Historia corta - Felices fiestas

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En mi vida anterior, diciembre era un mes de lo más asqueroso en comercialismo, no había nada de malo en ello.

El problema era que la gente buscaba excusa para gastar de demás y presumirlo a otros; sus amigos, vecinos, familiares, etc.

Yo también formo parte de esos hipócritas ya que me auto regalaba cosas. ¿Es triste hacer eso? No, no lo creo. Triste sería estar en una fiesta donde no te quieren y estar en un rincón tomando tu bebida en solitario... obviamente no estoy hablando de mí.

Me desvié mucho del tema, la cosa es que yo, Rudel van Bradford. Un reencarnado en un asqueroso mundo de fantasía, voy a celebrar una fiesta similar en este mundo.

El nombre es raro, se llama [Sacerdotisidad].

...

No haré un comentario acerca de eso, pero... parece que la dichosa Sacerdotisa nació en este mes. El que casualmente es el último mes del año, vaya coincidencia tan desagradable.

...

Bueno, me dolerá la cabeza si pienso en ello, mejor recuerdo lo que estaba haciendo.

Oh, ya recordé.

Mi motivo de estar en la academia era simple, voy a festejar esa festividad con mis amigas, Alisa y Airi, por supuesto, yo y ellas Iremos a nuestras casas a festejar con la familia.

Con excepción de Airi la cuál irá a casa de Alisa por algún motivo.

Después de los sucesos del semestre pasado, el caos de ese exagerado y muy, pero, muy exagerado intento de asesinato de parte del bastardo de Klein, nuestra amistad se fortaleció más.

"Amo, ya llegaron." Me notificó una voz electrónica, era mi fiel sirviente y esclavo, Ixion.

"Entendido. Hazlas pasar." Le dije mientras me arreglaba mi ropa roja con blanco. Otra vez, no diré nada al respecto de las similitudes.

Al verlas entrar a la sala...

"Bien- ¡woooh!"

Me quedé perplejo ante lo que vi.

Ambas usaban ropa festiva como yo, la diferencia era que ellas hacen lucir muy sensual lo que usan.

Un gorro de duende rojo como el mío.

Zapatos negros con medias rojas, solo que las de ellas eran más largos que llegaban hasta los muslos regordetes.

Una blusa sin mangas ni cuello y falda corta hasta los muslos. Yo usaba una camisa y pantalón rojo que también eran festivos.

La blusa claramente daba a entender que no tenían brasier ni nada más debajo de esa tela roja, la cuál gloriosamente mostraba el firme tamaño de sus pechos.

Dos pares de pechos, unos grandes y otros mucho más grandes. En ese orden estaban.*

"Rudel..." Dijo el gran pecho, ¡es decir Alisa!

"Enfoca tus ojos aquí arriba."

Cuándo oí eso, inmediatamente supe que la volví a arruinar.

Rápidamente levanté mi mirada y noté cómo Airi me daba una mirada que no sabía que decir, mientras que Alisa daba una mirada de repulsión y molestia.

¡Oigan, soy un hombre, dejen de apuntarme con esas armas!

Me disculpé en sus caras y les pedí que se sentaran para almorzar la cena festiva que preparó Ixion, el cuál desapareció por algún motivo.

Al terminar de comer hicimos un intercambio de regalos.

Airi se puso a temblar cuándo vio la montaña de regalos que les traje mientras ella solo tenía dos cajas con envoltura hecha a mano.

Alisa también se asustó ya que ella parecía tener una montaña de cosas escondidas en otro lugar ya que estaba haciendo señales extrañas en la ventana.

Tanto Alisa como yo, nos pusimos a buscar dos regalos en nuestro montón de cosas que trajimos y ahora serán solo basura.

Logramos reunir dos cada uno y procedimos a intercambiarlos entre nosotros.

Alisa y yo nos quedamos viendo como Airi habría nuestros regalos con una sonrisa angelical.

Inmediatamente, deseé que Ixion tuviera cámaras digitales para guardar este hermoso momento.

Cuándo ella notó que la mirábamos preguntó si tenía algo en la cara y lo negamos al unísono.

Alisa fue la siguiente, su cara hizo una expresión de alegría cuándo abrió el regalo de Airi.

Mientras que, con el mío, hizo una mueca que no sabía si trataba de decir que le gustó o no, quizás le haya desagradado...

Por favor, no seas así y dime que te pareció mi regalo que elegí con todo mi corazón puesto en ello.

Luego fue mi turno, el regalo de Airi es algo que me serviría mucho en mis clases y el de Alisa es para hacerme estudiar duro cosas que no quiero.

Igualmente, son regalos maravillosos.

Como la noche es joven nos pusimos a jugar juegos de mesas, cartas, adivinanzas, toda clase de juegos que podamos disfrutar.

Finalmente, ya era hora de terminar. Ya era muy tarde y los demás estudiantes que estaban como nosotros aquí se estaban yendo.

Cuándo me levanté, noté algo raro, en la parte superior colgaba un muérdago.

¿Qué hacía allí?

No solo yo lo noté, las chicas también. Solo que sus rostros tenían una cara roja debido al mirar el muérdago.

Deben ser alérgicas.

Inmediatamente lo tomé y lo guardé en mi bolsillo.

Cuándo les dije que ya no había problema, por alguna razón ambas me pisaron.

¿Por qué fue eso?

Luego se fueron molestas, no sin antes decirme en un tono con ira hacia mí.

"¡Felices fiestas. Rudel idiota!"

Me quedé extrañado acerca de eso. Otra vez, ¿que hice mal yo?

Felices fiestas igualmente.

◇◇◇

Ixion estaba afuera observando desde afuera.

El había colocado el muérdago por una razón.

"Escuché de los pueblerinos que colocar un muérdago en una habitación cerrado habiendo un hombre y mujer allí, significaba realizar un acto íntimo entre amantes o interesados en el amor. Pero usted, como siempre, siendo un idiota que no comprende nada. Deseó que se de cuenta de su entorno algunas veces."

"Felices fiestas, amo. Espero que el próximo año pueda romper nuestro contrato."

De parte de los personajes y autor de World Ixion/SAGA. Se les desea a todos una muy feliz y querida Sacerdotisidad.

World Ixion/SAGA (1era temporada)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora