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Aquel día Jirou no pudo dormir

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Aquel día Jirou no pudo dormir.

Era el día en que Momo regresaba después de un año.

Era el día.

Quería verla con todo su corazón.

Y esa vez no iba a huir.

Respiró hondo y salió de casa cargando su guitarra en la espalda.

Tendrían que haber llegado hacía más o menos una hora.

En unos minutos llegó al apartamento de Todoroki y picó a la puerta.

—¿Kyouka?

Momo parecía diferente, como si en ese año ambas hubieran experimentado cosas nuevas, pero seguía igual de hermosa que siempre.

—Momo.

Sus miradas quedaron congeladas hasta que la pelimorada la abrazó con todas sus fuerzas.

Sintió su cabello rozando su mejilla y sus brazos rodearla.

Se sintió en el cielo.

Sintió ganas de llorar.

—Lo siento muchísimo—dijo apretando más su agarre.

Había pasado más de un año, pero aquel "lo siento" impactó en ambos corazones como si hubiera sido ayer.

—No te preocupes. Yo también lo siento.

Su voz inspiraba dulzura, a la vez que su mano acariciaba su espalda.

—¿Puedo pasar? Quiero decirte algo.

La pelimorada se separó del abrazo y la miró a los ojos.

Sabía que sus errores ya no se podían enmendar, pero por lo menos quería tener a Momo a su lado aunque no fuera de la forma en la que le gustaría.

—Claro, pasa. Shoto no está.

Ambas se sentaron en el sofá de la sala.

La pelinegra la miró de reojo.

—Te has dejado crecer más el cabello—le dijo la más alta con una pequeña sonrisa.

—Sí...¿Te gusta?—preguntó tímidamente.

—Te queda muy bien.

Un leve sonrojo se dibujó en las mejillas de la más baja.

Se sentía como cuando eran estudiantes.

Aún recordaba el día que se conocieron en aquella clase de música.

—Gracias...¿Tú...? ¿Te ha ido bien el viaje? Vi las fotografías que colgaste—dijo mirándola.

—¡Sí!—sus ojos brillaron—Visitamos muchos sitios, aprendí más inglés ¡Y bebí mucho té! La verdad que fue una experiencia exquisita.

La pelimorada sonrió inconscientemente al escucharla.

Ruptura | MomoJirouDonde viven las historias. Descúbrelo ahora