Capítulo 6

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Silvia.

Es lunes  6 AM y ya estoy vestida y totalmente lista para ir a trabajar. Luego de que Gabriel se fuera a su casa agarré un bolso pequeño y fui a casa de mis padres. No encontré a mi hermano pero mis padres me trataron como si fuera una niña. Me malcriaron y me dieron muchos mimos, lo necesitaba. Apague mi teléfono solo para estar enteramente con mis padres y disfrutarlos. Ya que hace mucho no pasa eso. Voy a confesar que también fue para castigar un poco a Gabriel, este día no lo veré en el trabajo porque el es accionista de la empresa pero trabaja en sistemas. Si, son cosas diferentes pero interesantes. Supongo que lo veré al llegar a casa.

¿Cómo reaccionaras?

Sonrió mientras mi madre me mira con una mueca graciosa.
Julia- ¿Esa sonrisa es por alguien?
Silvia- un amigo... Se llama Gabriel.
Julia- ¿Amigo?
Silvia- te voy a contar resumido. Carlos y yo ya no tenemos nada de nada... Y pues Gabriel y yo empezamos a ser amigos y...
Julia- ¿Te gusta?
Silvia- mucho... Me divierto muchísimo a su lado.
Julia-  me alegra mucho por ti mi amor.
Silvia- Gracias... ¿Y papá?
Julia- Fue a comprar cosas para los arreglos de la casa.
Silvia- me despides de él... Tengo que ir a trabajar.
Julia- ¿vendrás el  próximo fin de semana?
Silvia- no lo sé... Te avisaré.
Julia- muy bien. Que te vaya muy bien. Cuídate.
Silvia- si mami.
Mi madre me dió un beso en la frente y caminé mientras tomo el juego que me preparo ella  y lo puso en una botellita.

El día pasó entre reuniones, firmas y videoconferencia con el presidente de la empresa. En fin un día agotador. Manejo hasta llegar a mi edificio, subo por el ascensor hasta mi piso y cuando se abrieron las  puertas estaba Gabriel con los brazos cruzados y su mirada fija en mi. Ya había olvidado que me desaparecí. Se acerca a mi rápidamente y cuando quiero escapar me toma en sus brazos y me lleva hasta su departamento.
Silvia- ¡Suéltame!
Gabriel- No... Es en serio que te fuiste otra vez y te llevaste todo... Todas mis cosas, documentos, dinero en efectivo como también las tarjetas porque están en la maleta. Mi medicina.
Silvia- no me di cuenta... ¿Medicina?
Gabriel- tengo insomnio y no pude dormir... ¿Ves esto?
Dice mientras me baja al piso y acerca de rostro para que lo vea bien sus ojeras.
Silvia- yo te veo tan guapo como siempre.
Gabriel- no vas a arreglarlo con tus palabras bonitas.
Él va hasta la puerta y la cierra con llave. Camino detrás de el y trato de salir pero no me deja.
Silvia- ¿me vas a secuestrar?
Gabriel- Silvia... Tenía una cita ayer y no pude cancelarla porque en el teléfono quedó el contacto
Silvia- si era con alguna mujer, pues... Que bien.
Gabriel- era una clienta.
Silvia- Necesito ir a mi cama ya.
Digo con voz cansada y seductora pero él no hace más que cruzar los brazos y correr a esconder las llaves. Me quito los zapatos y por más que corro no logro ver esas llaves.
Silvia- No inventes... Déjame ya.
Gabriel- Me dejaste sin un beso. Aunque sea lo quería en la mejilla.
Silvia- ¿Me vas a castigar?
Digo mirando su habitación, es grande, su cama está perfectamente tendida, las cortinas son blancas y las paredes gris.
Gabriel- Si.
Silvia- ¿Que me vas a hacer?
Me acerco a el y me pongo de puntitas de pie para rozar mis labios con los suyos.
Gabriel- Quítate el saco.
Silvia- mmm... Si no quiero ¿Que?
Gabriel- Silvia... No voy a hacer eso que estas pensando.
Silvia- ¿Lees mentes?
Gabriel- No. Pero tú mirada es lujuriosa.
Río mientras me quito el saco y luego me quito la camisa quedando solo con mi sostén. Me siento en su cama apoyando mis manos hacia atrás. Me mira y se que le gusta lo que ve.
Silvia- Lujuriosa... Castigame Gabriel.
Digo evitando reír. Su mirada es de confusión y es cuando empiezo a reír pero el sale de la habitación y enseguida vuelve, hay  algo que no me gusta.
Gabriel- abre la boca.
Silvia- no.
Gabriel- entonces cierra tus ojos.
Silvia- no... ¿Que vas a hacer que toque?... Yo quiero verlo.
Digo divertida pero el entonces sale nuevamente y tiene una caja negra. La abre y me arroja lo que hay dentro, al ver lo que hay grito fuerte tapando mis ojos y cayendo a la cama.
Silvia- ¡Eres un idiota!... Te odio.
Escucho su risa y luego cuando abro la boca para hablar el me pone eso en la boca. Una cucaracha, me va a dar algo.
Gabriel- masticalo.
Silvia- ¡No!
Digo sin mover mi lengua. Estoy recostada en la cama con estos bichos esparcidos por mi cuerpo. El bicho no se mueve, en mi lengua siento algo dulce. Gabriel se sube encima de mi y besa mi mejilla.
Gabriel- confía en mí.
Con temor muerdo sin abrir los ojos, siento asco pero luego algo se esparce por mi boca pero es dulce.
Gabriel- abre tus ojos Silvia.
Sigue riendo. Abro mis ojos lentamente y al ver bien a esos bichos veo que son de chocolate.
Gabriel- me costó conseguirlos pero son muy ricos. ¿No?
El sigue riendo mientras lo miró con enojo y lo empujo mientras camino hasta la ventana. Le doy la espalda.
Silvia- Casi me matas del susto imbécil.
Gabriel- tenía que vengarme. Pero son ricos... Amas el chocolate... ¿O no?
No respondo, el se acerca a mi y rodea sus brazos por mi cintura mientras apoya su mentón en mi hombro. Hace a un costado mi cabello y besa mi cuello mientras cierro mis ojos.
Gabriel- ¿Estás saboreando las tripas de la cucaracha?
Volteó y vuelvo a empujarlo mientras camino alejándome de el.
Silvia- vete a la mierda.

¿Esto es Amor? (Completa)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora