boca.

—Ya llegue, ¿Quieres que te prepare el desayuno, o lo haces tu?

—Tranquila, lo hago yo. Ve a dormir, trabajaste doce horas corridas, seguramente estas cansada— asiente, y me da una sonrisa. Besa mí frente, y se va, dejandome sola.

Agarro mi movil, y conecto el cargador que se encuentra al lado de mi cama. Miro mi whatsapp, y me encuentro un mensaje de Jayden.

Jayden;
«Tranquila, lo entiendo. Dudo que tu mamá te permita dormir con un universitario. Luego hablamos, guapa»

Sonrio.

Conoci a Jayden en un club, nos enrollamos, y cuando todo termino, nos pasamos nuestros numeros, primero solamente fuimos amigos pero nos dimos cuenta, que la tensión sexual era mucha, asi que decidimos ser amigos con beneficios.

Me levanto, y voy hasta la habitación de mi hermana menor, abro, y la encuentro durmiendo boca abajo, con la boca abierta, y un hilo de baba cayendo sobre su mejilla y almohada.

—Levante, Iara—digo cuando se remueve.

—voy— dice antes de darse vuelta. Voy hasta el interrumpor de su habitación, y enciendo la luz, haciendo que me mire mal— ¿Sabias que eres una maldita?

—Tambien te amo hermanita —digo con ironia, antes de cerrar su puerta e irme al baño.

Me ducho, dejando que mis músculos se relajen, salgo del baño con una toalla alrededor de mi cuerpo, voy hasta mi habitación y me encierro en ella. Me visto con un Jean negro con roturas en las rodillas, una blusa ajustada, y mis tipicas converse blancas.

Preparo el desayuno para mi, y mi hermana, quien en unos minutos aparece bañada, y con una toalla en su cabello.

—¿Bianca aún no llega? —pregunta una vez que termina su desayuno. Bianca es la vecina de al lado, niego con la cabeza.

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