MERCY [Bellamione fanfic.]

Capítulo Xlll: Send My Love (To Your New Lover)

Escena eliminada/ escena bono. (escucha la canción para entender el chiste jaja)

*Una lechuza se posa en la ventana de la habitación de Bellatrix*

*suelta una carta vociferadora que comienza a cantar esta canción*

*Bella mira a la ventana y encuentra a Cordelia abajo, mirándola mientras hace su propia versión de la letra en lágrimas y bailando con una botella en la mano¨*

*Bella alza sus hombros en tono de "mm ya qué" y comienza a bailar mientras suena la canción. Alzando sus manos y perreando*

*Cordelia se enfada y se va*

*Bella mira la escena sin saber que pasa pero decide mejor seguir bailando*

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Cordelia y Bellatrix se hayan en el piso mientras la mortífaga intenta consolar a su ex novia. Se sentía fatal de haberle hecho lo que le hizo, no supo cuánta infelicidad sentía Bellatrix hasta que ella misma tuvo que mostrarle. Esto no era un pleito de si le quiso o no, esto era que en el camino de quererla se fue perdiendo ella misma hasta quedar lo que le abrazaba ahora. 

-Perdóname, por favor.- Cordelia le abrazó con fuerza. Haciendo que Luna se apiadase de ella y fuese a consolarle. Al acercarse Luna, Bella se levantó, le ofreció la mano y agregó en tono cansado:

-No hay nada que perdonar. Tú no eres la que tiene que pagar todo esto. 

-¿Entonces quién?- Cordelia se incorporó para sostenerse de su primogénita. 

-Yo, por supuesto.- Iracebeth  apareció al frente de ellas.- ¿O no Bellatrix?- Sonrió con sorna.

Hermione se acercó y se hizo junto a Bellatrix pues, aunque a simple vista se viera en buenas condiciones, algo que no sabía qué le decía que esa mujer estaba a punto de desmayarse, había perdído mucha energía. imagínate, alimentó todo un mundo hasta la saciedad. Si ella caía no permitiría que Iracebeth aprovechara ese momento de debilidad. 

-Eres la persona más pertinente en aparecer, Betty.- Bella sonrió.- No voy a descansar hasta que tu Horrocrux se vaya a la mierda. Te lo prometo. 

-Eso es cierto, yo lo sé. Aunque no lo parezca, las dos somos iguales, y si también me hubieran mentido y manipulado... destruiría hasta la última piedra en pie. Pero también es cierto, querida Bellatrix, que ya hiciste tu jugada.-Iracebeth se acercó con las manos en la espalda.-Y ahora me toca a mí.- Narcissa y Andrómeda aparecieron cuando ella estiró las manos. Estaban amordazadas y vendadas. Pero esto cambio con un chasquido de Iracebeth. Ahora veían y con los ojos como platos a su hermana y a Nymphadora quien intentó acercarse a su madre Andrómeda pero Iracebeth la devolvió con hechizo haciendo que se golpeara contra una pared.