World Ixion/SAGA (1era temporada)

Interludio - Rafiel

Rudel estaba en su nueva aeronave, Schwerts, volando directo a Aster.

Tenía un montón de cartas que eran del reino a los funcionarios y embajadores que trabajaban en Aster.

Una de esas cartas enviadas era para él.

Se preguntó cómo era posible eso hasta que leyó de quien era, el emisor era Rafiel.

La carta decía lo siguiente.

"Buenos días, tardes o noches cuando lea esto. Le escribo para informarle que su ayuda está ayudando poco a poco al antiguo mancomunado."

Tras la guerra, el Mancomunado de Talis perdió y fue abducido por el reino.

Debido a que los Kingsfort traicionaron al reino, estos fueron eliminados. Esto dejó un hueco en el titulo de los tres lores.

El actual Ducado de Talis es quien se convirtió en el nuevo tercer lord.

Pero era solo para que los demás reinos no piensen que Altfode estaba debilitándose.

Al final, solo hay dos lores y un reemplazo del que nadie esperaba nada.

Rudel mientras leía la carta, recordó como lo conoció a Rafiel.

Era después de la guerra. Para Rudel, un grupo de adultos estaba molestando a un niño.

Le dieron su propia habitación la cual era custodiada por sirvientas.

Rudel había pedido permiso y entró con un juego de mesa.

Rafiel lo vio, pero no se movió de su cama.

El tiempo pasaba y Rudel seguía entrando y jugando solo diferentes juegos de mesa.

Entre ellos, era ajedrez el que llamó la atención del joven rey.

Rudel jugaba mal, Rafiel recordó que su padre jugaba mucho y le enseñó a él.

No aguanto más y decidió enseñarle como se jugaba. Rudel sonrió y así, pasaron el tiempo ambos hasta que volvió al antiguo mancomunado.

Rudel terminó de leer la carta y murmuró.

"Espero que esté bien."

◇◇◇

El antiguo mancomunado, llamado ahora Ducado de Talis.

Era una tierra pobre, sus estructuras eran de piedra y no cemento como las del reino.

La pobreza estaba evidente en las calles y hasta en el palacio.

La gente vivía el día a día.

Rafiel tomó un descanso y fue al cementerio.

Visitaba no solo la tumba de sus padres, también las de los que murieron en la guerra.

Un grupo de sirvientes le acompañaron.

Había otro grupo de personas en diferentes tumbas.

Rafiel oraba a la Sacerdotisa por los difuntos.

(Madre, padre, espero que estén bien.)

(Me esforzaré en tratar de mejorar nuestro país gracias a la ayuda del conde.)

En una tumba cercana podía escuchar a una mujer llorar. Ella tenía unos niños pequeños a su lado.

Los niños gritaban el nombre de su padre mientras que la madre se aferraba a su tumba.

En la tumba a un costado izquierdo donde Rafiel estaba, una joven lloraba.

Su vientre estaba creciendo.