Amor Incondicional

Capítulo 9

Capítulo 9

   Una semana después de aquel viaje a Londres, me encontré con la desagradable noticia que se requería mi presencia en una reunión de accionista en la empresa que había pertenecido a mi abuelo. Era una exigencia si quería deshacerme de mi parte. Respiré hondo cuando de mis labios había salido una respuesta afirmativa a aquella reunión que acabaría finalmente con toda mi pesadilla.

   O así creía.

   Durante todo ese tiempo había sido un completo cobarde y no había llamado a Sabrina. Cada vez veía su número de teléfono, pero me decía que era mejor no buscar lo que no se me había perdido. Ella era una chica londinenses. Y yo simplemente no quería nada con aquella ciudad. Aunque la vida se empeñara de nuevo  hacerme regresar.

    Miré hacia mi ventana, mientras escuchaba: "I'm a mess" de Ed Sheeran, en mi Ipod observando aquel paisaje que me recordaba mi pasado y de dónde era. Y sobre todo, aquellos motivos que me hacían querer rehusarme a la idea de aceptar lo que había sido mío por herencia. Y al mismo tiempo, me había destruido.

    Bufé en mi silencio cuando pensé en todo ello, y sobre todo, en Sabrina.

    Sabrina... ¿Por qué seguía pensando en ella, cuando la verdad, lo que quería era huir de ella? Cerré los ojos cuando encontré una respuesta.

  Ella me interesaba más de lo que mi deseo de querer alejarme.

—No seas idiota, Styles... Y has lo correcto. No hay nada que puedas ofrecerle...

   Sin saberlo, ella también estaba viviendo una terrible pesadilla, al escuchar la insistencia de su padre de verla en aquella reunión. Se encontraba tan irritada, que una parte de ella quería gritar que no le interesaba absolutamente nada. Pero, si quería en realidad terminar con todo, debía actuar inteligentemente en aquella reunión. Su padre debía entenderle por las buenas y por las malas. Y todo ese estrés realmente no le estaba haciendo bien a su salud.

   Y lo triste de todo aquello, era ver como su padre fingía no saberlo. Ella se lo había confesado aquella primera vez cuando aquel informe médico le había dado aquella noticia. Sin embargo, había sido como hablar con la pared.

    Aquello realmente le había dolido en lo más hondo de su alma.

   Desde ese momento se había prometido que sólo ella sabría de su estado. La verdad era solo suya y no la compartiría con nadie. Fue en ese instante cuando llegó aquella oportunidad de ir una semana a Holmes Chapel como unas especies de vacaciones y sus tristezas se esfumaron un instante, cuando alguien se cruzó con su presencia. Aquellos ojos verdes de un rebelde que ella jamás imaginó cómo podría cambiar su vida.

   Pero la verdad, en su presente, era que había pasado una semana y él no le había escrito. ¿Por qué había pensado que todo, de pronto, podría ser diferente?

   Una lágrima bañó sus ojos castaños cuando la verdad volvió a derrumbarla. Había sido una simple ilusión.