ALGUIEN A QUIEN PROTEGER

CAPITULO 11: NO SE PUEDE CONTROLAR EL CORAZON

Hasta este día nunca creí en cosas tan banales como el karma pero si lo que estoy viviendo no es karma por todo el daño que le infligí a la miko, no sé qué clase de castigo es.

Deje a Rin en la aldea que frecuentaba la miko solo para estar cerca del pozo y esperar a que vuelva, extraño su sonrisa, sus ojos, sus berrinches, su escandalosa manera de reírse.

Desde el día en que llego a mi castillo la forcé a convertirse en una mujer digna de gobernar a mi lado sin darme cuenta de que ya era perfecta.

Con mi egoísmo solo conseguí alejarla y apagar de a poco la llama que la hacía brillar, si tuviera la oportunidad deberla le diría lo arrepentido que estoy, decirle que no aguanto que el dolor, solo quiero pedirle perdón.

-Madre. –Se encontraba como de costumbre sentada en su trono con expresión despreocupada.-

-Hijo mío ¿A qué debo el honor de su visita? –Sarcástica como siempre.-

-Ya sabrás mi situación madre.

-¿Qué te lamentas por una humana? Toga no te dejo buenas herencias, solo debilidades. –Ahora entiendo que mi desprecio por los humanos no era más que el desprecio de mi madre hacia la mujer por la que mi padre la abandono.- Superaras tu enamoramiento por esa mujer.

-No quiero superarlo.

-¿Qué es lo que quieres entonces?

-La quiero a mi lado, a ella a nuestro cachorro, necesito llegar a donde se encuentran.

-¿Y?

-Se que tú podrías ayudarme llegar hasta ellos.

-Podría ¿Podría? Pero ¿Por qué debería?

-Madre jamás te he pedido nada ¿Es mucho pedir un gesto hacia tu único hijo?

-Sesshomaru no seas melodramático –No quiero suplicarle, pero de ser necesario...- Esta bien, pero debes darme tiempo para investigar...

-Madre... -No puedo ocultar mi sorpresa, fue más fácil de lo que pensaba.-

-Ya no nos pongamos sentimentales. –Me sonrió como nunca antes lo había hecho, de hecho creo que jamás la había visto sonreír.- Puedo hacer algo por ti ahora... pero no será gratis.

-Contigo nada lo es.- ¿De qué se trata?

-¿Quieres verla? ¿Aunque no puedas hablarle ni tocarle? –No entiendo muy bien de habla así que solo me limito a asentir, se movió en su trono hacia un lado y con mano palpo el espacio libre.- Siéntate aquí. –Hice lo que me decía y al estar a su lado recuerdos de mi pasado que había mantenido encerrado se hicieron presentes.- Como cuando eras un cachorro.- Tomo el collar que siempre lleva puesto, empezó emanar una extraña luz y frente a nosotros una ilusión, no es una ilusión, es una visión un poco borrosa, es Kagome, en un lugar extraño ¿Sera su habitación en su mundo? Hay muchos objetos que desconozco pero definitivamente es ella.

Sostiene algo entre sus brazos ¿Sera posible? Aun faltaban unos días, como si me estuviera escuchando descubrió de la manta lo que sostenía, es nuestro hijo, está dormido y aun con esta pobre visión que tengo de ellos puedo distinguir que se parece a ella, la veo sonreír, recupero el brillo y la alegría que yo le arrebate en mi estupidez. –Mi pequeño Toga.- ¿Toga? ¿Le ha puesto el nombre de mi padre? Acaricia su mejilla con extrema delicadeza.- Crecerás y será muy fuerte como tu padre...- La visión desapareció.

-Madre...

-Es todo lo que puedo hacer hijo.

-Ha sido más que suficiente.- Le tomo la mano y me mira sorprendida.- Gracias madre.- El rubor en su blanca piel se hizo notar.-

-Hijo tonto... Solo quiero verte feliz. –Aunque reconfortantes palabras y un momento como no imagine tener nunca con mi madre... es una situación extraña para los dos.- Así que esa chiquilla le puso el nombre de tu difunto padre.

-Así parece... -Y sin consultarme.- Me perdí el nacimiento de primer hijo, supongo que me lo merezco, por cierto ¿Qué es lo que quieres?

-Ah, pues a cambio de dejarte verlos quiero que tu primera hija mujer lleve mi nombre.

-Me imaginaba que saldría bastante caro...

Después dejar el palacio volví a la aldea donde esta Rin y los amigos de la miko, sus palabras resuenan en mi mente "Crecerás y serás muy fuerte como tu padre" puede que después de todo ella no me odie.

-Señor Sesshomaru ¿Ha venido por mí?

-Aun no, pero pronto volveremos.

-¿Al fin vas a llevarte tu peste lejos de aquí Sesshomaru? –Escuche los intentos de Inuyasha por provocarme pero por esta vez lo dejare pasar.-

-Inuyasha, mi hijo acaba de nacer así que hoy no tengo ganas de perder el tiempo pateando tu trasero.

-¿Cómo puedes saberlo? ¿Acaso..?

-No cruce el pozo si es lo que te preguntas, solo lo sé y ya. –Privilegios de ser de sangre noble, el ambiente fue impregnado por la peste de Naraku.- Rin vete ahora.

-Si amo Sesshomaru.

-Jajaja Sesshomaru ¡Felicidades! Jajajaj que lastima que no vas a conocerlo...

CONTINUARA...

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¡HOLA!  a los que me leen quiero darle las gracias :) espero disfruten la historia!!