-Jack-
Años atrás.
—¿Qué traes ahí? —me inquiere Scar con su voz ronca y perezosa, sentado a mi lado del comedor.
—N-Nada —respondí con la voz temblorosa, ansioso por el peligro inminente que me acariciaba la nuca siempre que estábamos en el comedor. En ese sitio siempre me sentía aún más amenazado... oh, también cuando nos sacaban al patio. Temía porque alguna vez me mataran a golpes mientras los oficiales ignoraban el hecho o no lo notaban.
He llegado a medidas insospechadas. Mi instinto de supervivencia se activó como nunca antes lo había hecho.
—No te creo, déjame ver —exigió con voz tosca. Estiró su brazo y sostuvo la mano que tenía escondida en mi regazo. Al observar lo que escondía, sus pupilas filosas se dilataron y el iris verde brilló de diversión —. Eres astuto, mocoso. Un artefacto esplendido. Cada vez me agrada más —susurró con una sonrisa ladina que hacía que sus arrugas de expresión se marcaran aún más.
Me lamí los labios secos, dándole una perspicaz mirada a mi alrededor. Al parecer, nadie era consciente de nuestra conversación. Sin embargo, lo silencié pronunciando un:
—Sh —me devolví a mi alimento con aparentes aires relajados.
Debo aparentar, este sitio se construye de imagen Todo este tiempo que he estado encerrado aquí, he aprendido eso: debes lucir fuerte, aunque no te sientas así. Debes imponer, aunque quieras meter la cabeza bajo la tierra como un jodido avestruz. Y, sobre todo, mantenerte siempre alerta, aunque supuestamente estés solo o no tengas enemigos.
Ni siquiera a Scar le tengo confianza a pesar de sus consejos, enseñanzas y advertencias que debo tomar viviendo en prisión; ¿cómo podría hacerlo con un hombre que mató con sus propias manos a su hermano?, carajo. Estoy seguro que quiere mi simpatía para manipularme, es obvio, él planeaba crearse una maldita secta; lo supe porque me lo platico en una noche de insomnio, donde ninguno de los dos podía cerrar los ojos. Posiblemente, ese tema de conversación le pareció gratificante gracias al aburrimiento y el cansancio. Cabe decir, que él concilió el sueño después, pero yo no, esa noche no pude dormir más que tres horas. Scar me asustaba y sentía inquietud porque fuese mi única compañía.
Se que rayé en lo ingenuo por haberle tenido un poco de confianza a su amigo que siempre abogaba por mí. Pero, a él ya no estaba, le habían otorgado libertad condicional hace ocho meses atrás.
Suspiré entrecortadamente y comí de mi charola. Llevo cuarenta y cinco meses en este sitio y siento que me estoy pudriendo lentamente. Odio este maldito lugar, ¡maldita sea!, ¡todos estos bastardos quieren bailar en mi jodida tumba!
Quiero irme a casa, por favor, quiero irme a casa. ¡¿Por qué tuve que ser tan imbécil?!, ¡¿por qué me tuvo que pasar esto?!...
Solté un suspiro pesado con la intención de deshacerme de la pesadez de mi pecho. Aprete los dientes y el corrosivo sentimiento de la vergüenza se resbaló por mi columna vertebral provocándome un estremecimiento. ¿Por qué me uso?, ¿por qué ella no me amo como tanto yo lo hice?
—Porque eres un mocoso iluso —Scar se rio guturalmente, de una risita que ascendió paulatinamente a una carcajada.
¡Demonios!, había hablado en voz alta. O al menos, con el suficiente volumen para que él me escuchara. Un calor insoportable se apropió de mi rostro y en ese momento, supe que me había sonrojado. Me mordí el labio inferior, estremeciéndome y tragando pesadamente. Me encorvé para mantener mi rostro en la charola y así nadie fuese testigo de mi rostro.
Inhalé y exhalé por la nariz queriendo sacar por ahí toda la tensión que me retorcía las entrañas. Miré a Scar y este tenía su rostro fijo al frente, con el porte de un maldito rey. Él imponía involuntariamente, sin siquiera ser consciente de ello. Había algo en su postura, en su forma de mirarte como una sabandija, como la peor mierda que haya visto, que hace que te postres a sus pies. Me ha impuesto tenerle algo de respeto sin querer hacerlo.

ESTÁS LEYENDO
¿Cómo Ser Un Matrimonio?
FanfictionSus padres los unieron sin siquiera conocerse. Ambos tan diferentes, tan... opuestos. Si, ella es guapa, muy guapa. Si, él es atractivo, bastante bien parecido. Pero eso no lo era todo como para casarse. Esta es la embarazosa situación de Jack y Els...