Nuestro propio reino (hiatus)

~Alguien especial...~

Killua podía sentir la brisa chocar contra su rostro, respiraba ondo logrando que el aroma del bosque entrara por sus fosas nasales. El sonido de la corriente del río lo tranquilizaba, era un lugar realmente hermoso. Se sentó en la orilla y ató a su caballo a un árbol, se asomó, y miró su reflejo en el río, era un desastre, su cabeza era un desastre, ahora tendría que buscar a alguien que lo acompañara por el resto de sus días, alguien con quien formaría una familia, alguien con quien... Un fuerte ruido lo desalojó de sus pensamientos poniéndolo en alerta. Se reincorporó rápidamente sacando su espada y apuntando hacia donde provenía el sonido. La razón por la que estaba tan alerta era porque en ese bosque nunca había personas y ni hablar de los animales, ya que no había muchas bayas u otras presas de las que alimentarse.

-¡¿Quién eres?!- preguntó Killua con tono demandante- ¡Sal de ahí ahora mismo, o yo te sacaré!

Se escuchó un pequeño ruido nuevamente, era la señal de que lo que sea que estaba ahí se estaba acercando. El peliblanco respiró profundo y se preparó para atacar, pero antes de que pudiera hacer cualquier movimiento escuchó una voz

-¡Lo siento, por favor no me lastimes!- era una voz dulce-, solo pasaba por aquí, no era mi intención molestar...- un chico apareció de entre las sombras, tenía unos hermosos ojos color castaña y el cabello negro con las puntas verdes

Llevaba puestas unas ropas de cuero al igual que sus botas. Tenía una especie de capa que lo protegía del viento, parecía de su misma edad. Killua quedó estático por unos segundos, jamás lo había visto por el lugar, ya que, apesar de que él era de la realeza, conocía a la gente del pueblo, pero a él no lo reconocía. Volvió a ver a los ojos del chico chocando las miradas, bajó la espada y la guardó, estuvieron varios segundos perdiéndose en la mirada del otro, hasta que el desconocido habló:

-¡Eres el príncipe! Disculpa mis malos modales- titubeó-. Mi nombre es Gon Freecs- hizó una reverencia algo avergonzado

-Está bien, un gusto- Killua se acercó algo curioso hasta el pelinegro-. A pesar de que conozco a mucha gente del pueblo jamás te había visto por aquí, ¿Qué edad tienes?

-15 su majestad, en unos días cumpliré los 16, ¿Qué edad tiene usted?- preguntó curioso

Killua se sorprendió un poco, ambos tenían la misma edad, y por alguna razón, le causaba ternura la curiosidad ajena

-Yo también cumplire los 16 en unos meses, tenemos la misma edad- Los ojos del pelinegro se iluminaron y una enorme sonrisa se formó en su rostro

Le parecía extraño que un pueblerino no supiera acerca de eso ya que estaba siendo el motivo de charla más reciente por todo el lugar. Killua supuso que Gon era de algún pueblo lejano o solo era muy distraído

-¡¿De verdad?! ¡Entonces podríamos ser amigos!- empezó a dar saltitos, pero frenó en seco al mirar nuevamente al peliblanco- ¡Lo siento! Eres el príncipe, supongo que no tienes tiempo para eso, fue algo estúpido y descortés de mi parte...- Los ojos del castaño perdieron el brillo de hace unos momentos

Eso preocupó por alguna razón al príncipe, quien de manera inmediata respondió

-¡No! Digo... Está bien, no me molesta, además no tengo amigos- le dedicó una pequeña sonrisa

En cuanto subió la vista para ver al más bajo se sorprendió por un instante, el brillo había vuelto al dueño de los ojos bellos, quien ahora sonreía de manera cálida

-Entonces, ¡A partir de ahora seremos amigos! Oh...- Gon dejó de sonreír por un momento, Killua se preocupó nuevamente

-¿Pasa algo?- cuestionó con curiosidad

-Es que, somos amigos, pero...- el pelinegro levantó su mirada encontrándose con la del príncipe- No sé tu nombre

Killua se sorprendió, ¿Realmente existía alguién en el reino que no conocía su nombre? Soltó una risita que no pasó desapercibida por el ojicastaña, quien puso una cara de confusión ante la reacción del peliblanco, a Killua le causaba ternura ver como se desilucionaba por una simple cosa, así que para no hacerlo esperar más habló

-Killua

-¿Eh...?

-Killua, es mi nombre- dijo el ojiceleste con una sonrisa de costado

-Killua... Que bonito nombre- expresó Gon con una sonrisa

Un escalofrío recorrió todo el cuerpo del príncipe, sus mejillas se ruborizaron y giró la cabeza mirando hacia otro lado, no entendía por qué su cuerpo había reaccionado de esa forma, pero estába avergonzado

-Sí, sí, lo que sea...- murmuró Killua

-¡GOON! ¡¿DÓNDE ESTÁS?!- una voz se escuchó de fondo, estaban buscando a Gon

Killua giró su cabeza buscando una respuesta por parte del pelinegro

-Es Kurapika- exclamó

El peliblanco puso una expresión de no entender, así que el moreno habló nuevamente

-Es un amigo, tengo que irme, me están buscando. Entonces, ¡nos vemos Killua!- lo saludó con una hermosa sonrisa y se retiró corriendo del lugar.

Killua se quedó estático en su lugar, y sin darse cuenta, estába sonriendo embobadamente, reaccionó segundos después y sacudió su cabeza despejandose de sus pensamientos.
Se dirigió hasta su corcel, lo desató y se subió a este emprendiendo viaje hasta el palacio nuevamente, pero ahora, volvía con un nuevo amigo.
Ninguno de los dos lo había notado, pero había alguien observandolos desde las sombras...

-Con que Gon eh~, quién diría que "nuestro pequeño Kill" haría un amigo, esto sera interesante- vaciló Illumi con una sonrisa de lado