Capítulo 40

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Gina.

Camino hasta casa de Silvia, podría llevarme al chófer pero quería caminar un rato pensando en cómo decir está noticia. Vanesa y alguien más se llevaron a mis amigas. No pude sostener más de la mano de Bella ellos me empujaron y me dieron un golpe que no fue grave pero pudieron evitar que gritará.
En el camino me encuentro con un compañero del colegio. Él me molesta, ya me habían advertido de que quiere "seducirme" solo para acostarse conmigo. Asi que lo rechazo y trato de alejarme pero el quiere besarme a la fuerza. Me espanta el sonido de las llantas detenerse cerca nuestro.
Silvia- Ey déjala.
Dice una muy seria Silvia. Ella se baja y me aleja de ese muchacho.
- ¿Usted quien se cree que es?
Silvia- soy su tía... Y si te vuelves a acercar a ella te va a ir muy mal.
- ni que estuviera tan buena.
Dice y se va. Bajo la mirada y ella hace que la mire nuevamente.
Silvia- ¿Estás bien, bonita?
Gina- si. ¿A dónde vas?
Silvia- a buscar a Carlos... Hubo un pleito entre los tres.
Gina- Gabriel y tú se pelearon.
Silvia- si... No me quiere hablar. No me quiere escuchar.
Gina- no me digas... No me gusta verlos peleados.
Silvia- yo lo sé preciosa... No entiendo que le dijo Carlos. Yo estaba dormida y no logré escuchar todo.
Gina- ojalá se solucionen sus problemas... Yo iba de camino a tu casa.
Silvia- ¿A mi casa?
Gina- si... Tengo una muy buena noticia.
Silvia- ah ¿Si?... Dime.
Gina- mejor vámonos a tu casa.
Silvia- está bien... ¿Ya comiste?
Gina- no... No hay nadie en casa y no me gusta comer sola.
Silvia- entonces en lo que me cuentas preparo algo.
Gina- ok. Me parece bien.
Me subo al carro y agradezco al cielo que pude evitar que se vaya. Gabriel me contó algo de lo que le pasó a Silvia. Al parecer ahora está mejor. La observo y la veo como como si nada hubiera pasado.
Silvia- ¿Por qué me miras de ese modo?
Dice mientras no quita la mirada del camino. Dudo si decir algo sobre su salud. Así que cambio de tema.
Gina- analizo y me imagino que estarás feliz con lo que te diga.
Silvia- solo estás causando que me ponga ansiosa.
Gina- tranquila que es algo bueno. Yo te quiero mucho y deseo que sonrías siempre.
Silvia- yo deseo lo mismo para ti corazón. Te adoro preciosa.
Llegamos a su casa ella me dice que me adelante pero no entro a su casa hasta que ella entra conmigo. Vamos a la cocina y se da cuenta que solo debe recalentar la comida.
Silvia- bueno parece que ya cocinaron.
Gina- ¿Y Gabriel?
Silvia- ¿Puedes fijarte la comida?... Voy por él.
Gina- claro.
Ella camina por el largo pasillo y entra a su habitación.

Silvia.

Golpeó la puerta de mi baño y el no está allí. Voy hasta la habitación de Bella y el esta sentado en la cama.
Silvia- Vamos a comer, tienes que comer.
Gabriel- no tengo hambre.
Silvia- por favor... Encontré a Gina en el camino y tiene algo que decirnos.
Gabriel- ¿En el camino?... ¿Te ibas a ir?
Silvia- tú no me querías decir que te dijo y iba a preguntarselo a él. Sé que me lo dirá porque quiere lastimarme.
Gabriel- eso es peligroso... Ese hombre está loco.
Silvia- pero no tenía opción. Tú no querías hablarme.
Gabriel- no es el punto. Yo estaba enojado.
Silvia- es totalmente injusto que no me pueda defender. ¿Por qué no me dices todo?
Ambos elevamos el tono de voz, sin dudas Gina nos oye desde la cocina. Gabriel camina de un lado a otro.
Silvia- ¿Por qué llorabas de ese modo?... ¿Por qué Carlos te dijo todo eso?... Me voy a volver loca, no se que demonios sucede, no se qué día es hoy, no se que pasa... Dime Gabriel. ¿Ya no me amas?
Mis lágrimas caen sobre mis mejillas, él se acerca pero me alejo.
Silvia- dime... No entiendo... Me estoy volviendo loca ¿verdad?
Gabriel- claro que no.
Silvia- ¿Mis hijas?... ¿Aparecieron?... Van horas desde que desaparecieron y ya estoy cada vez peor.
Gabriel- ¿Horas?
Silvia- dime qué pasa... ¿Hace cuánto desaparecieron?
Gabriel- cálmate Silvia. Perdóname ¿Si?
Silvia- No me hables de ese modo... No estoy enferma, dime qué mierda sucede. ¿Qué pasa?... ¿Qué me pasa?
Grito mientras estoy cada vez más segura que algo pasó conmigo. Gina entra a la habitación y se pone en medio de ambos.
Gina- calma... Los dos cálmense. Por favor. Tengo una buena noticia.
Silvia- Discúlpame Corazón.
Gina- tranquila... ¿Si?... Escúchame y tú también.
Ambos asentimos y ella mira al piso y luego nos mira a ambos.
Gina- la comida ya está... En lo que comen les digo.
Sin decir más vamos a comer, ella come un poco y luego nos dice eso tan misterioso que oculta.
Gina- ayer por la noche me llamo Ale.
Silvia- ¿Ale?... ¿Dónde está?
Gina- en España, Vanesa logro sacarla del país pero ella pidió ayuda y lograron escapar de Vanesa.
Silvia- ¿Es en serio?
Gina- si... Están al cuidado de una oficial y varios más. Dicen que están conociendo el lugar, para que Bella no se ponga mal.
Gabriel- ¿Están bien?
Gina- si. Están contentas porque ya van a volver. Ella no les hizo nada porque actuaron a tiempo.
Silvia- Que buena noticia... Muchas gracias por decirnos.
Gina- me llamaron a mi porque ustedes no contestan su teléfono.
Silvia- si. Últimamente no lo uso mucho, es más, no sé dónde está.
Gabriel- muchas gracias por la noticia tan hermosa.
Gina- ustedes se aman... Solucionen sus problemas, hablen, no comentan el mismo error de antes.
Silvia- ¿Cómo sabes?
Gina- supongo que sí se siguen amando con tal intensidad desde hace muchos años es porque algún mal entendido los separó.
Gabriel- puede ser.
Gina continúa comiendo mientras yo la observo y sonrió. Luego su teléfono suena y empieza a hablar felíz. Al terminar nos mira a ambos.
Gina- solucionen todo antes de que lleguen Ale y Bella... Sean sinceros.
Gabriel- está bien.
Silvia- ¿Por qué tanta felicidad?
Digo cambiando de tema. Ella levanta los platos mientras nos cuenta.
Gina- me voy a casa de mi abuela, voy con mamá y papá. Van a tomarse unas vacaciones y ellos serán solo para mí.
Silvia- que bueno eso. Disfruta mucho y dales mucho amor. Diles lo que tanto necesites decirles.
Gina- mamá y papá se dieron cuenta que me dejaban mucho tiempo sola. Tu me diste la fuerza para decírselos. Les dije que los necesito y que me siento muy sola.
Silvia- me alegra mucho que ahora todo cambió y para bien. ¿Cuánto tiempo te vas?
Gina- dos semanas. Quizás pasamos fin de año con la abuela.
Silvia- yo quería que estés con nosotros pero me hace feliz que puedas disfrutar de tu familia.
Gina- gracias Silvia... Tia postiza.
Sonrió y lavo los platos mientras Gabriel habla con ella. Trato de recordar que pasó estos días. Tantas cosas cambiaron. Un vaso se me cae de las manos y se rompe al chocar contra el piso.
Gabriel- ¿estás bien?
Silvia- si. Estoy bien. Solo fue un accidente.
Trato de levantar los vidrios con mis manos pero Gabriel me detiene.
Gabriel- no amor... Te vas a cortar.
Silvia- no te preocupes no me va a pasar nada.
Gabriel- tú vete y yo levanto todo.
Silvia- ok.
Me alejo de él y Gina me mira. Luego toma mis manos y me sonríe.
Gina- pase lo que pase recuerda que te amamos.
Silvia- ¿Por qué me dices eso?
Gina- porque hay veces que pensamos cosas que no son.
Suena la bocina del auto y ella sonríe. Me abraza y salimos hasta el auto de su madre. Gabriel se une a nosotras y nos despedimos de Gina.

Al entrar el me sienta en el sillón, piensa mucho que decirme.
Silvia- déjame hablar a mi.
Gabriel- dime.
Silvia- veníamos discutiendo mucho con Carlos, Ale me odiaba y Bella no quería estar conmigo. Entonces me sentía muy mal y luego tú entraste a mi habitación y me dijiste que me amas. Yo te sentí, sentí tu beso, eras tú... Y me entregué a ti... Yo estaba acomodando unas cosas que Carlos, en un ataque de enojo arrojo todo al piso. Entonces sin importar todo el desastre me entregué a ti, estaba en pleno acto cuando ya no eras tú... Era Carlos. Juro que no había tomado nada, no pude alejarme porque estaba muy confundida y perdida en mis pensamientos... Sé que no me vas a creer pero eras tú, yo te ví. Eras tú
Mis lágrimas caen, el se acerca a mi y toma mis manos. Entonces continúo.
Silvia- Unas semanas después estaba haciendo cálculos, tenía un atraso en mi menstruación. Entonces entró Carlos a la habitación y me quito el papel. Él confirmo que estaba embarazada. Tengo 41 años, creí que era imposible pero de todo modos me hice un análisis de sangre y dió negativo. No estoy embarazada... Perdóname mi amor. Me entregué a él como jamás lo había hecho.
Gabriel- tranquila... Perdóname tu a mi, por no escucharte. Si algo te sucedía hace momentos no me lo perdonaría.
Silvia- ¿Sigues enojado conmigo?
Gabriel- claro que no. Pero tengo que decirte algo. Necesito que lo tomes con calma.
Silvia- dime... Lo que sea, no me vas a dejar ¿Cierto?
Gabriel- siempre estaré contigo mi amor.
Silvia- y yo contigo.
Gabriel- (espera un largo tiempo) después de que las niñas desaparecieron tu entraste en psicosis.
Silvia- ¿Psicosis?... Pero no entiendo cómo yo...
Gabriel- dice el psiquiatra que es por un par de situaciones como... La perdida de Germán, estabas pasando por violencia con Carlos, las discusiones constantes con Ale, el secuestro también de ella y luego la desaparición de las niñas. Tu mente no soporto, suele pasar algo así cuando todo te sobrepasa.
Silvia- ¿Estoy enferma?... Yo no recuerdo que hice.
Gabriel- trastorno afectivos, depresión...
Silvia- ¿entonces cuando me entregué a Carlos, estaba en una crisis?
Gabriel- si. Estoy seguro... Estos días te dimos antipsicóticos como pudimos. Por eso estás mejor.
Silvia- ¿cuánto tiempo estaré así?
Gabriel- si te tomas los medicamentos durará muy poco.
Silvia- tengo miedo... ¿Puedo hacerte daño? O ¿A las niñas?
Gabriel- no voy a mentir... Puede ser, pero no te dejaré sola. Además estoy seguro que ya no te pasará algo así.
Silvia- ¿cómo estás tan seguro?
Gabriel- estaremos tan felices con las niñas que no habrá tiempo de sufrir.
Silvia- ¿Que hacia?
Gabriel- hablabas con Germán... Creo que yo era malvado y Carlos el bueno.
Silvia- cambie todo... Es que la perdida de Germán fue muy dolorosa... Lo extraño muchísimo, era como mi padre. Me dió tantas cosas y me enseñó todo lo que sé. Lo extraño mucho.
Gabriel me abraza y me aferró a él. Mis manos tiemblan pero no me suelto y lloro en sus brazos.
Silvia- perdóname si te hice daño. Yo jamás quise hacerlo.
Gabriel- fue doloroso verte de ese modo. Pero ahora estás mejor y eso es lo único que importa. Además vendrás las niñas.
Silvia- perdóname amor.
Gabriel- no tengo nada que perdonarte. Hace un rato te iba a decir eso pero no sabía si decirte todo.
Silvia- gracias por estar aquí.
Gabriel- gracias a ti. ¿Sabes?
Silvia- que mi amor.
Gabriel- mamá volvió y vino aquí.
Me alejo un poco de él y veo que no fue nada bueno su regreso.
Silvia- ¿Tu que piensas?
Gabriel- no se que pensar... Cambio.

<<¿Deberíamos creer en el arrepentimiento repentino de esa mujer?>>

Aún tengo dudas de todo esto, así que supongo en otro momento podré preguntarle todo. ¿Carlos sabe de esto?
Es lo único que me asusta.

¿Esto es Amor? (Completa)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora