Difícil Situación《Gastina》|✔| #DD2

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—¿Lista para tu primer día?—pregunté a Nina mientras ingresábamos al restaurante.

—Siento que ya hasta olvidé como se hace el café—bromeó riendo.

Luego de un mes en Argentina, finalmente había regresado a Oxford para continuar con el trabajo, además de que quería empezar a preparar exámenes para la vuelta de clases. Durante ese tiempo estuvimos hablando mucho por llamadas y mensajes, parecía que los años no habían pasado, nos seguíamos llevando con la misma confianza de siempre.

—Que suerte que tienes un jefe tan bueno que va a ayudarte—comenté aludiendo a mi persona, y logrando que ría de nuevo.

—Debo ser la más afortunada.

Con una sonrisa ingresó al baño a cambiarse, y yo hice lo mismo en el baño conjunto. Luego de ya estar listos, iniciamos con nuestro trabajo normal.

—Te ves muy animada—me animé a elogiar mientras limpiaba la barra y la veía preparar una bandeja.

—Sinceramente, el viaje a casa me hizo bien pese a las circunstancias en que se dio—contestó yendo a una mesa y entregando el primer pedido de la tarde. Luego regresó:—Este mes con mamá, los chicos, fue bueno para dispersar mi mente.

—Me alegro mucho que lo veas así, me gusta verte feliz—le sonreí dejando un poco de lado mi trabajo.

—Gracias, Gastón, en verdad que eres un muy buen amigo.

Luego de eso, dejó un beso en mi mejilla y se encargó de atender a los segundos clientes que llegaron.

No voy a negar que la palabra "amigo" había dolido, pero era la realidad. Eso era yo ahora para ella, y debía aceptarlo. Entre Nina y yo todo parecía ir bien, pero no para ir más allá de eso, en un estilo romántico. Estaba bien, estaba bien con eso. Me agradaba continuar con nuestra amistad, ella era una persona que valía la pena mantener en mi vida.

—¿Te parece si este viernes vemos la temporada cinco de Brooklyn Nine-Nine?—preguntó Nina mientras limpiábamos el local.

—Por mi sí, aunque desde ya te digo que vas a llorar—le advertí.

Desde que le había recomendado esa serie, se había obsesionado. Todos los días llamaba para ver aunque sea un capítulo, y cuando era fin de semana, pedía que hiciéramos una maratón. Decía que estaba fascinada con la serie, y cada vez suspiraba más y más por Jake Peralta. A ver, la serie es buena, por eso mismo la recomendé, pero yo no estaba a su mismo nivel de intensidad. Lo que me recordaba que esto solo había pasado cuando le recomendé friends, ahora no existe día en que no llore por Chandler Bing.

—¿De alegría o tristeza?

—¿Ambos?

—¡Me encanta!—sonrió emocionada haciendo que suelte una pequeña risa.

—Pensé que la verías con Ana y Martina—dije haciendo alusión a sus amigas.

—A Martina no le gustó, lo cual me parece una deshonra y ahora no somos amigas—declaró totalmente seria, aunque no pude evitar reírme.—Y Ana se va mañana a España con su familia, ¿y tus amigos estarán allí?

—Alex no, está con su familia también, y Jorge de seguro hará horas extras para ver si consigue dinero para poder irse, de seguro si aparece estará muy cansado como para unirse.

—Espero que lo consiga, es muy orgulloso como para dejarse ayudar—comentó, y no pude estar más de acuerdo.

—Espero que sí, se está esforzando mucho, pero ya sabes como son los jefes, hacen lo que quieren, al menos su mayoría—me encogí de hombros.